Dennis Barton, La tradición clementina del Evangelio -17
Dennis Barton, La tradición clementina del Evangelio, edición de 2017
Capítulo 1. Redescubrimiento de la tradición clementina del Evangelio
Capítulo 2. El zigzag sinóptico y los dobletes
Capítulo 3. El origen del Evangelio de Marcos
Capítulo 4. El Evangelio de Marcos y Lucas-Hechos
Capítulo 5. Antijudaísmo en Mateo
Capítulo 6. La evidencia histórica temprana
Capítulo 7. Las liturgias (typicon o ustav) de las Iglesias orientales
Capítulo 8. La fuente Q y las profecías del Templo
Capítulo 11. El mundo judío y la taquigrafía
Capítulo 12. Cronología de 2.000 años
Capítulo 13. Datación de Mateo
Capítulo 16. La narración de la infancia en Lucas
Capítulo 17. El estilo de Lucas
Examinemos el estilo literario de Lucas. Hay una palabra griega usada 32 veces en los capítulos 3-53 del Evangelio de Lucas y doce veces en Hechos. Esta palabra ha sido traducida al español como “Sucedió que” o “Y sucedió que". Es una marca distintiva del estilo de Lucas.
Es rara en Mateo y Juan y aparece sólo dos veces en Marcos, donde él está tomando prestado de Lucas. Esta “huella digital” de Lucas aparece ocho veces en la narración de la infancia de Lucas (1:8, 1:23, 1:41, 1:59, 2:1, 2:6, 2:15, 2:46). Es una indicación clara de que el autor del Evangelio y de Hechos escribió también la “narración de la infancia".
La traducción RSV del Nuevo Testamento reemplazó la frase tradicional “Sucedió que” o “Y sucedió que” con “mientras", “mientras tanto", “y mientras” o “y cuando", o la omitió. De este modo la huella digital del estilo de Lucas se pierde de vista. Las traducciones más literales se encuentran en las versiones del Rey Jacobo [King James] y de Douay.
Cuando Lucas presenta una nueva persona o lugar, explica algo acerca de ellos.
1:5 - Herodes, rey de Judea.
1:5 - Un sacerdote llamado Zacarías.
4:31 - Cafarnaúm, una ciudad de Galilea.
7:11 - Una ciudad llamada Naín.
19:2 - Zaqueo… era cobrador de impuestos.
19:29 - Un lugar llamado Monte de los Olivos.
Sin embargo en los versículos 3:1 y 4:14-16, encontramos que se menciona a Juan, Jesús, Galilea y Nazaret sin ninguna explicación de quiénes o qué son. La razón es que ellos ya han sido presentados previamente en la narración de la infancia (HR 73-74). Ésta es una evidencia adicional de que la narración de la infancia de Lucas es una parte integral de su Evangelio.