Dennis Barton, La tradición clementina del Evangelio -19
Dennis Barton, La tradición clementina del Evangelio, edición de 2017
Capítulo 1. Redescubrimiento de la tradición clementina del Evangelio
Capítulo 2. El zigzag sinóptico y los dobletes
Capítulo 3. El origen del Evangelio de Marcos
Capítulo 4. El Evangelio de Marcos y Lucas-Hechos
Capítulo 5. Antijudaísmo en Mateo
Capítulo 6. La evidencia histórica temprana
Capítulo 7. Las liturgias (typicon o ustav) de las Iglesias orientales
Capítulo 8. La fuente Q y las profecías del Templo
Capítulo 11. El mundo judío y la taquigrafía
Capítulo 12. Cronología de 2.000 años
Capítulo 13. Datación de Mateo
Capítulo 16. La narración de la infancia en Lucas
Capítulo 17. El estilo de Lucas
Capítulo 18. Las Epístolas y la seudonimia
Capítulo 19. La Epístola a los Hebreos
La tradición nos cuenta que Pablo envió la epístola conocida como Hebreos antes del 70 DC a los judíos cristianos de Jerusalén. Esta tradición fue repetida en A Catholic Commentary on Holy Scripture [Un comentario católico de la Sagrada Escritura] de 1953, pero ignorada dieciséis años después. La edición revisada adoptó la teoría marcana de que la epístola fue escrita alrededor de 80-90 DC, por una persona anónima desde un lugar desconocido, para una comunidad principalmente gentil, probablemente en Roma (NCCHS 929a, 929b y 932b).
El Concilio de Trento emitió un decreto en 1546 ubicando la Epístola en la lista de las 14 epístolas de Pablo. Empero, aunque Trento favoreció la autoría de Pablo, no la definió directamente [como verdad de fe] (CCHS 928a).
En la Iglesia primitiva algunos habían dudado de la autoría de Pablo y estas dudas fueron revividas por los marcanos en el siglo XIX. Pero en junio de 1914 la Pontificia Comisión Bíblica (PCB) afirmó que: “No se debe atribuir tal fuerza a esas dudas tempranas” (CCHS 928a).
Trento definió la Epístola como sagrada, canónica e inspirada por el Espíritu Santo, pero la autoría de Pablo [de Hebreos] no es tan clara como la autoría de los Evangelios de Mateo y de Juan. Por lo tanto, según la PCB, un académico [católico] está en libertad de dudar de la autoría de Pablo si así lo decide.
Dado que los críticos no han podido encontrar una razón válida para negar la evidencia histórica a favor de la autoría de Pablo, no hay razón por la que ésta no deba ser enseñada en las escuelas. Las siguientes son razones para rechazar a los críticos de la opinión tradicional.