Consulta a los chilenos católicos
Dado que falta mucho para las próximas elecciones en Chile, quisiera exponer a mis compatriotas una idea de acción política que me viene dando vueltas hace tiempo, y preguntarles qué les parece, si sería bueno o practicable.
Considerando la forma como la clase política ejerce el poder, el votar aparece como la forma más directa de participación que tenemos en el proceso político, y al momento de ejercer ese derecho, para mí, al igual que para todos los católicos, los temas más importantes son aquellos relativos al respeto a la vida y la familia.
Tradicionalmente, la forma que teníamos de elegir a un candidato sobre otros en el voto, era conocer los principios doctrinarios de su partido y, si estábamos de acuerdo con ellos, podíamos buscar su símbolo en el voto y marcar a los candidatos que aparecían respaldados por ese partido.
No sé si alguna vez fue diferente, pero hoy es claro que los partidos políticos no se aglutinan en torno a ideas o doctrinas, sino a lealtades individuales, lo que los convierte en mera agencias de empleo del aparato público, y por lo tanto, quienes estamos interesados en proteger ciertos principios, ya no podemos guiarnos por el partido, como lo hacían nuestros padres.
En cierta forma, la democracia moderna, donde principios como la vida y la familia se convierten en moneda de cambio, nos exige a los cristianos invertir más tiempo y recursos, y emitir un voto más informado que antes.
Desde luego, esta es una preocupación a nivel mundial y organizaciones como Catholic Answers publican en cada ciclo electoral su Voter’s Guide for Seriuos Catholics. Ahí señalan que no debemos olvidar las elecciones referidas a cargos “menores” como alcaldes y concejales, que a primera vista no tendrían una ingerencia directa en los asuntos que nos interesan, por dos razones: en primer lugar, la política moderna funciona como una “carrera profesional", donde las personas van ascendiendo a distintos cargos, y elegir a la persona correcta en un cargo de menor importancia puede ganarnos mucho a futuro; y en segundo, porque los funcionarios electos establecen una compleja red de lealtades con aquellos que están más arriba en esta escala política, y esas lealtades pueden marcar la diferencia entre una decisión positiva o negativa que toma un ministro o senador.
En concreto, mi proposición es bastante modesta y apunta a que los cristianos puedan acceder a la información que les permita emitir un voto conociendo lo que los candidatos opinan sobre los temas que nos interesan. En concreto, se formaría una organización que enviaría a cada candidato en la elección un breve cuestionario consultándole su opinión sobre el aborto, las uniones homosexuales y la eutanasia (por ejemplo), y explicando que sus respuestas serían publicadas en un sitio web, sin ediciones ni comentarios, para que los votantes que estén interesados en esos temas pudieran conocerlas y emitir su voto como estimen pertinente.
Esta organización mantendría el sitio web en cuestión, lo que hoy en día no es costoso, y gracias a software gratuito de gestión de contenidos, tampoco lleva mucho tiempo y se puede obtener un sitio visualmente atractivo y donde los visitantes puedan consultar por temas, nombre del político o del partido. En otra sección del sitio se podría registrar las opiniones aparecidas en la prensa sobre los temas relevantes a los cristianos, siempre con enlace a la fuente, y comentarios generales (sin llamar a votar en contra o a favor de nadie).
Esa es mi idea, las preguntas serían:
1. ¿Les parece una iniciativa interesante?
2. ¿Contestarían los candidatos?
3. ¿Se podrían obtener resultados?
Espero sus comentarios.
19 comentarios
Si no me equivoco, ya existen algunas ONG católicas que hacen esta tarea en Chile. Averiguaré los nombres.
Saludos
Red por la Vida y la Familia (www.redprovida.com) por ejemplo, defiende estos principios y tiene comentarios políticos, pero no conozco a nadie de ellos como para proponerles esta idea.
Además, sería bueno tener un enfoque que diera a los consultados seguridad de que sus respuestas serían reproducidas íntegramente y no comentadas directamente... una especie de "nostros publicamos, Ud. decide".
En este momento no recuerdo el nombre, pero estoy seguro que una organización lo hizo a fines del año pasado con ocasión de la última elección presidencial.
En todo caso, hay alguna dificultad en esta encuesta. Y es que, como tú sabes, hay dos partidos que, por declaración de principios e incluso por nombre, hacen que muchos de sus miembros digan una cosa pero voten por otra; me refiero a la DC y a la UDI.
Saludos,
Tuve la suerte de poder participar en la elaboración de esa guía, precisamente mandando mails con las tres preguntas referidas a los parlamentarios de mi circunscripción -reconocidos liberales de plaza, desde el derecha hasta el más siniestroide-. Sin embargo, ninguno de ellos se dignó responderme. Claro, eso hubiera sido impopular en un contexto donde ellos intentan quedar bien con Dios y con el diablo.
Con todo, para un mayor éxito de esta iniciativa, y para que los políticos no teman responder, hay que trabajar con anticipación, cuando hablan más de la convicción y no del eslogan o la cuña.
En consecuencia, a las tres preguntas del articulista respondo, desde la experiencia, que sí. Es interesante, los requeridos en su mayoría contestarían y sería más o menos efectivo.
Cuéntanos ¿Siguen trabajando en ese sentido para las próximas elecciones?
Por favor, animaros a esa iniciativa: se beneficiarán muchos, muchos, no solo Chile.
1 ¿Aprobaran un sueldo mínimo digno para los trabajadores de Chile y una jornada laboral decente?
2 ¿Entre sus iniciativas está el mejorar la salud pública, la educación y el acceso a las nuevas tecnologías?
3 ¿Aprueba la sindicalización, huelgas y busca solucionar los problemas de los pueblos originarios?
4 ¿Usted al cargo llega a servir o a servirse, o es de esos políticos que dicen "no me den, póngame donde hay"?
Creo que así como nos preocupamos del tema valórico, debemos hacerlo también con el tema social siguiendo las enseñanzas de San Alberto Hurtado; porque si existieran las condiciones sociales ideales, no tendriamos aborto, disgregación familiar, divorcios, separaciones, delincuencia juvenil, abuelos desamparados y eutanasia, entre otros males que nos aquejan.
Que estén muy bien
Le encuentro toda la razón, pues ciertamente trabajamos desde una visión cristiana e integral del hombre y la sociedad, donde los bienes espirituales deben conjugarse armónicamente con los materiales. Hay que defender la vida y la familia como también trabajar por una justicia social y un sano orden económico. No hay oposición real entre ambas aspiraciones; al contrario, ambas son exigencias morales ineludibles de los laicos.
Hay que agregar eso sí, que la pregunta sobre una remuneración adecuada, la salud, la educación, etc., por ser materias opinables o discutibles en la manera de aplicarlas (a diferencia de otros asuntos que afectan directamente los principios, como la defensa irrestricta de la vida humana y la constitución natural de la familia), exigen un análisis prudencial y bastante técnico. En ese sentido, no sé si nuestros aspirantes a puestos de autoridad tengan la competencia requerida. Por tanto, exigirles una opinión de golpe y porrazo en esos temas, corremos el riesgo de que nos vendan la pomá y aumenten su demagogia.
Por último, en el servicio integral que la autoridad realiza en bien de la sociedad y la persona, hay una falta que clama al cielo: el nulo cultivo de las artes, las ciencias y las humanidades, el generar las condiciones de un orden social sano y apto para desarrollar la fe y el mundo de las virtudes (morales e intelectualeds), etc. A veces miramos a nuestros gobiernos como dispensadores de pan y circo -y les fustigamos cuando no lo hacen- en vez de ser agentes que nos conduzcan realmente hacia el bien común.
Me interesa conocer la opinión de los candidatos en aquellas materias que para los cristianos en particular, tienen una preponderancia superior para el bien común.
La pregunta 4 que propones, por ejemplo, no parece verdaderamente una pregunta, sino más bien una advertencia, pues no imagina a alguien respondiendo que quiere el cargo para servirse; todos te contestarán que sí a la pregunta 2, pero diferirán en qué entienden por "mejorar"; y todos dirán estar a favor de un sueldo "digno" y jornada "decente", pero diferirán en qué es digno y decente.
@ Alberto: Nuevamente tienes razón, pero es una cuestión de grados, ¿Cómo le voy a pedir a alguien que trabaje por el bien de la comunidad, si ni siquiera quieren proteger a la familia? ¿Cómo le voy a pedir un orden social apto para crecer en la fe, si creen que blasfemar es un derecho humano?
1. Aborto. Considerando que los casos de aborto terapéutico están amparados por el art. 10 N° 10 del Código Penal, Ud está de acuerdo con otros tipos de aborto:
( ) En ningún caso.
( ) Sólo en caso de violación, incesto o deformidad del niño.
( ) En cualquier caso, hasta cierto límite de gestación.
2. Píldora del día después. Considerando que la Corte Suprema, el Tribunal Constitucional y la Contraloría han declarado que la píldora del día después puede impedir la anidación del óvulo fecundado, respecto de la libre distribución de la píldora del día después Ud. está:
( ) En desacuerdo.
( ) De acuerdo, exigiendo autorización de los padres si es menor de edad.
( ) De acuerdo, sin conocimiento de los padres si es menor de edad.
3. Uniones homosexuales.
( ) En desacuerdo.
( ) De acuerdo, con obligaciones y derechos diferentes al matrimonio.
( ) De acuerdo, con obligaciones y derechos iguales al matrimonio.
4. Eutanasia activa. La eutanasia pasiva implica dejar de tratar una enfermedad (no el dolor) y no impedir que la muerte, en tanto que la eutanasia activa se refiere a tomar acciones directas que causen la muerte del paciente. Respecto de la eutanasia activa, Ud está:
( ) En desacuerdo.
( ) De acuerdo, con consentimiento por escritura pública.
( ) De acuerdo, con consentimiento por familiares o comisión médica.
Cada pregunta proporcionaría espacio para aclaraciones y comentarios, que se publicarían íntegramente.
Muy bueno el custionario. Vas a necesitar ayuda para hacer llegar las encuestas a los candidatos. Cuenta con mi apoyo.
Saludos
Creo que en estos días, enviar el cuestionario por correo electrónico es la mejor opción.
Ahora, bueno partamos por que respondan ese cuestionario y veamos quien es quien de verdad.
Un saludo, que estén muy bien.
Gracias
Muy buena iniciativa. Particularmente en términos de acotar las posibles respuestas de los candidatos, pero se les olvida que las próximas elecciones son las municipales, por lo que sugiero intencionar las preguntas a las temáticas que les son propias, dentro de las cuales la distribución de la píldora del día después en consultorios municipales es una de ellas.
Por ello yo preguntaría:
- Informará y/o publicará el listado de los financistas de su campaña?
- Informará y/o publicará el presupuesto de su campaña?
- De ser electo, publicará en la página Web municipal su declaración actualizada de intereses y patrimonio?
- De ser electo, promoverá en los consultorios municipales métodos de control natural de la natalidad?
- De ser electo,cuales serán sus principales medidas para evitar la corrupción?
- De ser electo, de que forma abrirá canales de participación para la comunidad?
- Cuáles serán sus principales medidas para enfrentar la pobreza en su comuna?
Gracias por tus comentarios. La verdad es que originalmente mi idea es hacer la misma encuesta en todas las elecciones y hacer preguntas "simples" de modo que los votantes puedan encontrar la opinión de un candidatos, poder compararla con la de otros, y decidir su voto en base a ella.
Preguntas tan abiertas como "medidas para evitar la corrupción, la pobreza o para abrir participación" pueden ser difíciles de comparar.
Lamentablemente la promoción de métodos naturales de control de la natalidad no es un tema que esté en discusión políticamente.
Otras preguntas, no directamente relacionadas con temas cristianos, podrían incluirse, a modo de complemento a las anteriores, pero siempre destacando que no se puede poner la lucha contra la corrupción, por ejemplo, antes que la defensa de la vida humana.
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