Demografía en Chile
Hace tiempo que tenía ganas de compartir con Uds. algunos datos interesantes que han surgido en los últimos meses acerca del desarrollo de la población chilena.
Por ejemplo, el censo que se efectúa cada 10 años en chile arrojó que los chilenos somos 16,5 millones de personas, lo que representa un aumento de 10,1% respecto del mismo conteo efectuado en 2002. Sin embargo, lo preocupante es que, de acuerdo a las proyecciones de organismos internacionales, deberíamos ser 17,4 millones, es decir, faltan poco menos de un millón de chilenos que no ha nacido.
Esto no hace más que reflejar el descenso general en el número de chilenos nacidos. En 1990 se inscribieron 361.000 niños recién nacidos en el Registro Civil, pero el año pasado ese mismo trámite se efectuó sólo 258.000 veces, es decir, una baja superior al 28%. Esta disminución se nota más pronunciada si comparamos que en 1992 había 13,3 millones de habitantes en nuestro país.
Este gráfico muestra la tasa de nacidos vivos cada 1000 habitantes en Chile durante el S. XX (fuente). Si se fijan, se nota una caída muy pronunciada durante la última década del siglo pasado, pero todavía se ubica por sobre el índice 17. Un simple cálculo con los datos del censo de este año muestra que, transcurrido el primer decenio del nuevo siglo, esa cifra ha bajado a un 14,7.
Sobra agregar que la tasa de fertilidad en Chile pasó la barrera de la tasa de remplazo (2,1) en 2000 y actualmente se ubica en 1,86 hijos por mujer, índice que seguramente deberá ser ajustado a la baja con los datos del censo dado a conocer hoy.
Lamentablemente, esta situación con menos hijos tampoco se ha traducido en más hijos deseados. Hace mucho tiempo que los niños nacidos fuera del matrimonio superan a los que se encuentran en la situación contraria, pero no sólo eso, sino que con el tiempo esa situación ha tendido a acentuarse, como muestra el siguiente gráfico.
Hoy en día, de cada 3 niños que nacen, 2 se encuentran con que sus padres no están casados por la ley civil.
Esto es reflejo de un cambio en la situación del matrimonio en Chile, que también experimentó una baja importante en las últimas dos décadas, desde 93.190 inscripciones en 1991, a 66.132 en el año pasado, es decir, un 29%. El descenso es significativo y también correspondería hacer la correlación con la cifra neta de población para comprender su real impacto.
Pero además nos encontramos ante un cambio cualitativo, pues en 2004 se introdujo en el matrimonio civil el divorcio con disolución de vínculo. Se esperaba que el hecho de facilitar una solución sencilla a los conflictos matrimoniales incentivara a las parejas a buscar el reconocimiento de su relación por el Estado, y efectivamente hubo un aumento de 20% a partir de 2004. Sin embargo, las sentencias de divorcio han aumentado cada año a partir de la dictación de la ley, más allá de lo que se puede considerar una “demanda contenida” de los primeros tiempos, al punto que en 2011 se declararon disueltos 47.076 matrimonios (compárese con los 66.132 que se celebraron en el mismo período) y en lo que va de 2012 las solicitudes de divorcio ingresadas en tribunales superan en 53,8% a los matrimonios celebrados.
Coincidentemente, en agosto se han publicado los resultados de la encuesta Casen 2011, donde se refleja que la tasa de pobreza en la población entre 4 y 17 años alcanza el 23,25%, muy por sobre el 14,4% de la población general, y en significativo aumento desde el 20,3% que había en la misma medición hecha el año 2006.
Desde luego, esto va en directa correlación con un envejecimiento de la población, y así la misma Casen arroja que la población de mayores de 60 años alcanzó a 2.638.000 personas, muy por sobre la cifra de 1.300.000 que había en 1990. Esta mayor expectativa de vida explica que la cifra de población bruta del censo continúe aumentando, a pesar de la marcada baja en los índices de fertilidad y natalidad.
Esos son los datos ¿Qué interpretación se puede hacer?
1 comentario
1º) Hacer 'cómoda' o 'fácil' la convivencia y el acceso al Registro Civil (parejas de hecho, divorcio, separaciones...) no tiene otros efectos que seguir debilitando los vínculos familiares.
2º) Chile ha adoptado el modelo demográfico de Europa. ¿Qué consecuencias tendrá la inversión de la pirámide demográfica para el sistema de pensiones de capitalizasción, la economía y los equilibrios regionales (cuando Perú doble en población a Chile, por ejemplo)?
3º) Cuanto más débil es la familia, mayor es la pobreza. Es un axioma que se ha comprobado en EEUU, España, Francia, Inglaterra y ahora Chile. Los ingenieros de almas prefieren promover el individualismo atroz y la de-construcción familiar aunque ello suponga crear más pobres.
4º) ¿Es posible darle la vuelta a esta concepción de la vida? En EEUU y México es frecuente que haya familias de la élite con tres o cuatro hijos. ¿Por qué no en Chile, Argentina o España?
5º) La caída de la natalidad ha ocurrido en Chile sin aborto legalizado.
6º) ¿Ha decidido suicidarse el hombre?
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