Avanzando hacia el matrimonio homosexual

Preparando el campo para la legalización del matrimonio homosexual en Chile, este fin de semana se publicaron 3 artículos sobre el Acuerdo de Vida en Pareja que impulsa el Presidente Piñera, del que les comentábamos un par de semanas atrás, en diarios de circulación nacional.

El primero de ellos es una columna de Joaquín García Huidobro, titulada Hay que creerle al lobby gay, donde señala algo que nosotros mismos hemos mencionado con anterioridad en este blog: no se dejen engañar, el AVP es única y exclusivamente una etapa intermedia hacia la meta que es la legalización del matrimonio homosexual en Chile, no los decimos sus opositores, son ellos mismos los que lo han planteado así. El autor concluye con la misma pregunta que se hacía Claudio Alvarado:

¿Por qué no incluir en él, por ejemplo, al abuelo que está a cargo de un nieto, o a dos hermanas solteras que han vivido toda su existencia juntas? ¿No merecen esos afectos una mínima protección legal?

Pero los partidarios del AVP se niegan terminantemente. ¿Por qué? Porque, en el fondo, entienden ese acuerdo como la antesala del “matrimonio homosexual", y la fórmula amplia que algunos proponen, aunque permitiría cumplir con las promesas presidenciales, les incomoda. En suma, sin sexo no hay privilegios legales. Los beneficios del AVP sólo se consiguen en la cama.

Dándole la razón en todo a don Joaquín García Huidobro, en otro periódico, el abogado Jorge Navarrete publica la editorial ¿matrimonio igualitario?, donde reitera que el objetivo es homologar las relaciones homosexual al matrimonio tradicional.

Pero va más allá y señala directamente que

Lo que se persigue, parafraseando a Taylor, es una “política del reconocimiento", donde no sólo jurídicamente, sino también de manera simbólica, nos abstengamos de abordar las uniones de homosexuales como si fueran una excepción anómala o de segunda categoría.

Es decir, el objetivo en todo este debate no es el matrimonio, sino que ellos apuntan más allá, lo que se busca es que las uniones homosexuales sean percibidas como normales por la comunidad. Eso, señores, se llama adoctrinamiento: el Estado diciendo a los ciudadanos qué deben pensar acerca de los comportamientos de los demás, y proscribiendo las visiones alternativas.

Pero Jorge Navarrete, si bien es cercano a la Democracia Cristiana chilena, es agnóstico, y en ese sentido se agradece que sea sincero en manifestar qué partes del cristianismo deberían declararse proscritas, completamente inaceptables en una sociedad abierta y tolerante como la nuestra.

Por lo mismo, reviste mucha mayor gravedad las opiniones de la senadora DC y pre candidata presidencial Ximena Rincón, pubicadas en la sección de cartas del mismo diario, bajo el título Debate sobre valores socialcristianos (el eufemismo es exquisito, pero supongo que se lo debemos al editor y no a la autora), pues ella se presenta como católica y pretende argumentar en base a los principios cristianos.

Señala la senadora:

Los valores socialcristianos promueven la igualdad y el fin de la discriminación en todos los planos.

No puedo dejar de notar que “los valores socialcristianos” pueden ser cualquier cosa, y que seguramente no son más que lo que la autora tiene en mente como valioso en cada momento determinado. Desde luego hablar de valores, principios y virtudes cristianos la comprometería demasiado, y entonces conviene usar esa referencia a “lo social” para desprenderse de cualquier idea molesta que un tal Jesús de Nazaret haya predicado hace dos mil años, acerca de la persona humana.

Pero lamentablemente para doña Ximena, la cosa no cuela, porque la organización a la que pertenece todavía no ha cambiado su nombre a Partido Demócrata Socialcristiano, y por lo mismo, ella debe responder por la “C” que pone en el pie de firma, si quiere conservar cualquier viso de credibilidad.

La carta continúa:

No ha sido un camino fácil para nosotros. En la Declaración sobre algunas cuestiones de ética sexual, de 1975, la Congregación para la Doctrina de la Fe subrayaba el deber de tratar de comprender la condición homosexual. Sin embargo, los actos homosexuales eran descritos como privados de su finalidad esencial e indispensable como “intrínsecamente desordenados".

¿Responderá actualmente a la defensa de los valores socialcristianos reprobar los actos homosexuales? Hoy es evidente que la gran mayoría entendemos que cada persona tiene el derecho a vivir en plenitud su sexualidad sin dañar a los demás, y que éste es un elemento de la esencia de su dignidad y libertad.

¡Oh, sorpresa! ¿Así que la CDF tiene algo que decir respecto a estos misteriosos “valores socialcristianos"? Quién lo diría.

Ya que ella misma ha invocado la declaración Persona Humana sobre algunas cuestiones de ética sexual, de 29 de diciembre de 1975, ameritaría que algún clérigo aclarara las palabras de la senadora Rincón, sobre todo en cuanto propone que los actos homosexuales serían dignos y compatibles con el cristianismo, y lo hace públicamente, en un medio de comunicación de circulación nacional.

Habría que recordar que:

  • Las cuestiones sobre el valor moral de los actos no se deciden por lo que entienda la mayoría de las personas (tal vez los “valores socialcristianos” sí, nadie lo sabe a ciencia cierta)
  • El rechazo a las conductas homosexuales no la inventó la CDF en 1975, sino que se remonta a las cartas de San Pablo (1 Cor 6,9-10).
  • Esa misma doctrina ha sido reiterada en diversas ocasiones con posterioridad a ese año, y todavía se encuentra íntegramente reafirmada en el Catecismo de la Iglesia Católica, en el párrafo 2375.

La senadora concluye su misiva, aportando un toque de clase, cuando se trata de poner a Cristo contra el cristianismo y justificar así su decisión política:

Una sociedad decente es “aquella que no humilla a sus miembros", ha señalado Karen Atala.

En vísperas de una fecha tan significativa para los cristianos, recordemos que fue un niño discriminado el que alimenta nuestra fe.

De lo que deberíamos colegir que cualquiera que sea perseguido y “humillado” por el Estado (sea narcotraficante, pedófilo, ladrón o violador de los DD HH) puede sacarnos en cara a los cristianos que NSJC tampoco fue acogido y respaldado por los políticos de su época.

Muy bonito.

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23 comentarios

  
Alejandro Galván
Una cosa que siempre me ha resultado curiosa de estas iniciativas "tipo AVP": sus defensores juran y perjuran que NO, no son equiparables al matrimonio, que son sólo para dar "cobertura legal a situaciones de afecto".... pero, por lo general, sólo cubren a "parejas" (dos miembros).

Lo cual es una incongruencias, según sus parámetros: ¿no es posible una situación de afecto NO MATRIMONIAL entre 3-4-5-60 personas? ¿y esta situación de afecto, no es tan digna de defensa jurídica que la de sólo 2?

Nada, que se les ven la plumas (juego tonto de palabras)
17/12/12 5:44 PM
  
Pato Acevedo
Luego de intentar razonar este tipo de cosas, que resultan evidentemente incoherentes, por tanto tiempo, he llegado a la conclusión que son pocas las personas a las que les interesa la coherencia, la mayoría evalúa los argumentos en razón del resultado: si me sirve o no para justificar lo que ya he decidido hacer.

Tal vez son más felices así.
17/12/12 6:52 PM
  
Humilde lector de la Biblia
El rechazo a la conducta homosexual se remonta a mucho antes que las cartas de San Pablo.

Levítico 18,22: "No te acostarás con un varón como si fuera un mujer: es una abominación."

Levítico 20,13: "Si un hombre se acuesta con otro hombre como si fuera una mujer, los dos cometen una cosa abominable; por eso serán castigados con la muerte y su sangre caerá sobre ellos."
17/12/12 11:33 PM
  
solodoctrina
Pato

¿por qué "avanzando hacia el matrimonio homosexual" del título?

Es más ajustado decir "retrocediendo hacia el matrimonio homosexual". O mejor "retrocediendo hacia la legalización de las relaciones homosexuales"

Sodoma y Gomorra existieron, Lo que se nos presenta como nuevo es muy viejo, tanto como el pecado. Se trata de eso, el viejo pecado con un nuevo ropaje: el moderno lenguaje pedante.

Saludos, desde Uruguay, dónde, en general, la clase política da pena por el nulo sentido moral. Y sin moral no hay futuro.
18/12/12 7:22 AM
  
Légolas
¿Y qué dicen ante esto los Srs. Obispos de la Iglesia Católica en Chile? Tan preocupados por el "sistema económico" o el agua que parecen no ver estas amenazas?
18/12/12 11:51 AM
  
Pato Acevedo
@ Humilde: Tienes razón, pero a cierto tipo de católicos lo que dice el AT es como si no contara, así que es más fácil recordarles lo que dice San Pablo.

@ solodoctrina: Cuando titulé esta entrada pensaba en esas escenas de película donde el protagonista acelera su automóvil por el desierto y directo a un barranco.

@ Légolas: No sé de qué estén preocupados los obispos, pero no hay que olvidar que los laicos también tenemos derecho a opinar sobre estas cosas, sobre todo cuando lo hacemos en conjunto con el magisterio. Y también lo tienen los sacerdotes, y diáconos, como digo en la entrada.
18/12/12 1:00 PM
  
Larisa
Este texto tiene momentos brillantes, una aguda observación sobre si este beneficio solo se consigue en la cama, en lo cual les concedo absolutamente toda la razón, pareciera orientado a validad solamente las conductas homosexuales.
Lo que me da mucha tristeza es que equiparen a un homosexual con un pedofilo o un narcotraficante. Si bien son conductas que rechaza la iglesia, tambien es cierto que los homosexuales nada facil tienen el camino de la santidad: para lograrlo deben renunciar a sus afectos y toda esperanza de ejercer su sexualidad.
Una cruz que no se si yo podría llevar a cuestas y que ellos deben asumir porque sus afectos son condenados.
No defiendo al homosexual en cuanto a validar sus conductas, ni defiendo el matrimonio gay -para mi el matrimonio es la union ante DIOS de un hombre y una mujer- no pretendo que no sea pecado lo que si lo es.
Sólo digo que debe ser muy duro y espero que Dios les conceda fortaleza para seguir un camino de santidad porque si de si ser santo es difícil, serlo teniendo orientaciones sexuales diversas, debe serlo mucho mas.
Un poco de caridad para el pecador, por favor.
18/12/12 3:59 PM
  
carlota
Es exactamente lo que ocurrió por ejemplo en Francia. Hubo ministros diciendo, clamando la mano en el corazón, "Acuerdo de Vida en Pareja" no es en absoluto el matrimonio homosexual, nunca habrá este tipo de matrimonio, y ahora, a ver la batalla para tratar de impedir la ley del "gaymonio", mucha gente por la calle en contra del proyecto y un parlamente a las ordenes del gobierno por-gaymonio y lo que sigue en la cultura pro-muerte.
Eso es una trampa política para seguir las directivas del globalismo - consumerismo - hombre esclavo del mercado, de todo tipo de mercado (aquí y muy pronto de los bebes)
18/12/12 4:14 PM
  
Pato Acevedo
@ Larisa: El crédito donde corresponde, la aguda observación que mencionas es del columnista García Huidobro.

En lo que me corresponde, debo decir que en nada equiparo a los homosexuales con el tipo de personas que indicas. Mi punto es que para decir "soy como Cristo" no basta con ser perseguido , porque hay muchas personas que son perseguidas por buenas razones, y que hacerlo, sobre todo para contravenir el cristianismo es una gran bajeza.

Estoy de acuerdo que muchos homosexuales se encuentran en una situación muy delicalda, pues deben lidiar con tentaciones especiales. Pero por otro lado, tampoco es tan diferente de una mujer cuyo esposo se encuentra por largo tiempo fuera (un soldado, por ejemplo) o un hombre cuya esposa está en coma. Hay que acompañarlos en ese trance y no discriminar.
18/12/12 4:22 PM
  
Ignacio
A propósito del adoctrinamiento, ¿no es lo mismo que hace la Iglesia cuando le dice que pensar sobre las relaciones de los demás a los fieles y a la sociedad?
Esto es un argumento pobre diría yo.

Por otra parte, no estoy seguro de que en este caso el estado le este diciendo a nadie como pensar, yo creo que en general la mayoría de la gente ya sabe lo que piensa al respecto.
18/12/12 6:08 PM
  
Pato Acevedo
@ Ignacio: La Iglesia propone una religión, y por eso se supone que debe decirte qué es compatible con ella y qué no lo es, en tanto se ordene al bien de tu alma. El Estado, en cambio, no debería decirte qué pensar, a menos que existiera una razón de bien común para hacerlo, porque se supone que imponer una religión o cualquier ideología está fuera de su ámbito de competencia.
18/12/12 6:25 PM
  
E.Lozano
ESTE COMENTARIO VA PARTICULARMENTE PARA EL AUTOR; él decidirá si lo publica o no.
El mayor avance es que hasta los detractores refieran como matrimonio lo que evidentemente no lo es.
Si alguien insistiera en "casarse" con un árbol, ¿aceptaríamos llamarlo matrimonio botánico? Seguramente no.
Pues exactamente es el mismo caso con los homosexuales. Por lo menos los que no estamos de acuerdo con el concepto deberíamos evitar la frase "matrimonio homosexual" y referirnos a "unión homosexual"; de otro modo, cada vez que lo escriben va tomando un cierto aire de naturalidad y peor, legitimidad, de que EXISTE lo que sencillamente NO ES NI PUEDE SER.
18/12/12 9:13 PM
  
Mariano
Larisa; todo homosexual tiene los mismos retos que los demás para evitar el pecado, no es un caso especial al que tratar especialmente bien. A todos cuesta guardar los mandamientos, no solo a los homosexuales, a los que ya se les favorece sin tener mérito especial ninguno, lo que hace que algunos enquisten su mala condición que además es protegida. Caridad con todos y alegría por un pecador que se convierta.
19/12/12 9:45 AM
  
Jota
Aquí una lista (en inglés) de los daños probables que causa la aprobación de matrimonios del mismo sexo
http://downloads.frc.org/EF/EF11B30.pdf
21/12/12 8:01 PM
  
Javier
Agradezco la sinceridad de la autora del articulo cuando argumenta que le parece que el principal problema es que la sociedad acepte la homosexualidad como una conducta natural. Se equivoca sin embargo cuando se refiere a que el principal objetivo es el adictronamiento. El estado no les dice a nadie que piense de una cierta forma o otra sobre el comportamiento homosexual.

De lo que se trata es de legislar para la totalidad de la poblacion e impedir que ciertos grupos de poder con ciertas consideraciones morales impuestas por ejemplo por cierta religion, intenten, ahora si, adoctrinar a la sociedad con consideraciones denigrantes sobre minorias sin ningun tipo de fundamento mas alla de una moralidad impuesta por la misma religion que profesan.

El problema surge cuando intentan forzar esta moralidad a los restantes integrantes de la sociedad.

Es una cuestion basica de separacion entre el estado y la religion, de manera tal que todos los derechos de las personas sean respetados SIN discriminacion.
28/01/13 11:21 PM
  
Pato Acevedo
@ Javier: No es "la autora", sino "el autor", yo. La de la foto es Ximena Rincón, cuyas declaraciones se mencionan en el artículo.

Ah, pero se trata de adoctrinamiento. Cuando el Estado dice "el matrimonio homosexual es igual que el heterosexual", impone por la fuerza la idea de que las relaciones de uno u otro carácter son esencialmente iguales (cuando en realidad no lo son), y por eso deben tener el mismo tratamiento ante la ley.

Si se tratara de impedir leyes influidas por las ideas de algún grupo en particular, lo lógico sería derogar las leyes de matrimonio civil y que cada uno se case libremente o no. En otro artículo explico por qué eso es inaceptable para el lobby gay.
30/01/13 6:24 PM
  
Javier
Primero disculpas por la confusión, se debio a la foto de la senadora, que me hizo creer que Pato era la abreviatura de Patricia.

Luego estoy en desacuerdo con usted: si el Estado dice que las relaciones homosexuales deben considerarse ante la ley de la misma manera que las heterosexuales, lo que hace es afirmar un derecho de igualdad bajo la presunción de que las relaciones y conductas homosexuales no son negativas. Su aclaración de “que en realidad no lo son” no es un hecho factual sino una opinión o apreciación personal, basada en cierto sistema de valores, que en su caso probablemente, corríjame si me equivoco, se basa en principios católicos, que son perfectamente validos a nivel personal y comunal si se quiere mientras se respeten las libertades y los derechos de todos los demás miembros de la sociedad. Intentar imponer estos principios sobre el resto de la sociedad, que no necesariamente comparten los mismos principios de moralidad es intentar adoctrinar, y es algo que la Iglesia frecuentemente intenta.

La sociedad ha cambiado (yo diría evolucionado pero voy a ser moderado) en la forma en como la conducta y las relaciones homosexuales son consideradas. Esto ha permitido que en varios países las leyes hayan avanzado y hoy en Argentina, España, Portugal, Ciudad de Mexico, etc… las relaciones homosexuales gocen de los mismos derechos que las relaciones heterosexuales y la mayoría de la población se ha mostrado favorable a esos cambios ya que se consideran como justas medidas hacia la igualdad de los individuos. Estos cambios no han venido desde el Estado hacia la sociedad sino en el otro sentido. Es por eso que no se puede hablar de adoctrinamiento por parte del estado.
30/01/13 8:25 PM
  
Pato Acevedo
@ Javier: Por acá a las Patricia les decimos Paty :)

La Iglesia no impone nada, porque no tiene el poder para hacerlo, si intenta influir, lo hace en su legítimo derecho como una organización más dentro de la vida nacional. El Estado, en cambio, sí tiene a su disposición la fuerza de la ley, y por eso es muchísimo más grave que "afirme un derecho de igualdad" o una presunción del valor de ciertas relaciones. A un Estado liberal nunca le corresponde emitir un juicio acerca de las conductas privadas de las personas, a menos que esté en juego el bien común. Todo eso lo explico en la entrada que enlacé en mi comentario anterior.

Es cierto que la percepción de las relaciones homosexuales ha cambiado, pero no es verdad que haya sido gracias a las mayorías, sino que este cambio ha sido impuesto por los políticos y las élites que controlan los medios de comunicación. A pesar de este bombardeo constante, por más de 10 años ya, cada vez que se ha consultado a la gente respecto de la definición del matrimonio, incluso en California, la gente ha respaldado el concepto tradicional.
31/01/13 9:01 PM
  
Javier
@ Pato

El intento de influir de la iglesia catolica es tan valido como el intento de influir de la comunidad homosexual ya que tambien es una comunidad mas dentro de la vida nacional de cualquier pais y por lo tanto tambien tiene el derecho de hacerlo.

La percepcion de las relaciones homosexuales ha cambiado. Este cambio no ha sido impuesto por los politicos, ya que estos no arresgarian un solo voto por reafirmar derechos de las minorias ha no ser que hubiera un movimiento y una conciencia social que acepte la reinvindicacion de estos derechos.

La mayor aceptacion de las relaciones homosexuales refleja un desarrollo y un avance social y la eliminacion del estigma de un grupo social que forma parte de la sociedad, y como parte de ella, debe tener los mismos derechos.

El argumento de la iglesia, repito, se basa en la concepcion moral que la homosexualidad es una conducta erronea y perjudicial para la sociedad. Esta no es la vision de la sociedad en general en muchos paises donde las leyes de reconocimiento de los derechos homosexuales estan avanzando.

La iglesia esta realmente en una encrucijada: o convertirse en una institucion discriminatoria e arcaica desconectada de los derechos humanos, o permitir reformas que permitan modernizarse y reflejar los valores mas importantes del cristianismo que le permitiran alejarse del fundamentalismo. La iglesia lo ha echo en el pasado y ha evolucionado, la pregunta es si lo puede volver a hacer.

Perdon por la falta de acentos es un problema de teclado.

01/02/13 9:58 PM
  
Pato Acevedo
@ Javier: Nadie ha desconocido el derecho del lobby gay a proponer sus políticas, y sin embargo cuando la Iglesia hace lo mismo, todos se escandalizan. Injusto ¿no?

No sé cómo será donde vives, pero en mi país la estabilidad de un político tiene mucho más que ver con la lealtad a la cúpula del partido que con los votos de la elección.

El argumento de la Iglesia no se basa en la calificación moral de la homosexualidad, sino en la importancia que tiene el matrimonio para el bien común. Nuevamente te invito a leer mi post "Una legislación familiar coherente".

La encrucijada que propones no es tal. La Iglesia seguirá enseñando que los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados, según la doctrina que le confió Cristo y sus apóstoles, y que el matrimonio es una institución natural, anterior al Estado. Su doctrina no evoluciona ni cambia.
03/02/13 1:51 PM
  
Javier
Intolerantes hay en todos lados y si algunos se escandalizan porque la iglesia proponga sus politicas me parece un claro ejemplo de intolerancia y habra que denunciarlo y combatirlo intelectualmente.

Luego estoy completamente en desacuerdo cuando argumenta que el argumento de la iglesia no se basa en la concepcion que la homosexualidad es inmoral. El "bien comun" es un concepto moral y en este caso nuevamente repito esta asociado a un conjunto de valores. Las sociedades occidentales han cambiado su forma de ver las relaciones homosexuales, han aceptado que la homosexualidad ocurre, que no es una enfermedad, que no es un acto inmoral y que por ende los homosexuales deben tener los mismos derechos que los heterosexuales dentro de un Estado de derecho que se basa en la igualdad de sus ciudadanos.

No es cierto que siempre que la gente fue consultada estuvo en contra del matrimonio homosexual. El año ultimo hubo elecciones en Maryland, Washington, Maine y Minnesota donde diversas iniciativas para legalizar el matrimonio homosexual fueron aprobadas (o medidas para impedirlo rechazadas) por las mayorias. Esto demuestra tambien un cambio. En Francia y el Reino Unido las encuestas muestran una mayoria a favor de la legalizacion del matrimonio homosexual.

La encrucijada para la iglesia existe, la sociedad evoluciona, la discriminacion tiende a desaparecer porque no hay nada malo en que dos personas se amen y disfruten de los mismos derechos sin importar cual sea su sexo, ya que no dañan a nadie. A proposito sin ser un experto en cristianismo pero habiendo sido educado en la fe catolica, no puedo recordar ningun pasaje del Nuevo Testamento donde Jesus se refiera en forma negativa a la homosexualidad, ni la condene.
05/02/13 8:42 PM
  
Pato Acevedo
@ Javier: no seguiré intentando conversar contigo sobre matrimonio homosexual, porque me parece evidente que no quieres abordar los argumentos que señalo en la otra entrada, y no veo la necesidad de reproducirlos aquí.

Sí me gustaría profundizar lo que dices, respecto a que nada malo puede haber en dos personas se amen ¿en serio? ¿Y si una de ella ya está casada? Me dirás que no es ese el caso al que te refieres, pero es que son expresiones como esa las que dejan la imagen de que el "amor" lo justifica todo... Y no es así.

No me sorprende que hayas sido educado católico y sin embargo te tomes del silencio del Nuevo Testamento para defender tu posición, como si el cristianismo se basara en lo escrito en un libro. La catequesis en estos años ha sido el gran punto bajo de nuestra Iglesia.

Pero te respondo: NSJC tampoco dice nada sobre el canibalismo, y de ello no se puede concluir que los cristianos puedan ser caníbales.
08/02/13 11:49 PM
  
Martin
TRECE MOTIVOS POR LOS QUE ESTOY A FAVOR DEL MATRIMONIO IGUALITARIO


1) Porque las leyes deben responder a la realidad, y no someter a los sujetos al cumplimiento de "supuestos" ideales. Ideales que a su vez responden a un modelo único de sociedad, a una cultura que tiende a excluir al diferente.

2) Porque entiendo que es profundamente discriminatorio impedir que dos personas se casen por su mera orientación sexual. Permitir que heterosexuales se casen y que homosexuales no, deviene per se en un acto discriminatorio, en donde ciertas personas (por un determinado atributo) tienen la posibilidad de casarse mientras que otras no, estableciéndose una valoración diferencial de las orientaciones sexuales, y por ende, de los sujetos; sujetos de primera (que pueden acceder a un derecho) y sujetos de segunda (aquellos que no). Mientras que un tipo de vínculo es reconocido legal y socialmente, supeditado a una serie de derechos y obligaciones y avalado por el Estado, el otro, es no reconocido e invisibilizado. Recordemos que durante más de un siglo se prohibía el matrimonio interracial o el interrligioso, con las mismas consecuencias nefastas.

3) Porque, si bien insisto con fines políticos en hablar de heterosexuales u homosexuales, considero que en la práctica dichas identidades no existen; la sexualidad es plural, polimórfica, profundamente compleja como para crear identidades en base a las preferencias sexuales de los sujetos. Y es además un reduccionismo letal condensar todas las dimensiones de los sujetos en una sola, en virtud de con quien prefieren o no coger.

4) Porque la sexualidad no se limita a la reproducción, porque es erróneo concebir que el fin del matrimonio es la perpetuación de la especie; existen matrimonios entre personas infertiles, parejas que deciden no procrear e incluso matrimonio in extremis, lo que borra de un plumerazo cualquier equiparación matrimonio=reproducción, del mismo modo, todos sabemos que la especie se pudo , puede ,y seguirá pudiendo reproducirse, independientemente de la conformación del matrimonio. Por lo tanto, la tesis reproductivista es falsa.

5) Porque contribuye a visibilizar y legitimar vinculos que históricamente se han vivido en secreto y en las penumbras.

6) Porque si nos preocupan los niños y niñas, deberíamos permitir que se exprese la multiplicidad propia de los individuos, acaso qué legislador reconoció la existencia de niños y niñas ya criados por parejas del mismo sexo? Qué legislador enfatizó en el estigma que cargan los niños y adolescentes que no pertenecen al modelo hegemónico?

7) Porque concebir que una pareja formada por dos hombres o dos mujeres no están capacitados para el pleno desarrollo de un niño o niña es una gran mentira; el desarrollo correcto de una persona responde a lo sano de los vinculos y los afectos, a las figuras de apego, es esto independiente del género, orientación sexual o identidad de género de los mismos. Una pareja heterosexual, sencillamente por estar conformada por varón y mujer no necesariamente implican que van a criar correctamente a un niño o niña.
8) Porque argumentar que la familia se destruye es no comprender el verdadero significado de familia, es comprender que una familia no es tal por su mera composición, sino por lo saludable y fructífero de sus vínculos. Un papá, una mamá, un lindo auto y el perro no son la fórmula de la felicidad. Por lo tanto, el concepto de familia, más que debilitarse, se consolida.

9) Porque el argumento de "lo natural" o "lo esencial" es falso, no hay nada en la sexualidad humana que no sea social, que no se contruya historica y culturalmente, que no dependa de contextos económicos y políticos, por ende, NADA ES NATURAL EN LA ESPECIE HUMANA, y si seguimos en esta línea de razonamiento, el propio matrimonio es antinatural (sea entre hombre o mujer, o entre dos hombres o dos mujeres), dado que no responde a principios inmanentes de la física, la química o la biologia, sino que es un contrato entre dos personas, un invento jurídico, un arreglo socio-político, no existe gen, célula ni hormona que nos predisponga al matrimonio !

10) Porque discutir ya de por sí esto me parece patético, no deberia estarse discutiendo esta ley, debería ser un hecho inadmisible y sin peros. Que se debata, que se reflexione al respecto o que se decida o no, ya implica asumir que la homosexualidad es "algo" a debatir, "algo" sobre lo que opinar. Quisera saber yo en qué momento se debate sobre la heterosexualidad; o porqué motivo nadie se le pasa por la mente argumentar contra el matrimonio entre personas de distinto sexo? Será porque la heterosexualidad es "natural", o por el contrario, será por que se nos "impone" como sí asi lo fuera, naturalizándose desde toda institución y actor social, creando la falsa idea de que la "heterosexualidad" es la norma (y todo lo que se desvíe de ella, lo "anormal"), no será momento ya de reflexionar también sobre ese invento al cual llamamos heterosexualidad?

11) Porque los nombres no son menores, porque dar nombre implica consolidar un marco de existencia, porque se és en este mundo siempre y cuando pueda ser nombrado, y lo no nombrado, pasa al plano de lo no existente, lo susceptible de ser violado y humillado. Porque la palabra matrimonio tiene un peso simbólico significativo y de reconocimiento social, y la ingenua solicitud de darle el nombre de "unión civil" tiene un fin de sometimiento, de nombrar diferente y de perpetuar la invisibilización.

12) Porque aspiro a un mundo en donde se pueda desplegar el polimorfismo y la heterogeneidad de subjetividades, porque me aterran las dictaduras que someten a los individuos y les dice cómo se deben casar, cómo vestirse y comportarse en función de los órganos genitales, qué realizar con su útero, que tan buena o mala madre ser, qué debe o no plantar o consumir, y cómo o no morir.

13) Por último, porque estoy convencido que el matrimonio es una institución de mierda, que sujeta y somete a los individuos al Estado, que alimenta una única forma de relacionamiento entre las personas, que impone una monogamia obligatoria, que condiciona la filiación, que prioriza la cosanguineidad por sobre los vínculos afectivos y un largo etcétera. Pero más allá de esto, creo que primero todas las personas deben tener derecho a acceder a la misma o a rehusar de su uso por sus propias decisiones. Ya llegará en un futuro lejano la discusión sobre los alcances del matrimonio...y quién sabe, en qué rincón infinito del futuro universal dicha insitución caiga por su propio peso, y se establezcan formas de relacionamiento u ordenamiento social algo más flexibles y libres que el matrimonio tal cual lo reconocemos......pero mientras ese momento llega, primero debemos asegurarnos que todos y todas tengan la posibilidad , por su voluntad, de aferrarse a la misma.
08/03/13 1:45 AM

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