(InfoCatólica) En estos días se está haciendo la publicidad de un «Curso de liderazgo inspirado en la espiritualidad ignaciana» organizado por instituciones pertenecientes a la Compañía de Jesús. En concreto, las entidades convocantes son la Cueva de San Ignacio (Centro de Espiritualidad situado en Manresa, donde el fundador de la Compañía de Jesús hizo oración y penitencia), el ESADE (prestigiosa escuela de negocios fundada por la orden), la Fundación Jesuïtes Educació y el Centro Cristianismo y Justicia. Los responsables del curso son el P. Pere Borràs, sj, Carlos Losada, Josep M. Lozano y sus colaboradores.
Según la información facilitada por sus organizadores, el curso pretende, entre otras cosas, «descubrir el San Ignacio líder y formador de líderes», «redescubrir el liderazgo en la clave ignaciana de ‘en todo amar y servir’», y «volver a la fuente de experiencia vital con Dios». Por eso se juntan temas más directivos y laborales con cuestiones de tipo más espiritual, y con la práctica del silencio y la meditación. El lugar de realización será la Cueva de San Ignacio.
En el programa, que ha sido enviado recientemente a los suscriptores de los Cuadernos Cristianismo y Justicia, y que puede consultarse en Internet, se puede ver que, entre otros contenidos, el segundo módulo incluye «Trabajo de los resultados del eneagrama», porque en la tarea que hay que desarrollar entre los dos módulos (el primero se celebra en febrero, y el segundo en marzo) está el «trabajo de eneagrama».
¿Qué pasa con el eneagrama?
Algunas instituciones de la Iglesia Católica, especialmente algunas órdenes religiosas, han utilizado o utilizan el eneagrama como técnica psicológica auxiliar para el autoconocimiento y la mejora personal. Sin embargo, en el año 2003 la Santa Sede dejó clara la postura oficial de la Iglesia ante este fenómeno. En su documento Jesucristo, portador del agua de la vida. Una reflexión cristiana sobre la Nueva Era, el Consejo Pontificio de la Cultura y el Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso señalaban el eneagrama como una manifestación actual de la gnosis, que según el beato Juan Pablo II no es más que «esa postura del espíritu que, en nombre de un profundo conocimiento de Dios, acaba por tergiversar Su Palabra sustituyéndola por palabras que son solamente humanas».
En efecto, el documento vaticano sobre la Nueva Era señala, continuando con el razonamiento del Papa Wojtyla, que «un ejemplo de esto puede verse en el eneagrama –un instrumento para el análisis caracterial según nueve tipos–, que, cuando se utiliza como medio de desarrollo personal, introduce ambigüedad en la doctrina y en la vivencia de la fe cristiana».
En el glosario que se ofrece al final de este documento vaticano se puede leer la siguiente entrada:
«Eneagrama: (del griego ennéa = nueve + gramma = signo) el nombre designa un diagrama compuesto por un círculo con nueve puntos en su circunferencia, unidos entre sí por un triángulo y un hexágono circunscritos. Originariamente se utilizó para la adivinación, pero recientemente se ha popularizado como símbolo de un sistema de tipología de la personalidad que consta de nueve tipos caracterológicos básicos. Se hizo popular tras la publicación del libro The Enneagram de Helen Palmer, pero la autora reconoce su deuda con el médico y pensador esotérico ruso G. I. Gurdjieff, el psicólogo chileno Claudio Naranjo, y el autor Óscar Ichazo, fundador de Arica. El origen del eneagrama permanece envuelto en el misterio, si bien algunos sostienen que procede de la mística sufí».
El blog que tiene en InfoCatólica la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES) ya publicó en el año 2009 un estudio exhaustivo firmado por su miembro argentino Roberto A. Federigo, dividido en tres partes, que puede leerse íntegro («Eneagrama: una técnica esotérica y pseudocientífica», ver primera, segunda y tercera parte).
En su trabajo, Federigo explica los inicios esotéricos del eneagrama, afirmando que «originalmente el eneagrama fue utilizado para la adivinación como cualquier mancia, pero fue a partir de su vínculo con la psicología, que pasó a ser un incierto test de personalidad». Según este experto, se trata de una técnica pseudocientífica, debido a que contiene psicología alternativa, determinismo filosófico, dogmatismo, contradicciones empíricas, inmutabilidad y sobrenaturalismo.
Por eso, concluye Federigo en su estudio, «las consecuencias de la pobreza sociocultural, la mala formación educacional, una fe confusa, la inestabilidad emocional, entre otras, logran que algunos individuos sean potenciales víctimas de éstas y otras pseudociencias y prácticas esotérico-ocultistas», refiriéndose al eneagrama.
Más eneagrama jesuítico en Cataluña
En el programa de la Cueva de San Ignacio para el curso 2012/2013 puede comprobarse que este curso de liderazgo no es la única actividad que los jesuitas catalanes organizan en torno al eneagrama. En realidad, una de las ofertas permanentes de su Centro Internacional de Espiritualidad es la denominada «Escuela Ignaciana de Enneagrama», dirigida por el P. Josep Lluís Iriberri, sj.
Leemos en el programa que una de sus actividades, «el Taller Base de Enneagrama (en su 13º año de edición) consta de tres fines de semana residenciales dedicados al descubrimiento y profundización de la teoría enneagrámica, siguiendo la tradición de los padres jesuitas iniciada en la Universidad Loyola de Chicago y de los grandes maestros como Helen Palmer o Russ Hudson».
Tal como se explica, entienden esta práctica como «un puente entre la psicología y las plataformas psico-espirituales de las tradiciones más antiguas del desarrollo humano. El objetivo es trabajar nuestra personalidad, descubrir caminos de conocimiento propio y de los demás, así como mejorar nuestra interrelación».
Otra actividad publicitada por el Centro jesuita es la «Relectura de la vida con el Enneagrama». Y, para terminar, lo más sorprendente: «Ejercicios Espirituales con el Enneagrama (cinco días)», a celebrar en agosto. Y lo explican así:
«Los Ejercicios Espirituales de San Ignacio son una experiencia de renovación espiritual, que acerca a Dios, única fuente de la Creación de donde proviene toda existencia. La nueva conciencia de nosotros mismos que nos proporciona el Enneagrama, abrir los ojos sobre nuestra verdadera esencia, es ya una primera puerta de entrada por donde avanzar en esta experiencia de renovación. Los Ejercicios no son un taller de Enneagrama: los participantes hacen su proceso personal a partir de sus propios conocimientos del sistema enneagrámico. Según posibilidades, se podrá ofrecer un seguimiento más personalizado».