¿Qué hemos hecho los fieles católicos para merecer esto?
En la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá da clases un sacerdote jesuita llamado Carlos Novoa. Licenciado en Teología y en Filosofía, con maestría y doctorado en Ética, llegó a ser el decano de la Facultad de Teología de esa Universidad. Hace unos años tuvo la feliz idea de alabar el espectáculo erótico-festivo de Madonna en el que la cantante se hacía “crucificar” en el escenario. El título de su artículo, “Madonna: una sugerente presentación de Jesús", lo decía todo.
Y sin embargo, este insigne hijo de San Ignacio de Loyola y San Francisco Javier, siguió y sigue dando clases en esa universidad jesuita. Una vez leída entera la entrevista que ha concedido a El Espectador, no puedo dejar de preguntarme: ¿Qué hemos hecho los fieles católicos para merecer esto? ¿Por qué sufrimos el castigo de tener que soportar que en las universidades de nuestra Iglesia pululen personajes como este sacerdote jesuita? En serio, ¿qué grave pecado merece semejante castigo y afrenta a nuestra fe?
Porque, hay que decirlo ya claramente, es un verdadero castigo contra la fe del pueblo de Dios la presencia en lugares de enseñanza y de repercusión mediática de sacerdotes, religiosos, teólogos y seglares con responsabilidades eclesiales que se saltan a la torera las enseñanzas de la Iglesia. Sinceramente creo que aquellos que aceptamos de corazón lo que nuestra Madre y Maestra enseña no nos merecemos que esa gente pisotee nuestra fe y haga escarnio de la misma en la arena pública sin que nadie haga nada para impedirlo de una vez por todas.