(InfoCatólica) El cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, ha realizado unas declaraciones al periódico La Vanguardia en las que ha puesto en valor la doctrina social de la Iglesia, afirmando que «va muy por delante de nuestros pensamientos», y subrayando la importancia del Evangelio del amor y la paz. Según Omella, el sufrimiento de los hombres es también el sufrimiento de la Iglesia, que debe estar presente en medio de las dificultades y divisiones de la sociedad.
En cuanto al tema migratorio, Omella destacó los esfuerzos del papa Francisco para construir puentes, fomentar la acogida e integración, y trabajar para que las personas no tengan que abandonar sus lugares de origen. Según el cardenal, el mundo debe ser más solidario e invertir en el desarrollo de estos pueblos.
Omella también recordó que el papa Francisco ha expresado su deseo de visitar Canarias, especialmente para abordar la cuestión migratoria. Aunque su visita dependería de su salud y de la coordinación con las autoridades locales, el cardenal manifestó su esperanza de que el Santo Padre pueda realizar ese viaje. «A mí, como ciudadano español y como cardenal, me encantaría que el Papa pudiese venir», afirmó.
El cardenal también abordó temas de moral, criticando las divisiones entre «retrógrados» y «progresistas». Señaló que es más importante centrarse en la dignidad humana y, en este sentido, se mostró contrario a la eutanasia, defendiendo en su lugar los cuidados paliativos y el cariño hacia las personas en situaciones de sufrimiento. «¿Es más progresista la eutanasia o los cuidados paliativos? Cuando las personas reciben cariño, nadie quiere morir», expresó Omella, haciendo un llamamiento a invertir más en el cuidado de los enfermos.
En cuanto a la situación política en Cataluña y España, Omella expresó su optimismo y destacó los esfuerzos del actual gobierno por construir puentes entre la sociedad catalana y el resto de la nación. Según el cardenal, el diálogo y la escucha son fundamentales para evitar la división y fomentar la unidad.
Finalmente, el cardenal hizo hincapié en el creciente interés de los jóvenes por cuestiones trascendentes y la búsqueda de la fe, señalando un aumento de vocaciones y participación en las parroquias, especialmente en Barcelona y su área metropolitana. Omella también elogió la labor del presidente de la Conferencia Episcopal Española, destacando su capacidad para unir a los obispos y promover la fraternidad dentro de la Iglesia.