(Efe / InfoCatólica) El 24 de junio de 1981, la Virgen supuestamente se apareció a seis niños residentes en esta pequeña ciudad, situada en el suroeste de Bosnia-Herzegovina. Sólo este fin de semana han llegado hasta esta remota región balcánica, situada a unos 25 kilómetros del mar Adriático, decenas de miles de fieles procedentes, entre otros países, de Colombia, México, Brasil, Italia, España, Portugal y China.
El Papa Benedicto XVI decidió en marzo de 2010 crear una comisión de investigación, vinculada a la Congregación para la Doctrina de la Fe que estudiará estas supuestas apariciones de Medjugorje, en Bosnia-Herzegovina. Este fenómeno cuenta con apasionados defensores y millones de peregrinos cada año. Sin embargo, también ha despertado grandes críticas en la Iglesia, especialmente las del propio obispo de la diócesis en la que se encuentra Medjugorje. La comisión, presidida por el Cardenal Ruini, buscará aportar luz a esta cuestión y, quizá, dar una decisión definitiva sobre la misma, solucionando así la situación ambigua del santuario y de las peregrinaciones al mismo.
Los videntes
Hace 30 años un grupo de seis chicos y chicas (Mirjana Dragicevic Soldo, Ivanka Ivankovic-Elez, Marija Pavlovic Lunetti, Vicka Ivankovic, Ivan Dragicevic y Jakov Colo) afirmaron que habían visto a la Virgen en el cercano monte de Crnica. Sorprendidos y asustados no se acercaron, pero el día siguiente a la misma hora cuatro de ellos se sintieron fuertemente atraídos hacia el mismo lugar. Y esta vez reconocieron a la Virgen, conversaron y rezaron con ella.
Dos de ellos nunca más tuvieron visiones, pero la Virgen supuestamente se sigue apareciendo hasta hoy a los demás “videntes” y les transmite mensajes de paz y consejos como la confesión mensual, la lectura de la Biblia, el vivir la Eucaristía con profundidad, el rezo del Rosario y el ayuno, a pan y agua, cada miércoles y viernes como signo de penitencia.
Desde entonces, el denominado santuario de la Virgen de la Paz ha sido visitado por más de 30 millones de devotos de todo el mundo, según estimaciones de la Iglesia católica local. Este fin de semana han batidos récords las comuniones repartidas, las confesiones tomadas, el número de sacerdotes que oficiaron misas y los idiomas en que lo hicieron. No hay datos oficiales sobre el número de peregrinos, ya que la mayoría de los ellos no se registra, pero se estima que entre medio millón y un millón visitan el santuario anualmente y se quedan en la localidad tres o cuatro días.
Los peregrinos
El sábado, ante la Iglesia de San Jacobo se formó una larga fila de peregrinos que rezaban y cantaban, muchos llorando de alegría o arrepentimiento, mientras que otros miles se reunían ante la casa de la vidente Vicka Ivankovic. Cada lunes y miércoles, Vicka comunica los mensajes de la Virgen (la Gospa -la Señora-, como la llaman) a los peregrinos, abraza a los enfermos y reza con ellos. Los demás suben bajo el implacable sol del verano al monte de la aparición -un kilómetro de piedra arisca- muchos de ellos incluso descalzos.
Entre ellos, el madrileño Javier López García junto a Ignacio, de 6 años, que han venido por primera vez a Medjugorje. "Se trata de un santuario mundialmente conocido y hace mucho que quería venir", declaró el madrileño a Efe mientras subía al monte Crnica. Planea pasar en Medjugorje cuatro días de peregrinaje y oración, convencido de que ha venido a un sitio "santo", ya que éste es para él "un lugar de fe, de redención y oración".
A pesar de que la Iglesia católica no se haya pronunciado sobre Medjugorje tal como lo hizo en el caso de Lourdes o Fátima, los devotos que visitan el santuario creen firmemente en las apariciones y aseguran que aquí encuentran fe y renovación espiritual. "Todo el mundo sabe que aquí se apareció la Virgen y no me importa si el Vaticano reconoce el milagro o no. Yo sé qué ocurrió aquí, lo siento, lo sienten todos los peregrinos que están aquí", asegura Javier López García, el peregrino llegado desde Madrid.