«Un volumen de gente como nunca se había visto en Córdoba»

Éxito absoluto de público durante el Vía Crucis Magno de Córdoba

La procesión magna, organizada el pasado sábado por la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba con motivo del Año de la Fe, pasará a la historia de la ciudad como uno de los actos que más personas ha conseguido reunir en los últimos años en la ciudad andaluza. Mons. Demetrio Fernández reflexionó en su homilía sobre la importancia de la Cruz en la fe cristiana.

(Diócesis Córdoba/InfoCatólica) Diversas fuentes cifran la asistencia en 150.000 personas, pero la Policía Local aseguró que el número de asistentes era «incalculable», «un volumen de gente como nunca se había visto en Córdoba».

La repercusión del acto ha sobrepasado el ámbito religioso, ya que diversos empresarios hoteleros han destacado el beneficio que ha causado en la ciudad la marea de fieles que han acudido desde toda Andalucía y España.

Homilía de Mons. Demetrio Fernández, obispo de Córdoba, en la Misa que siguió al Vía Crucis:

«¡Cómo brilla la cruz, de la que colgó Dios en carne humana y en la que, con su sangre, lavó nuestra heridas!». Así reza una antífona de laudes de la fiesta de hoy, 14 de septiembre, la Exaltación de la Santa Cruz.

Para el cristiano, la Cruz no es solamente un objeto de adorno, sino el símbolo y la señal de un acontecimiento histórico, que ha cambiado el curso de la historia humana: Jesucristo, el Verbo de Dios hecho carne, el Hijo eterno hecho hombre como nosotros y nacido de María virgen, ha ofrecido su vida libremente al Padre en favor de todos los hombres, para rescatarnos del poder del infierno y de la muerte y para hacernos hijos de Dios, hermanos de todos los hombres y herederos del cielo.

Ese Cristo, centro de nuestra vida y de la historia, sigue vivo y presente en medio de nosotros. Y con la fuerza de su Espíritu Santo continúa transformando nuestros corazones y haciéndonos constructores de un mundo nuevo. La fe en él ha movido montañas, como ha movido hoy a la ciudad de Córdoba con este Viacrucis magno en el Año de la Fe.

En el ejercicio del viacrucis, que el beato Alvaro de Córdoba introdujo en occidente, acompañamos a Cristo y nos dejamos acompañar por él en el camino de nuestra vida. De él a nosotros y de nosotros a él se han cruzado las miradas, la suya y la nuestra, para comprender una vez más que él ha ido por delante y nos invita a seguirle.

El camino de la Cruz sigue vivo hoy en tantas personas que sufren, tanta gente sin trabajo, incluso jóvenes, que tienen que emigrar. Ese sufrimiento sigue vivo hoy en tantas personas sin hogar, porque se les hace imposible pagar la hipoteca, por haber perdido su trabajo. Un sufrimiento que viene de la injusticia, de la avaricia, de la corrupción en el empleo del dinero de todos, del mal reparto de los bienes, cuando tenía que haber para todos. Un sufrimiento originado por una enfermedad inesperada o por la inutilidad de los años que avanzan. Un sufrimiento causado por el desamor de quienes tienen la obligación de amar.

Para todo ese sufrimiento, Jesucristo sale a la calle a decirnos: «Toma tu cruz y vente conmigo». Ante todos estos sufrimientos humanos, Jesús no ha pasado de largo, sino que, como buen samaritano se ha abajado de su cabalgadura y nos ha tomado sobre sus hombros, como se acaricia a una oveja perdida cuando se la encuentra, como se alegra el Padre cuando vuelve a casa el hijo perdido. Hemos contemplado su rostro lleno de dolor. Qué expresiva cada una de las imágenes que han llegado hasta esta Santa Iglesia Catedral de Córdoba, templo principal de la diócesis y de la comunidad católica de Córdoba. Es el dolor de todos los que sufren hoy, y ante el cual, Jesús nos invita a ser como el buen samaritano, que no se desentiende de los demás, nos invita a ser como el Cirineo que ayuda a los hermanos y comparte sus sufrimientos para aliviarlos.

La Cruz de Cristo es fuente permanente de esperanza, solamente por el hecho de haber sufrido con nosotros y por nosotros. Ante el dolor humano no sirven las palabras, son precisos los gestos de amor. Y también en esto, él va por delante. Pero hoy celebramos la Cruz gloriosa, la Cruz florida de mayo, la Cruz victoriosa, porque el Crucificado ha vencido la muerte resucitando. Cada una de nuestras imágenes recobra vida cuando las miramos con esta certeza de la fe, cada imagen se convierte en estandarte, que atrae todas las miradas. Jesús está vivo, y me ama. Jesús ha resucitado y vive glorioso en la Santa Hostia de la Eucaristía, en el Cáliz de su sangre derramada para el perdón de nuestros pecados. Por eso, adoramos su presencia viva, agradecemos su ofrenda de amor, que nos hace hijos, comulgamos su Cuerpo y Sangre para hacernos hermanos de una familia que no conoce fronteras. La adoración eucarística es el mejor colofón a este acto de fe, a este Viacrucis en el Año de la fe.

Nunca ha sido tan bonita esta Catedral, como hoy, llena de cofrades creyentes, que se gozan de pertenecer en el seno de la Iglesia Católica a su propia Cofradía. Gracias a todos. Me consta que habéis acariciado con mucha ilusión este día, y os felicito a todos por el éxito de su realización. Habéis puesto en la calle a vuestros sagrados titulares para decir al mundo entero –os han seguido desde todo el mundo- que la fe no es algo pasado ni obsoleto, sino la fuerza que hace mover a una ciudad, porque del corazón de cada cofrade ha salido esa devoción, multiplicada por los miles de participantes.

Con Jesús iba su Madre, va siempre su Madre bendita. Con nosotros ha estado María, la Reina de los Mártires, -Córdoba sabe de mártires y de martirio- la que estuvo junto a la Cruz y la que gozó con el triunfo de su Hijo en la resurrección. Con nosotros camina siempre ella, como madre buena que nos comprende y nos estimula a seguir a su Hijo y a ocuparnos de sus hijos.

Demos gracias a Dios por todo lo que hoy hemos vivido. Gracias a vosotros, todos los que habéis colaborado. Que Dios nos bendiga a todos con su misericordia. Amén

 

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15 comentarios

Pepito
Esta es la España que merece la pena, una España que exalta públicamente a Cristo y a su Cruz, y no ese estado laicista y demoníaco que algunos pretenden, empeñado en ocultar a Cristo y a su Cruz, para mayor triunfo de lo que le place al Diablo.
16/09/13 12:27 PM
Jaime Fernández de Córdoba
Supongo que el gobierno, atento a la "voz de la calle", tomará decisiones en consecuencia...
16/09/13 12:43 PM
Tony de New York
Y claro, las comunidades de base estaban presente con las redes cristianas.
16/09/13 2:41 PM
Mariano
Rezar el Vía Crucis es acompañar en espíritu al Señor Jesucristo en su pasión, muerte y resurrección, es decir del paso de su vida como hombre de este mundo que le odió, se burló de Él, y se desentendió de Él (salvo sus fieles)... hasta su exaltación por el Padre como dueño y Señor de todo lo creado glorificado ante cientos de hermanos suyos en Galilea.
16/09/13 2:51 PM
carlos
Que obispo tan providencial
16/09/13 4:41 PM
Sonia S
Lo veis? donde esta la apostasia generalizada y universal que por aqui tantos lamentan y claman? almas de poca fe ...

;-)

PS: me ganaria la animadversion de algunos conocidos mios ateos; si tuviera que preferir, elegiria una manifestacion asi (religiosa) que la promovida por los gais para Madrid 2017. Demasiado promiscua veo esta ultima si es para que desfilen gorras de estilo nazi y cadenas y asi. Si fuera para conferencias ...
16/09/13 5:42 PM
Octavio Augusto
En qué se basa dicho éxito?
16/09/13 6:01 PM
David
Octavio, en llenar la calle de fieles adorando a Cristo. ¿Te parece poco?
16/09/13 6:45 PM
Luis Fernando
Ruego me disculpéis por haber admitido el comentario del "muñeco". Los iconoclastas deberían al menos demostrar cierto respeto.
16/09/13 7:33 PM
Anonimo
Este es un ejemplo claro de como cuando los pastores hacen lo debido, el pueblo responde y el Espiritu Santo se desborda sobre el Pueblo de Dios
16/09/13 8:06 PM
Pepito
Ya sólo falta convencer a la gente que ha asistido al Via Crucis que dejen de votar al PP, al PSOE o a cualquier otro partido abortista, divorcista y gaymonista, o también, en caso de que no voten a nadie, se decidan a votar a los partidos sinceramente católicos, para que la sociedad española sea verdaderamente cristiana y no peor que muchas sociedades paganas.

Sonia, es posible que no exista una apostasía general en sentido estricto o técnico de total pérdida o abjuración de la Fe, pero en todo caso si que hay una Fe muy tibia y floja que no da los frutos deseados de la justicia, también en lo económico y social, para todos.

Estoy convencido de que si los millones de católicos españoles actuásemos de manera coherente con la Fe, no nos acosarían los gravísimos males (paro, aborto, maltrato doméstico, generaciones de jóvenes perdidas, etc.)que actualmente padecemos.
16/09/13 11:23 PM
Franco
Sonia, la apostasia va mas alla de la participacion en actos religiosos, y se expresa tambien en el comportamiento de los fieles.
17/09/13 1:52 AM
cromacio
En primer lugar, quiero pedir perdón por el comentario de "muñeco", me expresé mal, en el sentido de que esa expresión la utilizan los musulmanes de Ceuta, cuando el Cristo de Medinaceli, salía de la parroquia del Príncipe, (barrio eminentemente musulmán de la Ciudad de Ceuta), pero vuelvo a pedir perdón de nuevo si a alguien la ha molestado o le ha hecho daño ese comentario.
He estado en ciudades donde mayoritariamente viven Musulmanes, a parte de Ceuta, como por ejemplo el Cairo, y creo que los que estáis hablando en el foro sabéis lo que es una persecución  en toda regla.
Aquí en Andalucía, vivo mi fe en una parroquia, que tiene su cofradía que trabaja bastante bien, tiene sus cultos, muy bien, pero yo voy a otra cosa, durante el año van a misa semanalmente en las tres misas que hay, como mucho 250 personas, llega cuaresma y al miércoles de ceniza van 200 o 250 personas a la imposición de la ceniza, durante los domingos de cuaresma, excepto en el triduo,  porque vienen otras hermandades invitadas, seguimos las 250 personal a la misa dominical, entiéndase entre el sábado y domingo, llega el Domingo de Ramos y la Iglesia está a reventar, llega el Jueves Santo, Viernes Santo, Vigilia Pascual y Domingo de Resurreccion y al siguiente fin de semana seguimos los 250.

El sacar pasos y las manifestaciones públicas de fe está bien, pero ¿llama a la Fé?, o llama en un momento a esa religiosidad natural del hombre, a esa religiosidad del miedo que te hago una ofrenda para que
17/09/13 8:05 AM
Sonia S
Franco, nunca estais contentos con nada ;-)

no, a ver para mi la apostasia es renegar de Dios y alejarse de la Iglesia. Creo que el concepto se extiende mas alla de la formalidad. Siendo asi, desde luego no cuadra nada con esta procesion multitudinaria en Cordoba.

Otra cosa es lo que sugiere cromacio en la que yo leo algo cercano a la pura supersticion, o como minimo al folk, a la religiosidad popular ambigua y vaga modulada por la tradicion, catolica en el caso de Espana.

Si es asi, entonces Espana nunca ha sido verdaderamente catolica ya que la nostalgia de muchos por epocas pasadas solo consistia en esto, mucha procesion y muchas saetas, muchas misas llenas en solemnidades con estreno de trajes y? ... poco mas?

Cuando estuve de invitada en la JMJ de Madrid recuerdo que en charlas ya se comentaba esto, un millon (o mas) de jovenes con el Papa, pero las iglesias vacias.

so then? Algo no cuadra.

Saludo ;-)
17/09/13 11:25 AM
Pepito
Pues sí, Sonia, se puede seguir conservando la Fe, en cuanto conjunto de verdades admitidas, pero tenerla muerta en cuanto a las obras, es decir, no ser coherente en la práctica con las verdades de la Fe que admitimos en la inteligencia. Una cosa es predicar y otra dar trigo, como se dice vulgarmente.

Por otra parte, las 150.000 personas, que fueron al Via Crucis de Córdoba, son poca cosa respecto a los millones de bautizados católicos que hay en España.

Se puede creer que Cristo es Dios hecho hombre para salvarnos por medio de su pasión y cruz y que resucitó, junto a las demás verdades de la Fe, ir a Misa, procesiones y hacer novenas, etc., y luego a la hora de la verdad no obrar como manda la Fe y abortar, divorciarse, practicar la homosexualidad, votar a partidos abortistas, trabajar por afán de lucro y un largo etcétera.

Como dijo el mismo Cristo: "No todo el que dice Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que cumple (es decir hace)la voluntad de Dios."

Y en este hacer o cumplir de veras la voluntad de Dios es en lo que fallamos (y me incluyo) la mayoría de los católicos, por desgracia. Por eso nos merecemos estar como estamos, desacreditados y burlados por la gente a causa de nuestra tibieza e incoherencia.

Creo que aquí en Infocatólica, una de las cosas que hacemos, desde la autocrítica, es animarnos unos a otros a salir de tal tibieza e incoherencia para salir de este pozo de injusticia en el que nos hemos metido por nuestras propias cu
17/09/13 12:05 PM

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