Acerca de la gracia suficiente
Dado que Dios ha querido libremente ordenar a las creaturas racionales a un fin sobrenatural, que como tal no puede ser alcanzado mediante actos puramente naturales de estas creaturas, de donde éstas necesitan absolutamente de la gracia de Dios, que eleva los actos de estas creaturas al orden sobrenatural, para llegar a su fin último, y teniendo en cuenta que los mandamientos divinos se ordenan precisamente a conducir a las creaturas racionales hacia ese fin último sobrenatural, y que Dios no manda lo imposible, porque sería injusto que la creatura se condenara por no hacer lo que no podía hacer, o por hacer lo que no podía evitar hacer, se sigue de ello que Dios da la gracia que hace posible el cumplimiento de los mandamientos, y ésa es la que los teólogos llaman “gracia suficiente”.