Ni lectores ni oyentes
Contaron los medios, hace días, que el papa Francisco, en una visita al Dicasterio para la comunicación, se hacía esta pregunta: “¿cuántos escuchan la Radio, y cuántos leen L’Osservatore Romano?”. Santidad, así entre nosotros, nadie.
Me muevo mucho por el mundo de la información religiosa y como pueden imaginar conozco a bastantes informadores y expertos en estos temas. Jamás me han dicho que lean L’Osservatore Romano. Sacerdotes de mi entorno, nadie. Me temo que laicos poquitos. Es decir, que hablamos de una publicación que se hace desde el Vaticano, que se lee allí por si acaso y fuera de eso en algún convento donde reciben una suscripción gratuita. La nada. Radio Vaticana aún menos. Es lo que hay.