¿Tiene bula el padre Ángel para despotricar contra la doctrina de la Iglesia?
El padre Ángel, cuya obsesión enfermiza por ser niño en el bautizo, novio en la boda y muerto en el entierro es bien conocida, no pierde ocasión alguna de manifestarse contra la doctrina de la Iglesia. Parece ser que su condición de Premio Príncipe de Asturias y fundador de la Cruz de los Ángeles, Mensajeros de la Paz y Edad Dorada, le concede bula para hacer declaraciones sin ton ni son. Las de esta semana son para enmarcar y, sobre todo, para que algún obispo, por ejemplo el suyo, le ponga de una vez en su sitio.
Este insigne y famoso sacerdote ha tenido la desvergüenza de decir que no está a favor del aborto pero que tampoco se puede estar a favor de los niños que no se desea que nazcan. Se habrá quedado a gusto después de decir esa barbaridad. ¿Nos puede explicar en qué parte del evangelio Jesús aprueba que no se esté a favor de los niños cuyo nacimiento no es deseado? ¿tendrá el padre Ángel el valor de afirmar tal cosa delante de aquellos matrimonios que no pueden tener hijos y anhelan la adopción?
Y claro, ¿qué es lo que propone este -para vergüenza de la Iglesia lo digo- SACERDOTE CATÓLICO para evitar tal contingencia?: “Hay que prever los embarazos no deseados con todos los métodos posibles, sea la fidelidad, el absentismo o el preservativo“. Pero lo más gracioso es que justo tras pasarse por el forro la doctrina católica sobre estas cuestiones, el hombre va y añade que “por encima de ser católico, uno es ciudadano del mundo y tiene que ser tolerante“. Y no contento con ello, tiene el cuajo de decir: “sigo el voto de disciplina de la Iglesia Católica y creo lo que predica, pero también hay que ser tolerante“.
Pues eso es mentira. Este hombre no sigue el voto de disciplina de la Iglesia Católica. No cree lo que ella predica sobre la sexualidad humana y la natalidad. Este sacerdote se salta, conscientemente, la doctrina de la Iglesia en lo relacionado con los preservativos. Este presbítero se aprovecha de su “popularidad” para hacerlo. Y, efectivamente, el padre Ángel es ciudadano del mundo antes que católico, porque es de aquellos que piensa que se puede servir a dos señores. El católico de verdad es antes y por encima de todo católico. El padre Ángel no. A él no se le aplica lo que dijo Cristo a sus apóstoles: “no sois del mundo”. Claro que esa no es la única frase de Cristo que no va con su personalidad. Tampoco hace ni repajolero caso a lo que dice el Señor en Mateo 6,1-3:”Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de lo contrario no tendréis recompensa de vuestro Padre celestial. Por tanto, cuando hagas limosna, no lo vayas trompeteando por delante como hacen los hipócritas en las sinagogas y por las calles, con el fin de ser honrados por los hombres; en verdad os digo que ya reciben su paga. Tú, en cambio, cuando hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha“. No conozco a nadie que ame tanto una cámara y un micrófono para demostrar lo bueno que es. Por tanto, aunque esos versículos no aparecen en el Nuevo Testamento del Padre Ángel, leyéndolos me pregunto de qué le va a valer toda la buena obra social que desempeña en sus ONGs una vez que tenga que dar cuentas a Dios.
Por supuesto, criticar al padre Ángel sitúa a cualquiera en el disparadero. Eso de que alguien se parapete detrás de niños necesitados o de una buena obra social para arremeter contra el magisterio de la Iglesia, para comulgar con rosquillas o hasta para pagar abortos, está muy bien visto por la mayoría de los medios. Incluso reciben medallas y premios importantes. Y quien osa quejarse pasa a ser acusado de inquisidor y pre-conciliar. Pues me da lo mismo. No sé si las ONGs del padre Ángel son tan efectivas como él presume, pero lo que sí sé es que como sacerdote traiciona a la Iglesia cada vez que abre la boca para negar su magisterio. ¿Habrá algún obispo que se lo diga a la cara?, ¿habrá algún sucesor de los apóstoles que contrarreste públicamente el ataque constante que recibe la doctrina de la Iglesia por parte de ese cura famoso?
Luis Fernando Pérez Bustamante