Traje de baño
En los pretéritos tiempos de cordura, las nietas hacíamos caso a nuestras abuelas (casi siempre) y no arriesgábamos el pellejo bañándonos antes de que la Virgen (la de julio, la del Carmen, claro) bendijera en procesión nuestras playas. Ni después de que la Virgen (la de octubre, la del Pilar, obviamente) indicara que ni un baño más y ¡a estudiar!
Ah, y ¿qué decir del traje de baño? ¡Cuánto disfrutábamos discutiendo sobre el asunto! Que si el escote, que si el color, que si el tejido, que si el largo, que si dar ejemplo a las hermanas, que si los chicos y los hombres…
Por eso me ha hecho mucha gracia esta amable chica que explica científicamente algo de lo que la abuela, mamá y yo sabíamos, aunque no tuviéramos tantos estudios pero sí algo asimilados los mandamientos y las bienaventuranzas… y algo de sentido común.
Ah, y si quieren más doctrina sobre el asunto, acudan al elogio del pudor, no quedarán defraudados.
11 comentarios
Aunque creo que lo mejor sería tener la suficiente relevancia en la vida política para prohibir ese atentado contra el pudor y el recato femenino que algunos llaman "Top Less", y los bikinis. Basta de contemplaciones, hermanos: hay que imponer la enseñanza de nuestra Madre en todo lo relativo a las vestimentas, y los bañadores no pueden ser una excepción.
El marido tendrá la responsabilidad del perfecto decoro de su esposa. Como decía el de Tarso: "Así como la Iglesia es dócil a Cristo, así también las mujeres deben ser dóciles en todo a su marido.". Por tanto, si el marido dice que no se pongan el traje de baño impúdico, deberán obedecerlo.
Y, mejor, que las mujeres se bañen con burka, ¿no, Rufus? O que no se bañen.
Esta recatada jovencita le parecerá impúdica a un musulmán acostumbrado a ver a mujeres con trajes por los pies y velos. Pero es que una mujer con velo le parece impúdica a quien está acostumbrado a verlas con burka.
Y allí en donde todo el mundo lleva burka, se considera impúdica a la mujer cuyas pisadas hacen ruido. Y si no se oye nada, considerarán impúdica a la sombra negra delatora que hace intuir que detrás de ese manchón hay una mujer.
Conclusión:
El impúdico es el ojo que mira
pero,
La mujer que no quiere ser mirada tendrá que pasar desapercibida entre las demás, sea cual sea la moda.
En cuestión de vestimentas tan esclava del machismo y tan mujer objeto es quien se ve obligada a vestir "sexi" como quien se ve obligada a esconderse detrás de un burka, en vez de poder elegir la ropa adecuada para lo que tiene que hacer según su propio criterio.
Lo suyo es lo funcional: para nadar no vas a utilizar bata de cola. ¿Bañador o bikini? lo que cada cual encuentre más cómodo -si hay mirones van a mirar lo mismo, lo suyo es que no los haya.
Para montar a caballo tendrás que llevar pantalones de montar.
Para bailar flamenco un traje de gitana.
Y el resto, más de lo mismo.
Nunca la mujer cae tan bajo ante el hombre como cuando aparece semidesnuda, y viceversa. Los factores socioculturales tienen su peso, pero ¿acaso creemos que en las culturas primitivas el pudor no existe?: el control de la mirada es básico en tribus en que sus miembros aparecen semidesnudos.
Los modelitos de bañadores que presenta esta hermana son pudorosos y honestos y al mismo tiempo modernos, cómodos y muy ponibles.
!Si es que cuando las mujeres católicas son coherentes con el pudor y la modestia en el vestir son las más elegantes del mundo¡
Sugiero a esta hermana que cree una pasarela de moda católica del vestir honesto, una especie de Fashion Week de la moda cristiana que marque tendencia entre todas las mujeres católicas que al mismo tiempo que estar guapas y cómodas deseen cumplir con el deber moral del pudor y honestidad en el vestir.
!Bien por esta hermana de la alta costura católica¡
En Afganistán no pueden ir más tapadas y cualquier hombre sigue pensando que mujeres y niñas son objetos de usar y tirar.
Esta campaña me recuerda a lo que mi abuela (nacida en 1908) me contaba sobre los pantalones y las mujeres: era impensable en su juventud que ninguna mujer los usara: marimachos y furcias era lo más suave que se les decía.... luego en mi juventud ella me veía en pantalones y pensaba que cuántas tonterías había en su época....
La suciedad está en la mente y los ojos del que mira, no en si llevo bikini o burka...
Y seguro que más de uno lo que encuentra realmente sexi es esos trajes de baño tipo ropa interior de los tiempos de la polka.
También mi abuela contaba que cuando llevaban los trajes por los pies los hombres iban a ver los tobillos cuando se subían al tranvía.
Es el ojo que mira.
Que alguien diga que el bikini no es una prenda adecuada no significa que esté sugiriendo la imposición del burka para el baño.
Señalar los extremos para de ahí sacar la conclusión de que la culpa es exclusivamente del que mira me parece una absoluta exageración. Yo no sé cuántas mujeres de las que así hablan no se sentirían incómodas si se les colocara delante un caballero musculoso con una musculosa (camiseta sin mangas creo que se le llama por otros lados) escotada o una ropa muy justa. No creo que nadie piense por ello que habría que imponer la túnica monástica con capucha para todos los hombres, ni que algunas mujeres (por el mero hecho de sentirse incómodas) sean unas degeneradas.
Es cierto que hay un elemento cultural fuerte en lo referente al pudor, no lo niego, pero me parece que hay un cierto límite que es de naturaleza. Los seres humanos no somos puros espíritus, tenemos en nuestra constitución una parte animal que no es mala en sí misma, pero cuyas tendencias desordenadas por el pecado original no podemos soslayar.
Y que conste que la que habla es mujer...
San Juan Pablo II
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