(InfoCatólica) Los obispos aseguran que no se puede ofrecer la muerte cuando ni siquiera se provee con lo necesario en atención sanitaria para una vida digna.
Además recuerdan que la vida humana es sagrada e inviolable y cualquier complicidad con la muerte la acaban pagando los más débiles. De hecho, denuncian que la sentencia no solo cambia la ley actual sino que atenta contra el Código de Ética Médica, que establece que un doctor debe curar y no matar a los enfermos.
En el comunicado, los prelados desechan la idea de que la eutanasia supone libertad para el paciente, ya que la situación vulnerable a nivel emocional del mismo afecta a su toma de decisiones. Igualmente recuerdan que el proceso de legalización de eutanasia en el mundo suele acabar en la toma de las decisiones finales no por los pacientes, sino por los médicos o familiares de los enfermos.
Los obispos ecuatorianos advierte también que la legalización de la eutanasia apoya la idea de que hay personas desechables, que son una carga para los demás, que pueden ser eliminadas.
Finalmente piden una ley de cuidados paliativos que ayude de verdad a las personas que sufren enfermedades terminales. En la actualidad, recuerdan los obispos, solo el 3,5% de la población tiene acceso a dichos cuidados.
FRENTE A LA DESPENALIZACIÓN DE LA EUTANASIA
— Conferencia Episcopal Ecuatoriana (@Confepec) February 14, 2024
No podemos ofrecer muerte si ni siquiera proveemos los mínimos requerimientos de salud para una vida digna.https://t.co/USZHRjGNZf#IglesiaCatólica #ConferenciaEpiscopal #SomosIglesiaViva #Ecuador pic.twitter.com/lbSGgmS7Rv