(Agencias/InfoCatólica) Según las fuentes de la CEE si el informe no se entrega en esos días, se entendería que se han incumplido los términos de contrato.
Al conocer dicha información el despacho Cremades & Calvo Sotelo ha asegurado que entregará en pocos días el estudio pero ha advertido que los redactores del trabajo están a la espera de los datos del Dicasterio de la Doctrina de la Fe sobre 300 casos allí depositados que no se han podido contrastar si coinciden con la lista disponible.
No gusta el retraso
En la última comparecencia del secretario general de la CEE, Mons. García Magán, habló de la demora en la presentación de la auditoría, que en junio se había anunciado que sería presentada en septiembre.
Magán informó que durante la última Comisión Permanente celebrada los días 26 y 27 de septiembre, se reunieron con Javier Cremades y dos miembros de su equipo, que confirmaron que preveían tener «el texto definitivo» en las siguientes semanas.
Fue en ese momento cuando el secretario general anunció que «será estudiado por la Comisión Ejecutiva» y que sería presentado al resto de obispos y a la sociedad, aunque destacó «que a los obispos no nos gusta el retraso».
El obispo desvinculó a la Conferencia Episcopal de los motivos de la demora y aseguró que, por respeto a la imparcialidad, «no hemos interferido y estamos esperando a que se nos entregue».
Iba a durar un año
En febrero del 2022, tanto el presidente de la CEE, cardenal Juan José Omella, como el presidente del bufete, Javier Cremades, aseguraron en una rueda de prensa que el informe estaría listo en un año.
