(InfoCatólica) En esta carta, el arzobispo explica que los sacerdotes de la archieparquía de Ernakulam-Angamaly deben llevar a cabo la Santa Qurbana el próximo domingo de acuerdo al «rito unificado» establecido por el Sínodo siro-malabar hace dos años. En caso contrario, enfrentarán sanciones canónicas.
Durante la solemnidad de la Asunción, el representante papal ingresó a la basílica de Santa María acompañado por la policía y en la homilía emitió una advertencia contundente. El ultimátum marca un nuevo giro en el intenso conflicto que afecta a la comunidad cristiana de Kerala.
La carta de Mons. Vasil establece que cualquier desobediencia será considerada como «desobediencia voluntaria, personal y culpable con respecto al Santo Padre», lo que resultará en medidas disciplinarias adicionales. El enviado papal también menciona que si algún sacerdote siro-malabar enfrenta dificultades para llevar a cabo la liturgia eucarística según la decisión sinodal debido a amenazas de intimidación o violencia física, no está obligado a realizar celebraciones públicas hasta que la situación mejore.
Mons. Vasil solicita además que la carta del Papa Francisco de marzo de 2022, en la cual el pontífice instaba a la adhesión a la «liturgia unificada» aprobada por el Sínodo siro-malabar el verano anterior, se lea el 20 de agosto en todas las iglesias parroquiales, sucursales e instituciones de la Arquidiócesis de Ernakulam-Angamaly donde se celebra la Qurbana dominical. Una vez cumplida esta instrucción, los sacerdotes deben enviar una carta al canciller de la Curia arzobispal de la diócesis de Ernakulam-Angamaly para confirmar la lectura, con la firma del párroco, el vicepárroco y otros representantes del consejo parroquial.
La carta advierte sobre las consecuencias de no cumplir con esta orden, señalando que se aplicarán sanciones según lo dispuesto en el Código de Derecho Canónico de las Iglesias Orientales. El canon 1438 de dicho código establece que aquel que omita deliberadamente la proclamación de comunión con el pontífice, el arzobispo mayor y su propio obispo en el contexto de la celebración eucarística, y no se retracte cuando sea debidamente advertido, se enfrentará a una pena adecuada, que incluso puede incluir la excomunión.
Queman la carta
En reacción a la decisión del Sínodo, se han manifestado opositores en la arquidiócesis de Ernakulam-Angamaly. Grupos de fieles protestaron frente a la Basílica de Santa María, símbolo de la protesta, quemando públicamente la carta de Mons. Vasil. El P. Kuriakose Mundadan, secretario del Consejo Presbiteral de la arquidiócesis, expresó que los sacerdotes locales no cumplirán con la orden, argumentando que el Sínodo engañó al Papa Francisco y que su adhesión no es posible. También afirmó que, aunque algunos sacerdotes estén dispuestos a adoptar la liturgia uniforme, no podrán llevarla a cabo en sus iglesias debido a la oposición mayoritaria de los fieles. Sugirió que considerar su liturgia como una variante podría ser una solución.
Los rebeles piden que se expulse al arzobispo
Mientras tanto, el Almaya Munnetta Samiti, uno de los grupos de fieles más activos en las protestas de los últimos dos años, ha enviado una petición al presidente de la República de India, Droupadi Murmu. En esta petición, solicitan que el gobierno indio declare a Mons. Cyril Vasil como persona non grata y lo expulse del país. Argumentan que la solicitud de ayuda externa a un líder de una nación extranjera por parte del sínodo de la Iglesia siro-malabar es injustificada, ilegal y atenta contra la soberanía de la nación india.
Aunque es poco probable que las autoridades indias acepten tal solicitud, este intento de recurrir al nacionalismo indio en el contexto de Kerala demuestra una vez más el daño que está causando este conflicto dentro de la comunidad católica india.
Con información de Asia News