Católicos y ortodoxos condenan conjuntamente la decisión de los luteranos suecos de casar a homosexuales

Muy lamentable, pero tengo que decirlo: Eso sucede por apartarse de la barca de Pedro. No es lo mismo andar en un arca que en una canoa, vulnerable ante cualquier viento de doctrina.

Bueno Lutero, allí tienes al hijo de tus entrañas.

Me parece buena cosa que ortodoxos y católicos hagan una declaración conjunta.

En la lucha pro-vida y pro-familia, vamos a hacer amistades de calidad, que nos acercarán a la unidad.

Es una completa aberración. Evidentemente los luteranos suecos ya no son Cristianos, son cualquier cosa distinta, pero no forman parte de la Cristiandad.

Hace muy poco tiempo, el obispo católico de Finlandia, Teemu Sippo, dijo que de Suecia esto pasará a Finlandia, y que tendrá consecuencias en las relaciones entre católicos y luteranos:

http://yle.fi/uutiset/news/2009/10/finlands_catholic_bishop_warns_of_rift_with_lutherans_over_gay_marriage_1074116.html


Sin duda que hay un modo de ecumenismo que se está resquebrajando por todos lados.
En cuanto a la situación de Suecia, uno de los obispos suecos que pertenecen al movimiento "católico" dentro del luteranismo (el High Church Lutheranism: http://en.wikipedia.org/wiki/High_Church_Lutheranism ) estuvo presente en la reunión de Forward in Faith, preguntándose sobre las implicaciones de las últimas provisiones canónicas del Santo Padre.
Con ellos todo es mucho más difícil, pero en mi pequeña "lista", Suecia va después de los anglicanos. ¡Si hasta tienen benedictinos!

http://www.staugustineshouse.org/

Lo importante, lo muy importante, es que la Iglesia Católica parece decidida a hablar con todos, pero a profundizar sólo con aquellos con los que se puede.

A esta gente no se les puede ni llamar Cristianos. Han perdido el norte y la moral por completo. Hay que empezar a dar el verdadero combate,visiten:
elcombatecristiano.bolgspot.com

No es la barca de Pedro, es canoa... muy bien! Y cómo les hace agua la canoa! Alguien dijo 30 años... yo digo que si llegan a la década se pueden considerar afortunados.

"Evidentemente los luteranos suecos ya no son Cristianos, son cualquier cosa distinta, pero no forman parte de la Cristiandad"

Pues no creo que en Suecia existan muchos luteranos suecos, tomando en cuenta el nivel de pràctica de esa "religiòn", que se reduce: bodas y bautizos

Y sin embargo Suecia (y también Dinamarca, no debe pasársenos por alto) han dado al cine dos de los cineastas más originales, geniales, y constantemente preocupados por elhecho religioso. Me refiero, claro es, al sueco I. Bergman y al danés K. T. Dreyer.
Sin embargo, bendecir sacramentalmente, al menos hasta donde hay "sacramento" en una celebración matrimonial luterana o protestante (sabido es que para la inmensa mayoría de los grupos protestantes el matrimonio no tiene categoría de sacramento), ya es pasarse tres pueblos, a mi mi juicio. Porque claro que una cosa es el elemental respeto que debemos a los homosexuales, es decir, a todos los miembros de lo que se llama movimiento "lgtb" (lesbianas, gays, transexuales, bisexuales) por su condición de personas con originaria dignidad y digneidad (Xubiri) de hijos e hijas de Dios, y otra muy distinta relativizarlo todo, vaciar de sustancia la fe, la doctrina,los sacramentos... En definitiva, secularizarlo todo.
De todas formas, el mundo protestante puede que está más dividido, doctrinalmente hablando, que el mundo católico; bueno, más que seguro que es así. Y sin ir más lejos, una prueba de ello la tenemos entre nosotros, a escala internética o internáutica: la "Lupa Protestante", incluida en la superprogresista "Redes cristianas", publica artículos de Gustavo Vidal Manzanares en que se defiende el aborto; por su parte "Protestante Digital", portal que acoge las opiniones del muy erudito polígrafo César Vidal Manzanares, hermano del anterior, rechaza unánimemente el aborto.
Por lo demás, según mi sentir no todo es malo en la modernidad, en absoluto, en los avances científicos de todo tipo, etcétera. La Iglesia se puede aprovechar de todo ello para su razón de ser, que no es otra ni puede ser otra que la de anunciar a Jesucristo. Pero "desmisterizar" a la Iglesia hasta esos extremos conduce a desnaturalizarla.
En la percepción de la Iglesia como "misterio sacro en el que acontece Dios" mucho podrían enseñar y acompañar a los católicos los ortodoxos, secularmente inclinados a experimentar un cristianismo apofático, más místico y menos racionalista. Y por su partelos protestantes podrían seguir indicándonos su intuición sobrela centralidad de la Palabra, a condición de que en efecto la centralidad para ellos sea la Palabra y no el excesivo apego a las modas del siglo, a lo mundano.
LUIS ALBERTO HENRIQUEZ LORENZO.

Pues yo estoy muy de acuerdo con que la IGLESIA LUTERANA haya reflexionado y tomado la decisión de no condenarnos más. Felicito al clero de la Iglesia Luterana por haberse abierto al reconocimiento que tenemos los gays y lesbianas; pues, nosotros también somos hijos de DIOS, nosotros no hemos decidido nacer así, no hicimos ningún curso, o nunca fuimos a ninguna escuela para aprender a ser homosexuales. Gracias a DIOS y a la IGLESIA LUTERANA.

Aunque cierto es, históricamente innegable diríamos, que también la Iglesia universal no ha sido suficientemente justa, amorosa y misericordiosa y acogedora con las personas homosexuales, es igualmente injusto sostener que la Iglesia católica margina, persigue o discrimina a las personas de tendencia homosexual (gays, lesbianas, transexuales, bisexuales). Pero otra cosa muy distinta es que la Iglesia "tenga que aceptar2 que la práctica homosexual es moralemte aceptable, de una parte, y de otra, incluso bendecible, sacramentalmente bendecible, aunque sea mediante una pública celebración que no es propiamente un sacramento, como sabemos que es toda boda oficiada por cristianos luteranos.
Sin embargo, Dios bendito, creo que entiendo el drama personal de muchas personas homosexuales; entiendo o entendería incluso su no sanada animadversión hacia o contra la Iglesia. Sólo que la verdad es la verdad, la diga Agamenón o su porquero.
La Iglesia proclama que por fidelidad a la Verdad Revelada no puede aceptar la práctica de la homosexualidad comonormal, como legítima, comoequiparable a la práctica de la sexualidad heterosexual. Si tú estás en contra de la postura de la Iglesia al respecto -eres muy libre para hacerlo- aporta razones para el debate que no sean meras descalificaciones.
LUIS ALBERTO HENRIQUEZ LORENZO