(InfoCatólica) La intervención del Prefecto de la Signatura Apostólica en la gala anual de InsideCatholic.com, levantó los aplausos de los presentes al referirse a la situación de los políticos que pretenden ser católicos a la vez que apoyan la cultura de la muerte. "A tales políticos no se les debería administrar ni la Sagrada Comunión ni los ritos funerarios", sentenció monseñor Burke, quien aseguró que "denegar los sacramentos no es un juicio definitivo sobre sus almas sino un reconocimiento del escándalo y sus efectos".
"Debemos tener el coraje de mirar a la verdad cara a cara y llamar a las cosas por su nombre", afirmó el arzobispo, que indicó que eso implica que para que un político que ha apoyado públicamente el derecho al aborto pueda volver a recibir los sacramentos, su arrepentimiento ha de ser igualmente público.
El Prefecto de la Signatura Apostólica rechazó igualmente que su postura suponga una ruptura en la necesaria unidad de la Iglesia sobre esta cuestión. "La unidad de la Iglesia está fundada en la predicación de la verdad en el amor. Esto no destruye la unidad sino que ayuda a restaurar una brecha en la vida de la Iglesia", sentenció el arzobispo.
No es la primera vez que monseñor Burke se manifiesta en ese sentido. Cuando era el arzobispo de San Louis se caracterizó por ser uno de los prelados nortamericano más activo contra los políticos católicos que se separaban públicamente de la moral católica en el derecho a la vida y el matrimonio gay.
Sus palabras vuelven a avivar la polémica provocada por el reciente funeral multitudinario tras la muerte del senador demócrata Edward Kennedy, quien se caracterizó por ser uno de los más ardientes defensores del "derecho" a abortar de las mujeres. La presencia de S.E.R Sean O´Malley, cardenal arzobispo de Boston, en el funeral provovó una ola de protestas entre los católicos conservadores de EEUU. Ahora, el responsable de la Signatura Apostólica en el Vaticano asegura no sólo que no debería de celebrarse un funeral público a políticos de la trayectoria de Tede Kennedy, sino que se debería de impedir la celebración de cualquier tipo de funeral, incluso privado.