(Zenit/InfoCatólica) En una entrevista el príncipe heredero de Araba Saudita, Mohammed Bin Salman, se ha declarado a favor de otras formas religiosas, por lo menos en su país.
Arabia Saudita es una de las monarquías absolutas donde predomina radicalmente el islam.
La entrevista fue transmitida por la tv saudita Al-Arabiya. Mohammed dijo: «Todos los juristas y académicos musulmanes han estado hablando del concepto de moderación durante más de 1000 años. Creo que no puedo aclarar este concepto, pero puedo respetar la constitución saudí, conforme al Corán y la Sunna, teniendo como objetivo la implementación en el sentido más amplio del término de nuestro sistema de gobierno, de base, que incluye a todos».
«En los asuntos sociales y personales estamos obligados a implementar solo las estipulaciones claramente enunciadas en el Corán. Por lo tanto, no puedo aplicar un castigo de la sharia sin una estipulación coránica clara o explícita de la Sunna».
Esto implicaría reformar la legislación del país, el mandatario no ha hablado abiertamente del tema, pero es clara la necesidad de que sean eliminadas prácticas crueles como las lapidaciones, las flagelaciones, la amputación de manos para ladrones o la pena de muerte para apóstatas y homosexuales, que aún se llevan a cabo por los islamistas.
Posturas como las del príncipe les han costado la vida a otros intelectuales en el pasado.