(ACI Prensa/InfoCatólica) El 6 de junio se realizará en Perú la segunda votación para elegir al nuevo presidente. Esta será disputada por el profesor de primaria y líder sindical Pedro Castillo, del partido marxista y leninista Perú Libre; y por Keiko Fujimori, del partido de derecha Fuerza Popular, pues ambos alcanzaron los dos primeros lugares en las elecciones del 11 de abril con 19,099% y 13,368% de los votos respectivamente.
En Perú, para ganar las elecciones presidenciales en la primera vuelta se debe superar el 50% de los votos válidamente emitidos, es decir, sin contar los votos nulos o en blanco. Este año, en el país sudamericano participaron 18 candidatos, lo que hizo que la votación fuera bastante dispersa.
Además, en estas elecciones se registró un elevado ausentismo, con 7,1 millones de electores que no asistieron a las urnas de un total de 24 millones.
En la página 24 del «Ideario y programa» de Perú Libre, presentado ante el Jurado Nacional de Elecciones, aparece el subtítulo «Despenalización del aborto».
El texto señala:
«Está demostrado que un país subdesarrollado que no controle su natalidad o tiene natalidad mayor del 2% al 3 % anual, está condenado a no salir de la pobreza. Según las estadísticas mundiales, los países que han despenalizado el aborto lograron que el número de los mismos bajaran; permitió salvaguardar la vida materna al ser atendida institucionalmente; redujo prácticas ilícitas de personal médico, paramédico y no médico; disminuyó la mortalidad infantil; y evitó prácticas genocidas como la esterilización forzada en el Perú».
En el caso de Fuerza Popular, su plan de gobierno expresa en la página 81 la protección del «derecho a la vida desde su concepción».
El programa e ideario de Perú Libre ha sido elaborado por Vladimir Cerrón, expresidente regional del departamento de Junín y sentenciado a cuatro años de prisión suspendida por el delito de aprovechamiento indebido de cargo. Asimismo, ha defendido lo que llama «los procesos revolucionarios en Cuba, Nicaragua, Ecuador, Venezuela y Bolivia».
En el documento se indica que, además de ser marxista y leninista, este partido también se declara «mariateguista», en referencia a José Carlos Mariátegui, influyente pensador de izquierda del siglo XX y fundador del Partido Socialista Peruano en 1928.
Providas rechazan plan de Perú Libre
En declaraciones a ACI Prensa, el presidente la Red Nacional de Abogados por la Defensa de la Familia (RENAFAM), Alejandro Muñante, recordó que «los comunistas siempre relativizan la vida y lo hacen no solamente imponiendo una cultura de muerte a través de su régimen, sino también con leyes que obligan a las mujeres a acabar con la vida de sus hijos en el vientre en función de los intereses del gobierno de turno, lo cual se ha visto en la Rusia comunista, en China y en Cuba».
El abogado, que en las elecciones del 11 de abril resultó elegido congresista por el partido Renovación Popular, añadió que teniendo en cuenta la «experiencia internacional de los gobiernos socialistas», se tiene conocimiento de que estos «han sido los primeros en despenalizar y legalizar el aborto».
Asimismo, llamó a no creer las palabras de Castillo, quien en declaraciones a RPP aseguró que no legalizaría el aborto
«Perú Libre es un partido que pertenece a Vladimir Cerrón, quien realmente dirige los hilos», mientras que «Pedro Castillo vendría a ser su alfil o peón en este juego de poder», señaló Muñante. «Lo que van a ejecutar es su plan de gobierno, no lo que diga el señor Castillo en campaña», reiteró.
Alberto Gonzáles Cáceres, abogado y presidente del Centro de Estudios Jurídicos Santo Tomás Moro, también coincidió que «la despenalización del aborto es parte de la agenda de los gobiernos comunistas».
«Se impuso en Rusia oficialmente tres años después del inicio de la Revolución de 1917, el 18 de noviembre de 1920, el Comisariado del Pueblo para la Salud y la Justicia publicó un decreto sobre la terminación artificial del embarazo e impuso el aborto en Rusia. Pensar que va a ocurrir lo contrario es ser ingenuo por no decir otra cosa», indicó.
Asimismo, rechazó el argumento de Perú Libre de que un país que no controla su natalidad «está condenado a no salir de la pobreza». El abogado dijo «no hay ninguna relación causa efecto respecto al aborto y la reducción o aumento de pobreza».
«Lo que nos quieren decir los comunistas es que se puede acabar con la pobreza con la manera simplista que es acabar con los pobres en el vientre materno, y eso, es utilitarismo puro. Ni a Stalin se le hubiera ocurrido», exclamó.
Por su parte, Giuliana Caccia, directora de la Asociación Origen, negó que el aborto reduzca la pobreza de un país. Explicó a ACI Prensa que en Europa, donde la mayoría de naciones han aprobado esta práctica, «hay preocupación debido al control de la natalidad» y «el invierno demográfico».
«No saben cómo hacer; hay pocos jóvenes y muchos ancianos que deberían ser mantenidos con recursos estatales, pero hacen falta más aportes» de la población económicamente activa, dijo.
Según Muñante, sería un «gobierno nefasto» el que «pretenda controlar la pobreza a través del asesinato selectivo de niños en el vientre materno».
«La pobreza no se reduce de esta forma, sino aplicando políticas sociales que se enfoquen en generar empleo, inversión y enseñarles a los pobres a desarrollarse por sí mismos para que puedan reactivar su economía», aclaró.
El plan de gobierno de Perú Libre señala también que los países que han despenalizado el aborto lograron «salvaguardar la vida materna», sin embargo, Caccia recordó que «ninguna intervención quirúrgica, como el aborto, es 100% segura».
«Recientemente murió una joven argentina tras someterse a aborto legal y no es la única. Hay datos en otros países que demuestran que la muerte de mujeres por aborto se eleva tras la legalización de esta práctica. Toda intervención quirúrgica tiene un porcentaje de muerte y mientras más abortos haya, habrá más mujeres que mueran», aseguró.
El congresista electo Muñante afirmó que «el aborto siempre será un procedimiento riesgoso para cualquier mujer que se lo practica, sea legal o ilegal», ya que «siempre habrá un riesgo alto contra la vida de la mujer que lo practica».
Asimismo, criticó la afirmación de Perú Libre de que en los países donde se despenalizó el aborto también «disminuyó la mortalidad infantil». Esta aseveración es «completamente contradictoria», ya que la mortalidad infantil «también incluye la muerte en el vientre materno», expresó.
«La Convención de los Derechos del Niño claramente señala textualmente en su preámbulo que el niño, por su naturaleza, necesita protección especial y legal tanto antes como después de su nacimiento», indicó el abogado.
Cómo despenalizaría el aborto un eventual gobierno de Perú Libre
La Constitución Política, en su artículo 2, reconoce al concebido como «sujeto de derecho en todo cuanto le favorece». Sin embargo, una de las propuestas de campaña de Castillo es convocar a una Asamblea Constituyente para cambiar la Carta Magna de 1993.
El abogado Gonzalés cree que la única forma en la Castillo despenalizaría el aborto es a través del cambio de Constitución, «pues es sabido que no tienen mayoría» en el Congreso. La bancada de Perú Libre según la ONPE tiene virtualmente 37 congresistas electos de un total de 130.
Por su parte, Muñante piensa que Castillo también podría presentar, a través de su bancada en el Congreso, un proyecto de ley de despenalización o legalización del aborto. No obstante, también podría «sacarle la vuelta» al procedimiento con decretos de urgencia aprovechando la pandemia.
«Para plantear la despenalización del aborto en un cambio de Constitución, tendría que pasar necesariamente por el Congreso. Es decir, el cambio total de la Constitución con todo el articulado que este necesita, necesariamente tiene que ajustarse al artículo 206 de la Constitución que pasa necesariamente por una iniciativa legislativa por parte del presidente, y esta tiene que ser evaluada por el Congreso y contar con el consenso de la mayoría. Si no lo tiene, no podría cambiar la Constitución según las reglas que actualmente tenemos», explicó.
«El hecho que Castillo plantee despenalizar el aborto a través de una Asamblea Constituyente de una forma unilateral, es pura demagogia y estaría alentado a un golpe de Estado», agregó.
Muñante dijo a ACI Prensa que el programa como el propuesto por Castillo y Cerrón supondría «la instalación de un régimen autoritario que restringiría las libertades y derechos fundamentales, así como el retroceso de años de desarrollo».
«El comunismo jamás será una opción y siempre estará ligado con el totalitarismo, la miseria y la corrupción», subrayó.
Encuesta da como ganador a Castillo
El programa 'Cuarto Poder' difundió el pasado domingo la primera encuesta de Ipsos, con miras a la segunda vuelta de las Elecciones Generales 2021. Pedro Castillo tiene un 42% de intención de voto sobre el 31% que posee Keiko Fujimori.