(Agencias/InfoCatólica) El Parlamento vota la polémica ley este jueves 20 de febrero, después de que la Conferencia Episcopal del país vecino haya dicho que entra en colisión con el mandamiento «No matarás»
Después del rechazo, en 2018, de cuatro proyectos de ley para despenalizar la eutanasia en Portugal, la Iglesia en Portugal anuncia una nueva movilización contra la legalización de todas las prácticas de eutanasia. El Parlamento de Lisboa tendrá que examinar cuatro nuevos proyectos en este sentido presentados por el «Bloque de Isquerda», el Partido Socialista y el Partido Pueblo, Animales y Naturaleza (Pan) y el Partido Ecologista Verde (Pev). En la nueva legislatura, los diputados de estos partidos son mayoritarios, mientras que los conservadores, que hace dos años lograron detener la despenalización, ahora son minoría.
Un homicidio no deja de ser un homicidio con el consentimiento de la víctima
Cuando comenzó el debate sobre la eutanasia en el país, Los obispos portugueses recordaron en un documento publicado por el Consejo Permanente del CEP en 2016 la necesidad de promover y hacer que los cuidados paliativos sean accesibles para todos los pacientes graves y con enfermedades terminales. En él, también reafirmaron que el valor intrínseco de la vida humana «en todas sus fases y en cada situación» está profundamente arraigado no solo en la cultura cristiana, «sino también en la razón universal», tanto que la Constitución portuguesa declara categóricamente que está «es inviolable». Por lo tanto, según el texto resaltado, la inviolabilidad de la vida «no cesa con el consentimiento de su propietario» y «un homicidio no deja de ser un homicidio con el consentimiento de la víctima».
Oporto
En medio de una gran expectación mediática, la Catedral de Oporto vivió una misa especial este domingo 16 de febrero porque el canónigo Amadeu Ferreira pronunció una homilía con la eutanasia como tema central. Faltan solo tres días para que el Parlamento portugués vote cinco proyectos sobre su despenalización y esas palabras eran el símbolo de una lucha «a la desesperada» para frenar la posible aprobación de la polémica medida.
Los fieles que abarrotaban la Catedral de Oporto vieron y escucharon cómo Amadeu Ferreira decía alto y claro que la eutanasia va contra el mandamiento de ‘No matarás’, una apelación que reconfortó a las personas allí reunidas.
El asunto se pone difícil a medida que se acerca el 20-F, día señalado para la votación en el Parlamento, y únicamente un cúmulo de sorpresas de última hora puede derribar el previsible triunfo del ‘sí’. ¿Sorpresas? Podrían producirse como consecuencia de la libertad de voto que han decretado internamente tanto los socialistas como los conservadores del PSD, aunque más bien se esperan en la formación encabezada por Rui Río, quien ha dicho que se muestra partidario de la aprobación.
Pero la Iglesia en Portugal plantea una oposición a la eutanasia que no desfallece. Serán tres días, hasta que se adopte la decisión pertinente en la Asamblea de la República, protagonizados por vigilias y manifestaciones a lo largo del país en defensa de la vida.
Por eso quiere impulsar un referendo, porque sería uno de los escasos recursos que le restan a la Conferencia Episcopal portuguesa para dilatar una aprobación que, de otro modo, solo un hipotético veto del presidente Marcelo Rebelo de Sousa podría detener.
Hacen falta 60.000 firmas para que el Gobierno se vea obligado a convocar un referendo
En este sentido, sigue avanzando la recogida de firmas con el objetivo de alcanzar las 60.000, una cifra que obligaría a la Asamblea de la República a convocar la consulta popular.
La cuestión se dilucida, por tanto, este 20 de febrero y tal vez lo que ocurra pueda tener una cierta influencia en España, especialmente porque el PSOE de Pedro Sánchez suele estar muy pendiente de lo que acontece con sus colegas socialistas al otro lado de la frontera.