(AsiaNews) Cerca de 700 mujeres desfilaron por las calles de Jaffna, en el norte de Sri Lanka. La marcha contó con el apoyo del National Fisheries Solidarity Movement (NAFSO). Las mujeres protestan contra el clima de discriminación que rige hacia la mujer, todavía muy difundido en el país. Para poner fin, al menos a nivel institucional, a esta discriminación, ellas piden que se garantice una participación política del 50% en los escaños del parlamento, a diferencia del 25% «concedido» por el actual gobierno de Maithripala Sirisena.
En Sri Lanka, el 52% de la población es femenina, pero en la política, su representación apenas llega al 5,3%, es decir, 13 diputadas sobre un total de 225 escaños. En los consejos provinciales, su representación cae al 1,9%.
Las manifestantes, respaldadas por numerosos activistas y exponentes políticos, han solicitado que se reconozca a la población femenina iguales derechos. En particular, reclaman que sea finalmente aplicada la CEDAW (la Convención de la ONU para la eliminación de todas las formas de discriminación contra las mujeres). Ellas se quejan de los frecuentes episodios de violencia, acoso laboral y amenazas en el ámbito familiar y de las presiones ejercidas por líderes religiosos.
Según Lavina Hasanthi, coordinadora del NAFSO, si a las mujeres se les garantizara el acceso a puestos donde tomar decisiones, «podrían conducir el proceso de manera correcta. Además, habría menos crimen, corrupción, violaciones y sobornos».