(Efe) Dos iglesias en el norte de Nigeria y otra en Nairobi fueron objetivo de ataques terroristas, y aunque ningún grupo de ha responsabilizado de los atentados, se da por supuesto que en ambos casos los autores son grupos radicales islámicos.
El atentado que causó más muertes fue el de Kano -al menos 18- y tuvo lugar en el auditorio de la Universidad de Bayero, donde los estudiantes cristianos acostumbran a celebrar sus servicios religiosos.
Media docena de hombres armados irrumpieron en el edificio y arrojaron explosivos en el interior de la sala mientras que disparaban desde el exterior a las personas que trataban de salir del auditorio.
Más tarde se produjo otro ataque en una iglesia de la ciudad de Maiduguri, en el que murieron otras 5 personas, entre ellas el pastor.
Ningún grupo ha reclamado hasta el momento la autoría de estos dos atentados, aunque el suceso es similar a otros perpetrados por la secta islamista Boko Haram, que desde hace meses ha llevado a cabo ataques contra iglesias y comunidades cristianas, especialmente en el norte y el centro del país.
Por otra parte, en Kenia una granada hizo explosión en la Iglesia Internacional del Dios de Milagros, en el distrito de Ngara, en Nairobi, cuando se celebraba el servicio dominical, lo que provocó la muerte de una persona y dejó al menos quince heridos.
Las autoridades han apuntado a los radicales islámicos de Al Shabab como posibles autores, puesto que han llevado a cabo varios ataques en Kenia desde que el Ejército keniano entró hace casi medio año en territorio somalí en respuesta a los sucesivos secuestros que se habían cometido en las zonas fronterizas.