(InfoCatólica) Preguntado por la información ofrecida por el vaticanista Andrea Tornielli, el portavoz de la FSSPX ha respondido que “no todo está resuelto todavía”. El P. Lorans ha asegurado que esperan que hoy mismo, miércoles 18 de abril, la Santa Sede emita algún comunicado en relación a esta cuestión.
Hoy mismo, la Casa General de la Fraternidad San Pío X ha hecho público en su página web el siguiente comunicado
“La prensa indica que Mons. Bernard Fellay envió una “respuesta positiva” a la Congregación para la Doctrina de la Fe, y que, por consecuencia, la cuestión doctrinal ya queda resuelta entre la Santa Sede y la Fraternidad San Pío X.
La realidad es distinta.
En un correo del 17 de abril de 2012, el Superior General de la Fraternidad San Pío X contestó al pedido de aclaración que le había hecho el 16 de marzo el cardenal William Levada, en lo referente al Preámbulo doctrinal, entregado el 14 de septiembre de 2011. Como lo precisa el comunicado de prensa de la Pontificia Comisión Ecclesia Dei, fechado el día de hoy, el texto de la respuesta “será examinado por el Dicasterio (Congregación para la Doctrina de la Fe) y luego sometido al juicio del Santo Padre”.
Por lo tanto se trata de una etapa y no de una conclusión.
Menzingen, el 18 de abril de 2012”
El Preámbulo Doctrinal entregado el pasado 14 de septiembre, contiene, sustancialmente, la professio fidei (profesión de fe) que se requiere a aquellos que desempeñan responsabilidades eclesiales. La profesión de fe establece la “religiosa sumisión de la voluntad y el intelecto” a las enseñanzas del Papa y el Colegio de Obispos cuando “ejercen su auténtico magisterio” incluso cuando no es proclamado y definido de forma dogmática, como ocurre con la mayor parte de los documentos magisteriales.
Como entonces explicó la Santa Sede, “Dicho preámbulo establece algunos principios doctrinales y criterios de interpretación de la doctrina católica, necesarios para garantizar la fidelidad al Magisterio de la Iglesia y el sentire cum Ecclesia, dejando abierto, al mismo tiempo, a una discusión legítima, el estudio y la explicación teológica de expresiones o formulaciones particulares presentes en los documentos del Concilio Vaticano II y del Magisterio sucesivo”.