Relación entre Ciencia y Fe

La fe y la razón son las dos alas con las que el espíritu humano se dirige a la contemplación de la verdad.

Creo que el don más grande que el ser humano ha recibido es su inteligencia, es decir su capacidad para pensar y razonar. Pienso también que la creencia en Dios es una elección racional, y si soy creyente es precisamente porque me parece que es más racional que su contraria, y que los principios de la fe no se oponen a los principios científicos.

El objeto de la ciencia será aquello que el hombre puede conocer por medio de su razón, apoyándose en la experiencia y en los medios e instrumentos que posea. Gracias a la ciencia, vamos dominando la naturaleza. Con sus conocimientos y actividad, el hombre transforma las cosas y la sociedad, y también debiera perfeccionarse a sí mismo. Ahora bien, la actividad científica es autónoma, tiene sus propias leyes y valores, que el hombre debe descubrir, emplear y ordenar, lo que además responde a la voluntad del Creador En cuanto a la calidad del conocimiento en sí, el conocimiento científico supera a la fe. Yo estoy más seguro de mi existencia (hecho científico), que de la existencia de Dios (hecho de fe). Por eso a la fe se la representa con los ojos vendados y san Pablo nos dice que desaparecerá en el cielo, cuando conozcamos a Dios cara a cara (cf. 1 Cor 13,12). Pero el hombre ha sido creado a imagen y semejanza de Dios, y ha sido dotado de una libertad que nos permite aceptar o rechazar los planes divinos. Por ello sus conocimientos los puede utilizar tanto para el bien como para el mal.

No nos extrañe por ello que diversas formas de humanismo ateo, elaboradas filosóficamente, presenten la fe como nociva y alienante para el desarrollo de la plena racionalidad. Incluso en el ámbito de la investigación científica se ha ido imponiendo una mentalidad positivista que no sólo se ha alejado de cualquier referencia con la visión cristiana del mundo, sino que también ha olvidado toda relación con la visión metafísica y moral, llegando algunos, al carecer de toda referencia ética, a creerse dotados de un poder demiúrgico sobre el ser humano mismo (cf. San Juan Pablo II, Encíclica «Fides et ratio» nº 46).

Los creyentes pensamos, por el contrario, que la investigación científica y la convicción espiritual pueden ir y van, de hecho, tranquilamente de la mano. La fe y la razón son las dos alas con las que el espíritu humano se dirige a la contemplación de la verdad. Hay en todos los tiempos muchos científicos de primerísimo categoría creyentes. En 1961 y en 1997 se preguntó a biólogos, físicos y matemáticos si ellos creían en un Dios que se comunicara activamente con la humanidad y a quien uno pudiera rezar con la expectativa de recibir una respuesta. En ambos casos el porcentaje de los que respondieron afirmativamente rondó el cuarenta por ciento.

Para el genetista Francis Collins, premio Príncipe de Asturias y director del Proyecto Genoma Humano. «En mi opinión no existe ningún conflicto entre ser un científico riguroso y una persona que cree en un Dios personal que tiene un interés personal en cada uno de nosotros. El dominio de la ciencia es explorar la naturaleza. El dominio de Dios es el mundo espiritual». El verdadero motivo de la fe es la relación de la persona humana hacia la persona de Dios, en la cual cree, espera y confía. La fe no se demuestra, se siente y se vive, porque es la confianza total de una persona hacia otra.

Sobre la relación entre fe y ciencia, nos dice el Concilio Vaticano II: «La investigación metódica en todos los campos del saber, si está realizada de una forma auténticamente científica y conforme a las normas morales, nunca será en realidad contraria a la fe, porque las realidades profanas y las de la fe tienen su origen en un mismo Dios» (Gaudium et Spes nº 36). Y el Catecismo de la Iglesia Católica: «‘Fe y ciencia’. «A pesar que la fe esté por encima de la razón, jamás puede haber desacuerdo entre ellas. Puesto que el mismo Dios que revela los misterios y comunica la fe ha hecho descender en el espíritu humano la luz de la razón. Dios no podría negarse a sí mismo ni lo verdadero contradecir a lo verdadero» (nº 159). Pero es el Concilio Vaticano I, el que mejor nos ilumina: «Y no sólo no pueden jamás disentir entre sí la fe y la razón, sino que además se prestan mutua ayuda, como quiera que la recta razón demuestra los fundamentos de la fe, y por la luz de ésta ilustrada, cultiva la ciencia de las cosas divinas; y la fe, por su parte, libra y defiende a la razón de los errores y la provee de múltiples conocimientos» (D, 1799).

 

Pedro Trevijano, sacerdote

 

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15 comentarios

Rafael Agüero Cabrera
Estoy de acuerdo y me hizo recordar que el Concilio Vaticano II promovió muchos aspectos de la vida religiosa de las personas, tanto para bien como para mal, de tal manera que no estoy convencido de que para la mayoría de los catolicos, haya servido para incrementar su religiosidad, sino más bien para reducirla, con lo cual, la fe y la razón, no salieron muy bien libradas como hubiera sido lo deseable. Gran cantidad de católicos dejaron su religión y muchos no han regresado a ella. Entonces, me pregunto: Será ahora necesario otro Concilio para mejorar esa situación de la dispersión de los católicos? O es que ya no hay tiempo para ello debido al inminente fin de los tiempos?
10/02/15 12:04 AM
Alvaro
Completamente de acuerdo, siempre que entendamos Fe, Razón y Ciencia en sus significados propios.

El problema con la falsa confrontación entre Fe y Razón/Ciencia es que, en el debate público, se tiene por Fe a una caricatura ridícula que no se corresponde con la Fe, se tiene por Razón a una capacidad infinita que no se corresponde con la realidad y de la que se dice falsamente que está exenta la Fe, y se tiene por Ciencia a una Verdad absoluta creada por los hombres que en nada se parece a la pseudorreligión totalitaria tecnológica e inmoral que todo lo invade.

Y claro, al enfrentar la caricatura ridiculizada de la Fe con las caricaturas idealizadas de la Razón y la Ciencia, el "hombre moderno" hace el salvaje muchísimo más que sus sensatísimos antecesores.

Pero la Fe y la Ciencia, razonadas ambas y razonablemente entendidas ambas, claro que son compatibles. Más aún: son complementarias y no pueden ser la una sin la otra, ya que ello cercenaría media Verdad.

Un saludo.
10/02/15 12:51 PM
K
Fe y Ciencia son compatibles... si se limitan a su campo de actuación.

Si alguna de ellas lo sobrepasa y se mete en terrenos del otro, entonces no son compatibles.
10/02/15 10:21 PM
Alvaro
K
Efectivamente, tanto la Fe como la Ciencia tienen sus propios ámbitos de acción, y resulta desastroso cuando los exceden.

Pero esos ámbitos no pueden considerarse como excluyentes entre sí, como quien hace una división de superficies en el plano. En realidad se solapan, ya que actúan sobre las mismas realidades solo que en planos distintos (una en el físico y la otra en el espiritual).

De ahí el error de pensar en que el mantenerse en el propio ámbito significa "no meterse en terrenos del otro", ya que de esa errada idea puede deducirse el relativismo de que ambos ámbitos son completamente independientes y que gozan de carta blanca para lo que les apetezca dentro de sus propios límites, lo cual es falso.

No hay una Ciencia sin Fe, porque incluso el mero "ser" de los objetos físicos estudiados remite a Dios, y no hay Fe sin Ciencia porque hemos sido dotados de inteligencia y formamos parte de la Creación, que es física y racionalizable.

Así pues, creo que la mejor forma de coordinarlos es respetar la autonomía de cada una en su terreno, pero haciendo que ambas se supervisen y fiscalicen mutuamente, de modo que ni la Ciencia ni la Fe puedan disparatar negándose mutuamente.

PD: Evidentemente, empleo el término "Fe" más en el sentido de "Teología" que en el de "creencia", más en el de "conjunto estructurado de conocimientos y doctrinas" que en el de "experiencia religiosa particular".

Un saludo.
11/02/15 11:46 AM
Horacio Castro
El mayor don que otorga Dios al hombre es la gracia para alcanzar la salvación eterna. La gracia mueve a la voluntad (el libre albedrío con que Dios nos crea) que precisamente permite controlar la deliberación de la inteligencia.
11/02/15 5:03 PM
k
Alvaro
Una cosa es que sean completamente independientes, que yo creo que sí lo son, y otra que cada cual puede hacer lo que le dé la gana. No, no lo pueden hacer. La ciencia tiene unas reglas que tiene que seguir, y la teología tiene las suyas.

Pero ninguna tiene que fiscalizar a la otra, porque sus normas son "internas".
11/02/15 10:41 PM
Alvaro
k
La Verdad no puede contradecir a la Verdad.

La Realidad es una, y necesariamente ha de ser coherente consigo misma y en todos sus planos. Eso significa que si Ciencia y Fe estudian una misma realidad, ambas deben ser coherentes entre sí.

Si discrepan, necesariamente debe pasar que al menos una de ellas mienta o esté equivocada, lo que representa un valiosísimo testigo que, a modo de "prueba del algodón", delata errores en ambas disciplinas.

Por eso hablo de que se fiscalicen mutuamente: de no hacerlo así, están abocadas a fracasar, como quien se empeñe en fabricar monedas con un solo lado.

Naturalmente, por "fiscalizar" no me refiero a "controlar". Por eso decía que deben gozar de autonomía, pero no a toda costa y no dictándose a sí mismas las propias normas, de modo que cada una sea legisladora, juez y parte en sus procesos.

Un saludo.
12/02/15 10:22 AM
k
Es que la ciencia se dicta sus normas y la teología las suyas.
la ciencia y la fe solamente se contradicen si salen de su ámbito, si cada una se queda donde le corresponde, no hay contradicciones.
12/02/15 11:46 PM
Alvaro
k
Le recuerdo que los ámbitos de ambas se solapan debido a que se refieren a las mismas realidades, luego ambas no PUEDEN ser independientes entre sí.

De hecho, es imposible la construcción de un corpus completo de conocimeinto sin afianzarlo en algo externo, lo que significa que si la ciencia se convierte en algo tan endogámico que niega la legitimidad de la teología para destapar sus vergüenzas cuando las halle, esa "ciencia" es falsa. Y lo mismo reza para la teología, si se convierte en endogámica disociándose de la Realidad que estudia la Ciencia.

Así pues, dado que la Ciencia y la Teología no disciplinas complementarias que solapan naturalmente sus ámbitos, si se contradicen hay que ver cuál está equivocada. Amputar la parte que se solapa no es solución sino barbarie.

Un saludo.
13/02/15 11:01 AM
k
No, no se solapan. Solamente se solapan si alguna se sale fuera de su ámbito, y es entonces cuando hay contradicciones. Pero esa excursión fuera de sus ámbitos es lo que hay que evitar, porque ahí está el error. Cada cual debe ocuparse de lo suyo, con sus normas internas.
13/02/15 11:18 PM
pedro
Desde un foro ( disoazar) creado con el fin de estudiar este tema, entre otros afines, nos honramos con promover la lectura de los artículos que D.Pedro Trevijano coloca en esta página y que sirven tan adecuadamente para iluminar todos esos rincones que a menudo se quedan en la penumbra para muchos creyentes. Gracias, D. Pedro.
15/02/15 8:21 PM
Alvaro
k

Sí, sí se solapan, incluso manteniéndose cada una dentro de su propio ámbito, porque ambas estudian una misma Verdad y están obligadas a estar de acuerdo en lo común.

Afirmar que no se solapan equivale a afirmar que hay dos Verdades Universales independientes entre sí, cosa evidentemente falsa.

Naturalmente, muchos han afirmado semejante falsedad para dotarse de carta blanca con la que no responder ante nadie de los propios dislates y abusos, pero evidentemente no estaban motivados por la honradez sino por el afán de impunidad.

Un saludo.
16/02/15 12:54 PM
María de las Nieves
Un interesante artículo el debate entre ciencia y fe y se afirma que la fe está por encima de la razón. Como la fe está en el hombre y la razón está también en el hombre si ambas estudian al hombre están estudiando la misma realidad ,el hombre, y que sepamos el hombre es solo uno, único e irrepetible y no hablo del hombre enfermo ,sino de cualquier hombre. Si aceptamos que el ámbito de estudio es el hombre y este hombre está vivo, no es el cádaver que éste si que lo estudia la ciencia fácilmente.
Alvaro y K ¿y si llevan el debate de ciencia y fe al hombre?
17/02/15 7:08 PM
Alvaro
María de las Nieves
Llevando el debate de Ciencia y Fe al hombre lo que haríamos sería en cierto modo reducirlo, ya que el hombre es sólo parte de la Realidad (ciertamente parte fundamental, pero parte al fin y al cabo).

Lo que sí aprovecho es para señalar que vd ha empleado de un lado la palabra "Fe" y del otro las palabras "Ciencia" y "Razón" como sinónimas o intercambiables, como si la Fe no fuera razonable.

Lo cierto es que Ciencia y Razón no son sinónimas: la Ciencia estudia la faceta física de la realidad (también del hombre) mientras que la Fe (o la Teología, si lo prefiere) estudia la faceta metafísica (espiritual o trascendente) de esa misma realidad (también del hombre). La Razón es la facultad humana que se aplica en ambas para la comprensión inteligente de estos dos ámbitos.

Si quiere un símil (con todas sus limitaciones) aplicado al hombre, la Ciencia estudiaría su "hardware" (su diseño, sus piezas, encaje, forma en que se comunican las partes mediante señales eléctricas y químicas, etc) mientras que la Fe estudiaría su "software" (el alma que lo anima, su pensamiento racional y moral, su ser como persona, el sentido de todo lo que existe, su relación con quien lo creó).

Ciertamente, el estudio del hardware y el software lo realizan disciplinas distintas, pero es ridículo pretender que son completamente independientes entre sí y solo se deben a sí mismas, o que si se contradicen sólo se debe a que se hayan extralimitado.

Un saludo.
18/02/15 12:04 PM
María de las Nieves
Alvaro.La ciencia y la fe son plenamente compatibles,sigue siendo frecuente en algunos debates y sobre todo si la persona es atea presentar la ciencia como la que da razón del hombre y que no sería necesaria la fe.
Si tenemos en cuenta la evangelización de los pueblos debemos comprender de qué modo la fe nos habla del mundo. Es una dimensión distinta, pero no opuesta a lo que conocemos de la realidad a través de la ciencia.
El hombre en su origen ,biológico, crecimiento ,desarrollo, y lo específico del ser humano frente a los seres vivos, como su capacidad de poseer un conocimiento que se ofrece de forma teórica, su capacidad de amar,su libertad y su dimensión trascendente.Se requiere el conocimiento científico actual y los métodos educativos.
La fe es razonable pero no se presenta como si fuera otra ciencia, sino lo que para la persona creyente da sentido a su existencia y a su relación con el mundo que ahí también está la ciencia.
Es cierto que estudiar al hombre se reduce la ciencia,pero somos los humanos los interesados en conocer la relación ciencia y fe y dentro de la ciencia,las disciplinas que estudian al hombre son la genética, bioquímica ,biofísica ,embriología, fisiología ,medicina ,filosofía y neuropsicología y la teología que con la encarnación del Verbo nos situa al hombre,si estas disciplinas estudian al hombre aun nos queda como correlacionarlas, ya que el hombres es único ej que elementos son necesarios para el pensamiento.
Un saludo
19/02/15 1:23 AM

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