(Agencias/InfoCatólica) Largas filas se apreciaban en distintos sectores de la capital costarricense, muchos provenientes de lugares cercanos y otros de partes lejanas. Los "romeros" caminan solos o en grupos. Algunos recorren distancias superiores a los 200 km, en las que tardan hasta una semana para arribar a la "ciudad de las brumas", como se conoce a Cartago, 22 km al este de San José y la primera capital de Costa Rica. Desde los rincones más alejados del país ha llegado a la Basílica gente descalza, en silla de ruedas, en bicicleta y hasta a caballo, para demostrar su fe en "La Negrita", como llaman los 'ticos' a la Virgen de los Angeles.
Muchos cumplen una promesa por un favor concedido por "La Negrita”y algunos caminan descalzos por penitencia. De San José a la basílica de Cartago, cientos de oficiales de la Policía y de la Cruz Roja fueron llamados a velar por el buen desarrollo de la romería, para evitar desórdenes y prestar atención médica.
La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, realizarà también la tradicional romería con el fin de pedir a la Virgen de Los Ángeles, patrona del país, un cese de la violencia y por la salud de su esposo, José María Rico, quien hace algunas semanas sufrió una fractura de cadera y se encuentra en recuperación tras una cirugía. La mandataria indicó en un comunicado que haría a pie dos etapas: la primera acompañando a la familia de Nancy Chaverri, una maestra que fue asesinada el mes pasado por uno de sus estudiantes de secundaria. La segunda, en la que llegará al templo en horas de la tarde, después de recibir al canciller de China. El 8 de febrero pasado, un día después de su triunfo electoral, Chinchilla visitó a "La Negrita" en la Basílica.
Según la tradición religiosa, el 2 de agosto de 1635, la Virgen -una imagen de una madre morena con un niño en brazos esculpida en jade- se apareció a la niña indígena Juana Pereira en una roca.
La niña llevó la imagen de 18 centímetros de altura a su casa por lo menos en cinco ocasiones, pero ésta volvía a aparecer sobre la misma piedra. Los sacerdotes de la época consideraron el hecho como una señal divina y decidieron construir en el sitio una iglesia, que en la actualidad es la Basílica de Los Ángeles.
En la iglesia se pueden apreciar cientos de ofrendas que los fieles llevan a la Virgen de Los Ángeles en agradecimiento por su ayuda, como figuras de metal en forma de distintas partes del cuerpo, obsequiadas por personas que sanaron de enfermedades.
Para esta celebración también se suele vestir la imagen de la Virgen con una prenda seleccionada durante una especie de concurso en el que participan cientos de mujeres, quienes confeccionan un vestido para la imagen. Para este año, la Iglesia Católica escogió un vestido adornado con los símbolos patrios del país