(Agencias/InfoCatólica) La negativa de los responsables del Empire State, el edificio más alto de Nueva York, a homenajear con su iluminación nocturna a la conocida religiosa, ha desatado una encendida polémica en la Gran Manzana.
En las últimas semanas, personalidades políticas y sociales de la ciudad habían reclamado a los dueños del Empire State que aceptasen la propuesta de la Liga Católica para los Derechos Religiosos y Civiles de iluminar el edificio el 26 de agosto, centenario del nacimiento de la beata Madre Teresa de Calcuta con los colores característicos de la orden de las Misioneras de la Caridad.
El concejal Peter Vallone, quien aseguró este fin de semana que “ésta no es una petición religiosa, sino del Concejo municipal” y, por tanto, “no hay razón para que el Empire State no pueda llevarla a cabo”. La presidenta del Concejo, Christine Quinn, pidió la semana pasada a los neoyorquinos que el 26 de agosto pusieran sus móviles iluminados en las ventanas para homenajear de manera individual la figura de la Madre Teresa.
Anthony Malkin, miembro de la familia dueña del Empire State, se defendió de las quejas afirmando que, como propietarios privados, tienen la política de no iluminar el edificio en honor a figuras o motivos religiosos, y secundó la propuesta de Quinn, a lo que ésta respondió acusando a Malkin de “hipócrita”. De hecho, El emblemático rascacielos había encendido su iluminación nocturna en honor, entre otros personajes, del Papa Juan Pablo II y del cardenal de la arquidiócesis de Nueva York, John Joseph O'Connor.
Si no se ilumina el Empire State, se iluminará el Bronx
El último capítulo de esta polémica lo ha protagonizado el lunes el edificio Hutchinson Metro Center, en el neoyorquino barrio del Bronx, que ha decidido iluminarse con los colores blanco y azul de la orden fundada por la Beata Madre Teresa de Calcuta. Según recogió el lunes el New York Post, para James Vacca, concejal de Nueva York, esta decisión, acordada con las autoridades locales es una advertencia para que el Empire State “salga de su torre de marfil” y los responsables de esa “decisión sin razón” se sientan “avergonzados”.
La Madre Teresa cuenta desde hace un año con una calle en el barrio del Bronx, donde la comunidad albanesa ha crecido con rapidez en los últimos años. En ese barrio la religiosa católica inauguró en 1977 el primer convento en Estados Unidos de la congregación de las Misioneras de la Caridad.
