(Zenit/InfoCatólica) En su mensaje, el Santo Padre escribe: "Expreso vivamente mi afecto y cercanía espiritual a todos los argentinos, a los cuales encomiendo en mis oraciones, pidiendo al Señor que los bendiga abundantemente con la concordia, la paz y la prosperidad".
En la celebración, en la que también participaron mandatarios extranjeros y otras autoridades, el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani, aseguró que el Bicentenario es "una oportunidad de crecimiento", al plantear las celebraciones por la fecha patria desde las dimensiones de la memoria, la identidad, la reconciliación y los desafíos.
"Aprendamos de nuestras crisis, hagamos de nuestros desencuentros una oportunidad de crecimiento. De nada sirve llorar sobre las cenizas. Nunca ha ayudado la falta de esperanza. Solo se puede crecer en la comunión y el amor recíproco", aseveró en la basílica de Nuestra Señora de Luján, patrona de la Argentina, lugar que eligió la jefa de Estado para celebrar el Te Deum del 25 de Mayo.