(InfoCatólica) La Diócesis de Bérgamo ha emitido una invitación formal a la comunidad católica para que participe en el Ramadán, sumándose a las oraciones y las comidas de Iftar junto a la comunidad musulmana, en un «esfuerzo por promover el diálogo interreligioso» y la comprensión mutua.
El comunicado de la diócesis, divulgado el lunes, insta a los sacerdotes a explorar oportunidades para el diálogo interreligioso durante lo que llaman el «mes sagrado» del Ramadán, haciendo hincapié en la importancia de unirse a las prácticas de oración y las comidas de Iftar con los musulmanes.
El P. Massimo Rizzi, al frente de la Oficina para el Diálogo Interreligioso de la diócesis y firmante de la directiva, ha generado reacciones entre los católicos locales por datar la carta según el calendario islámico (23 de Sha'ban de 1445), evidenciando un fuerte compromiso con el acercamiento interreligioso.
Resaltando la encíclica Fratelli tutti del Papa Francisco y su documento conjunto con el Gran Imán de Al Azhar Ahmed Al-Tayyeb, Rizzi aboga por la mediación sacerdotal como pilar del diálogo interreligioso, crucial para la paz mundial y considerado un deber para cristianos y otras comunidades religiosas, según cita de la exhortación apostólica Evangelii Gaudium de Francisco.
Robert Spencer, un destacado erudito islámico, ha criticado la percepción de que participar en el Ramadán pueda servir como una oportunidad para el acercamiento con los musulmanes, describiéndo las limitaciones y fracasos del diálogo interreligioso, y señalando el enfoque del Ramadán en la yihad como principal servicio a Alá.
A pesar de la conexión de la petición de diálogo de la diócesis con la esperanza de contribuir a la resolución de conflictos en el Medio Oriente, Spencer subraya que el Vaticano no ha confrontado aspectos controvertidos, como la postura de Hamás hacia Israel, citando directamente de los estatutos de Hamás el objetivo que proclama la destrucción de Israel hasta que el Islam prevalezca.
Han surgido criticas adicionales respecto a la invitación a orar durante el Ramadán, como la del comentarista italiano Aldo Maria Valli y la novelista Elisabetta Sala que expresan preocupación por la dirección de estos esfuerzos de diálogo interreligioso y los incidentes previos de profanación en la diócesis, y apuntan a una desviación de los principios cristianos fundamentales.
Este llamado a la participación católica en el Ramadán llega en un momento en que la presencia musulmana en Bérgamo está creciendo, evidenciada por la conversión del hotel Aquiletta en un centro cultural musulmán, y sigue a iniciativas anteriores del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso que fomentan la participación cristiana en el iftar como un medio de aprendizaje espiritual y fuente de inspiración.
La situación refleja un panorama más amplio de tensión y diálogo entre comunidades religiosas en Italia, marcada históricamente por decisiones judiciales significativas como la retirada de crucifijos en escuelas públicas, lo que subraya la compleja interacción entre tradiciones religiosas en un contexto de pluralismo creciente.