(LifeSiteNews/InfoCatólica) Un sacerdote español está siendo acusado de un «delito de odio» que conlleva una pena de prisión de hasta tres años por un ensayo publicado en el que critica al islam.
Según CNA, en febrero, el padre Custodio Ballester fue citado por un tribunal regional de España para responder a los cargos de un supuesto «delito de odio» por sus críticas al islam. Se enfrenta a hasta tres años de prisión y una multa de más de 1.600 dólares si es declarado culpable.
Los cargos fueron presentados inicialmente en 2020 cuando el fiscal del Estado en Cataluña afirmó que el artículo de Ballester de 2016 titulado «El diálogo imposible con el islam» cumple los criterios de un «delito de odio».
Ballester, que ejerce como párroco en Barcelona, escribió su ensayo en respuesta a una carta pastoral de su superior, el arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella, titulada «El diálogo necesario con el islam».
En su refutación a Omella, Ballester escribió: «Esta nueva reactivación del diálogo cristiano-musulmán, paralizado por las supuestas 'imprudencias' del difunto Papa Benedicto XVI, está muy lejos de hacerse realidad. El islam no permite el diálogo. Para el islam, o crees, o eres un infiel que debe ser sometido de un modo u otro».
Ballester citó la sura 9:29 del Corán al comienzo de su artículo: «Combatid a los que no creen en Dios, ni en el Último Día, ni prohíben lo que Dios y Su Mensajero han prohibido, ni se atienen a la religión de la verdad -de entre los que recibieron la Escritura- hasta que paguen el impuesto debido, voluntaria o involuntariamente».
«En los países donde los musulmanes tienen el poder, los cristianos son brutalmente perseguidos y asesinados», afirma el sacerdote español en su ensayo. «¿De qué diálogo hablamos entonces?».
«Los cristianos en territorio musulmán son tolerados y 'protegidos', son dhimmi, es decir, si abonan el poder islámico pagando la Jizya, un impuesto especial que sólo pagan los cristianos, para poder practicar su fe sin ser perseguidos y condenados», escribió Ballester.
Señaló que el profeta del islam, Mahoma, «pasó toda su vida... sometiendo a sangre y fuego a quienes se le oponían».
Según la sharia islámica, los cristianos y los judíos que se niegan a convertirse al islam no son reconocidos como ciudadanos de pleno derecho, sino considerados semiesclavos llamados «dhimmi» que tienen que pagar un impuesto especial llamado «jizyah».
«Conozco musulmanes que no se ofendieron y entendieron perfectamente que no me refería a ellos sino a quienes viven el islam de manera violenta, radical», dijo Ballester a CNA.
Cuando se le preguntó si estaba dispuesto a pasar tres años en la cárcel en caso de ser condenado, el sacerdote español dijo: «No me parece bien que me condenen por algo que he dicho, pero en España todo es posible. Pero si me condenan, esto ya no será España, sino Pakistán, donde te pueden matar por blasfemar contra el Corán o Mahoma».
«En España ya no existe un verdadero derecho a la libertad de expresión», añadió Ballester.