(ASia News/InfoCatólica) El 11 de marzo, la fuerza aérea atacó la aldea de Nan Nein: así los soldados pudieron hacer su entrada, matando a civiles que se habían refugiado en el interior del monasterio local. Un vídeo difundido por el KNDF muestra al menos 21 cadáveres en el suelo y las paredes del lugar de culto acribilladas a balazos. Según un portavoz de la milicia, parece que los militares «los alinearon frente al monasterio y dispararon brutalmente contra todos, incluidos los monjes». Más tarde se encontraron otros siete cadáveres en las inmediaciones del pueblo, según declaró el grupo a la BBC.
En los últimos meses se ha producido un recrudecimiento del conflicto civil después del golpe. Se ve favorecido por la estación seca, como el año pasado, mientras que la estación de los monzones, que va de mayo a octubre, suele causar mayores inconvenientes tanto a las fuerzas aéreas como a las tropas terrestres.
Según otra organización local, sólo en los dos primeros meses de 2023 el estado de Chin Occidental fue bombardeado por la junta militar al menos una vez al día.
El pueblo de Nan Nein está situado a lo largo de una carretera que conecta el estado de Shan con el de Kayah y se considera indispensable para llevar suministros a las milicias. En la región coexisten las etnias shan, karenni y pa-o, pero a diferencia de las otras dos, esta última es aliada del ejército birmano y ha recibido un fuerte apoyo militar en las últimas semanas puesto que la Junta intenta reconquistar las aldeas ocupadas por las milicias antigolpistas.
Los aldeanos de Nan Nein probablemente pensaban que encontrarían un refugio seguro dentro del monasterio, ya que los monjes son figuras respetadas en la zona. Sin embargo, el golpe ha cambiado el equilibrio entre los grupos étnicos de Birmania: el país está compuesto en su mayoría por la etnia bamar, principalmente de confesión budista, que se concentra en las zonas centrales de la nación, y que, por esta razón, se libró de los enfrentamientos armados en el pasado.
Desde la independencia del imperio colonial británico en 1948, las milicias étnicas que viven principalmente cerca de las fronteras han estado luchando contra el gobierno central y exigiendo una mayor autonomía.
Después del 1 de febrero de 2021, las milicias étnicas no sólo unieron sus fuerzas entre sí, sino que se aliaron con las Fuerzas de Defensa del Pueblo (PDF), grupos armados leales al Gobierno de Unidad Nacional en el exilio. Están compuestos por jóvenes que pertenecen a la mayoría bamar y proceden de las zonas centrales de Birmania, un hecho que, según los expertos en opinión del país, nunca había ocurrido antes.
Las cifras de la ONU afirman que, como consecuencia del conflicto civil, 40.000 viviendas quedaron destruidas, los desplazados rondan el millón y medio y al menos 8 millones de niños no asisten a la escuela, mientras que 15 millones de personas corren el riesgo de morir de hambre.