(CNAd/InfoCatólica) En el debate, varios obispos criticaron claramente tanto el texto actual como las posibles enmiendas al mismo. Las opiniones divergían especialmente en cuanto al concepto de autocompromiso de los obispos con las decisiones del Consejo sinodal diocesano.
En primer lugar, Thomas Söding, erudito del Nuevo Testamento en Bochum y vicepresidente del Comité Central de los Católicos Alemanes (ZdK), subrayó: «Cualquier frase que diga que un obispo puede decir "Al final, decido yo solo", no puede ser. Quiero dejarlo muy claro: para todos los que estamos asociados a la ZdK, una sentencia así sería una imposición en un orden marco que se supone que está al servicio del entendimiento. Nosotros también tenemos una línea roja. Por aquí pasa».
El obispo auxiliar de Colonia, Dominikus Schwaderlapp, dijo simplemente: «Me siento obligado por la instrucción del Papa y, por tanto, no puedo estar de acuerdo con el borrador».
Se refería a la carta de los cardenales curiales Parolin, Ouellet y Ladaria, confirmada por el Papa, según la cual «ni el Camino Sinodal, ni ningún organismo nombrado por él, ni ninguna conferencia episcopal tienen competencia para establecer el 'Consejo Sinodal' a nivel nacional, diocesano o parroquial».
En la última plenaria de los obispos alemanes, celebrada la semana pasada en Dresde, también se debatió el texto que fue visto ayer por el sínodo. Para conseguir la aprobación de dos tercios de los obispos, se negoció una enmienda, que fue presentada el viernes por el obispo de Speyer, Karl-Heinz Wiesemann. Por ejemplo, el término «Consejo sinodal» debía sustituirse por «Órgano sinodal».
Sin embargo, el obispo auxiliar de Berlín, Matthias Heinrich, subrayó: «La enmienda firmada por monseñor Wiesemann no coincide, en mi opinión, con lo que hemos decidido por mayoría en la Conferencia Episcopal».
El obispo explicó: «Veo muy claro el problema de que se han omitido los puntos que considerábamos esenciales, a saber, la pregunta: ¿qué competencia tiene en última instancia el obispo en materia de toma de decisiones? Cuando veo el documento, el borrador del texto del Foro I y la enmienda aquí, realmente tengo que llegar a la conclusión de que veo peligrar la competencia decisoria del obispo, su poder de dirección, y por lo tanto no estaré de acuerdo».
Los obispos Stefan Oster SDB, Bertram Meier, Heiner Koch y Ansgar Puff también se mostraron críticos con el texto. El obispo auxiliar Stefan Zekorn dejó claro que los obispos no intentaban chantajear a la asamblea sinodal con una posible minoría de bloqueo, como había indicado anteriormente la presidenta de la ZdK, Irme Stetter-Karp. «Las enmiendas que aportamos desde el seno de la Conferencia Episcopal son textos de compromiso para muchos obispos que van al límite de lo que se puede votar positivamente», subrayó Zekorn.
Finalmente, el obispo Franz-Josef Overbeck, que junto con Claudia Lücking-Michel es uno de los dos presidentes del Foro Sinodal responsable del texto, presentó una moción para aplazar la decisión sobre el texto de acción y transferirla al Comité Sinodal. Y así se hizo.
