(ACI/InfoCatólica) "En esta historia se instrumentaliza a la mujer por intereses ideológicos y económicos, ya que las clínicas abortistas constituyen un lucrativo negocio en el que no existe el consentimiento informado sino más bien un asentimiento desinformado", afirmó.
Urcelay advirtió además que "si el aborto es establecido como derecho, un profesional sanitario no podrá negarse a participar en él porque podría ser penalizado", por lo que animó a los ciudadanos a manifestarse el próximo 17 de octubre en Madrid a favor del derecho a la vida, la maternidad y contra el aborto.
"Esperemos que esta movilización sea un punto de inflexión en la generación de una nueva cultura de la vida que frene esta reforma y acabe con la lacra del aborto que, con la actual legislación, ha impedido nacer a más de un millón de niños", concluyó.
La nueva Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo (aborto) incorpora un importante capítulo de "educación sexual" para las escuelas e institutos; e implica a educadores, trabajadores sociales, enfermeros, auxiliares de clínica, administrativos, psicólogos y médicos.