(EP/HO/InfoCatólica) Miles de personas, más de 100.000 según los organizadores y unos 6.000 según fuentes policiales, han marchado este domingo desde la Plaza de Cibeles hasta la Puerta del Sol en contra del aborto, a favor de la vida desde la concepción y por el apoyo a la maternidad.
La portavoz de Derecho a Vivir, Lorena Díaz, ha pedido al Gobierno que incluya una dotación presupuestaria para ayudar a las mujeres embarazadas. «No podemos permitir que más de 300 niños mueran al día, necesitamos 280.000 niños de reemplazo generacional que son abortados», ha precisado.
Entre gritos de ‘Que se vayan y dejen a los niños vivir’, el presidente del Foro de la Familia, Benigno Blanco, ha explicado que piden que se vayan «a todos aquellos que quieren atentar contra la vida de los niños» y ha reclamado al Gobierno que apruebe ya la nueva ley, un texto que los convocantes de esta marcha quieren que vaya acompañado de políticas activas de apoyo a la maternidad.
Padres con sus hijos, grupos de jóvenes y mayores con gorras, pañoletas y globos de color verde han marchado desde el mediodía proclamando gritos de ‘Sí a la vida, aborto no’, ‘Vivan las madres, vivan los padres’ y ‘Las embarazadas están abandonadas’.
Ente ellos se encontraban Laura y Almudena, dos madres que han acudido a la manifestación con sus cinco y tres hijos, respectivamente. Uno de los pequeños, Pablo ha indicado que ha participado en la marcha para «defender la vida». «Si nosotros hemos nacido, otros niños tienen que nacer», ha afirmado.
También marchaban por la vida algunas religiosas como Sor Maria del Carmen y Sor Alba Rosa, de la congregación de las Franciscanas Misioneras de María que han acudido a la marcha para «defender que nazcan niños» y han pedido que el aborto «no figure» en la nueva ley porque «va contra Dios y contra las personas».
Por su parte, los quinceañeros Javier y Federico, caminaban junto a sus amigos del Colegio Los Olmos y aseguraban que «no hay algo más importante que la vida» y aunque consideran que el anteproyecto de ley aprobado por el Gobierno es un paso, creen que es «insuficiente» y que «ni ellos ni las madres tienen derecho a tocar la vida de nadie».
La portavoz de Derecho a Vivir, Gádor Joya, ha expresado que este año «hay más motivos que nunca para celebrar el Día Internacional de la Vida, ya que, «por primera vez, una ley del aborto está a punto de ser derogada en España y se abre la posibilidad de una mejora de la protección legal del primero de los derechos, el derecho a vivir».
La doctora en Medicina ha indicado que la afluencia masiva de los ciudadanos a esta conmemoración en Madrid y en decenas de ciudades de toda España y del extranjero significa que «el Gobierno tiene el apoyo para legislar a favor de la vida, pero también que debe evitar la tentación de abandonar el anteproyecto en función de la coyuntura política».
Para Joya, el Ejecutivo «debe tener la sensibilidad social para sumarse a esta celebración con una actitud más proactiva en defensa del primer derecho humano, que es el derecho a la vida». En este sentido, reclama, «además de una ley que derogue la actual y avance en la defensa de la dignidad y la vida humana, es necesaria una política integral y transversal de protección de la maternidad como un bien social fundamental para combatir el invierno demográfico que padecemos, así como la articulación de un sistema de adopción nacional ágil y eficaz que ofrezca una oportunidad a los niños que nacen en dificultad».
Por su parte, el presidente de HazteOir.org, otra de las entidades organizadoras de las 500 sumadas a la celebración del día de la vida en Madrid, ha subrayado la importancia de que «este día se abra cada día más a la participación de personas de todas las creencias, ideologías y ámbitos sociales, pues se trata de una convocatoria anual, que no está en función del calendario político legislativo. Los defensores de la vida estamos en diferentes espectros ideológicos y religiosos, incluidos ateos, porque la defensa de la vida humana tiene que ver con el derecho primero que tenemos todos los seres humanos, con la dignidad humana y eso es reconocible por aquellos que se liberan de algunos prejuicios».
Por otra parte, Arsuaga ha subrayado que «no se trata de contraponer la vida del niño por nacer y la de la madre, sino de defender que lo más digno para la mujer que se encuentra con un embarazo inesperado es contar con el apoyo de la sociedad, de la Administración, de la familia, para que pueda continuar con ese embarazo. Se trata de que al drama que puede ser un embarazo en condiciones adversas no se sume el drama del aborto, porque en cada aborto hay dos víctimas: la mujer y el niño».
«La manifestación de hoy, mucho más numerosa que las de los abortistas, demuestra que la mayoría de la sociedad quiere que el Gobierno derogue la ley Aído» subraya Arsuaga, que señala que «esta manifestación no es más que una de las muchas acciones que desde HazteOir.org, Derecho a Vivir y todos los grupos provida vamos a promover en los próximos meses».
