Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe

Cardenal Müller: «las personas cuya vida contradice la indisolubilidad del matrimonio sacramental no pueden recibir la Eucaristía»

El cardenal Gerhard Müller, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, ha concedido una entrevista al National Catholic Register, en la que responde a una pregunta sobre la posiblidad de que los divorciados vueltos a casar reciban la comunión. El prelado indica que la enseñanza de Cristo y su Iglesia es clara: «las personas cuyo estado de vida contradice la indisolubilidad del matrimonio sacramental no pueden recibir la Eucaristía». Al mismo tiempo advierte que aunque «la idea de que la doctrina puede ser separada de la práctica pastoral de la Iglesia se ha convertido en habitual en algunos círculos», esa «no es ni ha sido nunca la fe católica».

6/03/14 5:06 PM

(NCR/InfoCatólica) Edward Pentin, del National Catholic Register, pregunta sobre la admisión a la Eucaristía de los divorciados vueltos a casar por lo civil al Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe:

- Algunos están preocupados por los cambios que se llevarán a cabo respecto a la enseñanza de la Iglesia sobre los católicos divorciados y vueltos a casar. ¿Se puede asegurar a los fieles que los cambios serán de tipo más pastoral que doctrinal?

Respuesta del cardenal:

En primer lugar, estoy agradecido por el hecho de que su pregunta me dé la oportunidad para clarificar un punto importante. La idea de que la doctrina puede ser separada de la práctica pastoral de la Iglesia se ha convertido en habitual en algunos círculos. Esto no es ni ha sido nunca la fe católica. Los últimos papas se han esforzado por subrayar el carácter vital y personal de la fe católica. El Papa Francisco ha escrito «No me canso de repetir aquellas palabras de Benedicto XVI que nos llevan al centro mismo del Evangelio: `No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva»´(Evangelii Gaudium, 7). Dentro de esta relación personal con Cristo, que abarca nuestras mentes, nuestros corazones y la totalidad de nuestras vidas, podemos comprender la profunda unidad entre las doctrinas en las que creemos y la forma en la que vivimos nuestras vidas, o lo que podríamos llamar la realidad pastoral de nuestra vivencia personal. La oposición entre lo pastoral y lo doctrinal es simplemente una falsa dicotomía.

En segundo lugar, tenemos que tener mucho cuidado cuando hablamos de las enseñanzas de la Iglesia. Si por «cambio» uno quiere decir negar o rechazar lo que había anteriormente, eso sería un error. Preferiría hablar de «desarrollo» de las enseñanzas de la Iglesia. La Iglesia no se inventa por sí misma aquello que enseña. Las enseñanzas de la Iglesia están enraizadas en la persona de Cristo, en el misterio del Dios que se revela.

Puede que, con el paso del tiempo, la Iglesia llegue a un entendimiento más profundo de este misterio. También puede suceder que nuevas circunstancias en la historia de los hombres arrojen una luz concreta sobre las consecuencias de este misterio. Pero, debido a que está enraizada en el mismo misterio de Cristo, siembre hay una continuidad en lo que la Iglesia enseña.

En tercer lugar, refiriéndome específicamente a la cuestión de la admisión a la comunión eucarística de los divorciados vueltos a casar, me remito al artículo publicando en el L´Osservatore Romano. Sin embargo, me gustaría recordar algunos puntos que señalé entonces. Primero, la enseñanza de Cristo y su Iglesia es clara: un matrimonio sacramental es indisoluble. Segundo, las personas cuyo estado de vida contradice la indisolubilidad del matrimonio sacramental no pueden recibir la Eucaristía. Tercero, los pastores y las comunidades parroquiales están llamados a apoyar a los fieles que se encuentran en esa situación con «solícita caridad» (Familiaris Consortio 84).

La preocupación de la Iglesia por sus hijos que están divorciados y vueltos a casar no puede reducirse a la cuestión de la recepción de la Eucaristía, y estoy seguro de que la Iglesia, arraigada en la verdad y en el amor, descubrirá los caminos y planteamientos correctos de formas siempre nuevas.

El cardenal advierte de la entrevista que, en relación a posibles cambios doctrinales, es necesario distinguir entra la realidad y la forma en que la misma es presentada por los medios de comunicación:

En particular, los medios seculares malinterpretan a menudo a la Iglesia. Desgraciadamente, laplican el modo de pensar del ámbito de la política a la Iglesia. Un líder político recién elegido puede cambiar o revocar la política de su partido. Eso no se aplica a un Papa. Cuando un Papa es elegido, su misión es ser fiel a las enseñanzas de la Iglesia y de Cristo. Puede encontrar modos nuevos y creativos de ser fie a esa enseñanzas, pero para el Papa, la realidad más profunda es la continua fidelidad a la persona de Cristo. Si los medios de comunicación ha creado expectativas erróneas, entonces estamos ante algo lamentable.

42 comentarios

Almudena

¿Queda claro?
Yo me alegro porque menuda tela la de estos días.
(No sin razón por otro lado)

6/03/14 5:26 PM

Maru Tadeo

La iglesia No debe cambiar principios y valores a conveniencia de algunos.

6/03/14 6:48 PM

Gregory

La doctrina de la iglesia se encuentra enraizada en la persona de Cristo, no deberian existir posiciones que expongan una contradicción entre la doctrina y pastoral. Y ciertamente la atención a las personas que se encuentran en esta situación es importante y necesaria. El Cardenal Muller gana puntos sin duda.

6/03/14 7:18 PM

Luis

Es triste, muy triste.
Después de 24 años de matrimonio canónico y de dos hijos educados en la fe católica, mi ex-mujer llegó un día a casa diciendo que llevaba más de un año liada con su jefe y que se iba a vivir con él ya que era el amor de su vida. Tres años después me pide el divorcio y aunque me negué, se lo concedieron.
De eso hace ya cinco años. Hace uno me enamoré de una mujer creyente, buena, practicante, cuyo exmarido la maltrataba (hoy en prisión). Yo era catequista, soy de misa diaria, hago el bien . . .que pena. Nos echaréis de la Iglesia.

6/03/14 7:19 PM

Un católico

Luis, cuando te estabas enamorando de esa mujer, ¿no leíste lo que Cristo te decía en el evangelio? ¿por qué pusiste el amor a esa mujer por encima del amor a tu Salvador, que te dice claramente que no te puedes volver a casar? ¿o es que lo que dice Cristo sobre ese tema no cuenta?

Nadie te echa de la Iglesia. Eres tú el que te has entregado en manos del adulterio. Tú solito. Pero ni Dios ni la Iglesia quiere que sigas viviendo en pecado. Hay gracia suficiente para que no te pierdas.

6/03/14 7:32 PM

Joaquín

Luis, nadie te echa de la Iglesia. Si te casas por lo civil con esa mujer de la que te has enamorado, no puedes comulgar porque estás en pecado mortal (adulterio permanente), pero no estás fuera de la Iglesia.

6/03/14 7:59 PM

maga

Luis,

el Cristo murio en una cruz y tampoco era su culpa. ( y encima era Dios!!). nuestra salvacion pasa por la aceptacion de nuestras cruces, Dios se sirve de esto (entre otras cosas) para hacer el bien.

6/03/14 8:00 PM

Juan Mariner

Sí, Luis, todos los topicazos habidos y por haber...

6/03/14 8:24 PM

Menka

Luis, si piensas en este mundo, eres un desgraciado.
Pero si piensas como cristiano, esperando la dicha en el Reino de los Cielos, tendrás tu recompensa en la eternidad por tu fidelidad, y la paz aquí abajo.

Por otra parte, si de verdad amas a Cristo, serás capaz de sufrir por el amor de los amores y serle fiel en la dificultad.
Y recuerda que serás juzgado por la Palabra de Dios.

6/03/14 8:43 PM

Andrés-Eduardo Luis

A un católico.

El Cardenal dice: "Las enseñanzas de la Iglesia están enraizadas en la persona de Cristo, en el misterio del Dios que se revela." [...] "puede suceder que nuevas circunstancias en la historia de los hombres arrojen una luz concreta sobre las consecuencias de este misterio. Pero, debido a que está enraizada en el mismo misterio de Cristo, siempre hay una continuidad en lo que la Iglesia enseña." ¿Habrá errado alguna vez alguien incluso la Iglesia? Es posible que de una época segura y cerrada se pase a ver algo en las circunstancias personales de cada vida humana en la que también se derrama, Luis, la misericordia de Dios.

6/03/14 8:44 PM

Gonzalo

Gracias, una vez más, al cardenal Müller por dejar las cosas claras.

6/03/14 9:00 PM

Antón

Como recuerda Müller, sólo puede haber un matrimonio en la vida. Para los católicos separados y divorciados debería haber comunidades que pudieran al menos paliar el dolor y el vacío que queda tras una ruptura, para que ésta les fuera más llevadera y encontraran un afecto diferente con el que llenar sus vidas. Bien es cierto que la Iglesia, al menos en occidente, no parece muy preparada para ofrecer ese tipo de caridad que fortalezca al afligido para no caer en el adulterio. Quien sabe si por el modo de vida que tenemos, por la fe que languidece o porque predominan actitudes como las de quien firma como "un católico", no abundan las parroquias que sirvan para acoger a los divorciados.

6/03/14 9:08 PM

Fernando Cienfuegos

El matrimonio es para siempre, si uno de los cónyuges fue infiel y se ha marchado eso no justifica que el otro haga lo mismo, Dios siempre da la gracia para llevar ese dolor, la iglesia no condena, al contrario acompaña pero tampoco cubre con un paño un adulterio. La iglesia no hecha a nadie . Luis pide a Dios porque algún día puedas estar nuevamente en gracia por ello es importante no alejarse e imagino que de esa ayuda habla el Cardenal. Por eso dice :La preocupación de la Iglesia por sus hijos que están divorciados y vueltos a casar no puede reducirse a la cuestión de la recepción de la Eucaristía

6/03/14 9:13 PM

Néstor

"Al mismo tiempo advierte que aunque «la idea de que la doctrina puede ser separada de la práctica pastoral de la Iglesia se ha convertido en habitual en algunos círculos», esa «no es ni ha sido nunca la fe católica»."

Ése es el punto. Bien por el Cardenal Müller.

6/03/14 9:35 PM

Enrique G. B. A.

No me convence el testimonio de un ex - "catequista", de "misa diaria", que dice será hechado de la Iglesia Católica, por caer en adulterio.
Si lo que narra de su vida es cierto, es de película, si falso es una burla al drama de tantos matrimonios fracasados.
Jesús fue claro, perdona una y otra vez a los adúlteros, pero les pide como respuesta a su misericordia que no pequen más.
El cardenal Muller agrega: "La preocupación de la Iglesia por sus hijos que están divorciados y vueltos a casar no puede reducirse a la cuestión de la recepción de la Eucaristía, y estoy seguro de que la Iglesia, arraigada en la verdad y en el amor, descubrirá los caminos y planteamientos correctos de formas siempre nuevas".

6/03/14 9:48 PM

cristina moreno alconchel

Mi marido me abandonó hace 7 años. Desde siempre he tenido claro que, además de la cruz que eso supone, está la del esfuerzo diario por ser fiel a un matrimonio válido ante Dios.
Llevo un grupo de casadas católicas separadas en BCN (redesparanocaeralvacio.blogspot.com) y tratamos frecuentemente del tema de la castidad tan difícil por no querida -somos casadas- y sabemos muy bien que la clave está en evitar situaciones que puedan llevar a un nuevo enamoramiento y, por consiguiente, al adulterio. Si es necesario dejar una catequesis, la vida social...se deja. Muy duro, Luis. Sólo posible con la gracia de Dios, que no permite cruces sin la gracia suficiente para llevarlas. Una gracia que acrecentamos en la confesión y, claro, en la eucaristía. No culpes a la Iglesia. Sé honesto y valiente. Ánimo.

6/03/14 10:13 PM

Carlos

Tristemente. Después de casi 10 años de novios y 17 de casados. Con dos hijos educados catolicamente. Activos participantes de vida parroquial mi ex mujer me pidió el divorcio. Tengo clarisimo que canonicamente sigo casado con ella y de hecho no me he quitado, ni me quitaré la alianza.

6/03/14 10:46 PM

Juan de los Palotes

No se pueden legislar los casos particulares, porque es la destrucción de la Ley, que es general y abstracta. Para los casos particulares y concretos están las sentencias. Y ya sabemos quién es el único Juez. El vendrá así que esperemos con esperanza y temor de Dios.

6/03/14 11:19 PM

Eulalio

Varios puntos:
1-) La Iglesia no puede cambiar la doctrina del evangelio sencillamente porque no la ha creado ella, la ha recibido del Señor, y la debe enseñar fielmente.
2-) La persona que desea que la doctrina de la Iglesia se amolde a su circunstancia o a sus "necesidades" personales está pidiendo que El Camino se convierta en el "camino anchuroso", está pidiendo que la sal pierda su sabor, y si la sal pierde su sabor para nada sirve, es echada en tierra y pisoteada.
3-) La Iglesia es luz del mundo, uno de sus objetivos principales es predicar el Evangelio de Jesucristo, y sabe que "si tu mano derecha te hace pecar mejor córtatela" y sabe que "quien ama más a su padre o a su madre, a hijo o hija más que a Mí no es digno de Mí", y sabe que "quien quiera salvar su vida la perderá".
4-) La Iglesia demuestra su misericordia predicando el Evangelio como Dios manda, no amoldando su predicación a cualquier circunstancia, razonamiento, argumentación o justificación humana.

7/03/14 1:08 AM

Maria Auristela

Leí la noticia de que el cardenal Kasper habría entregado al Sumo Pontífice Francisco un informe analizando la posibilidad de que los divorciados puedan comulgar. El resumen de sus argumentos me parecieron sin profundidad y asidero teológico. Por ejemplo, que el divorciado que quiera comulgar no haya sido culpable del divorcio. Que me explique cómo lo van a determinar. Si se lo preguntan a él dirá que fue ella, o viceversa. No será fácil determinar la verdad.¡Cuidado, Cardenal Kasper! ¡coja pausa!
¡Alerta Papa Francisco, no te vayan a meter base por bola, como se dice en el beisbol!

7/03/14 2:50 AM

Johnatan EA

Luis, no te juzgo, eres humano, y es normal que te atraiga una mujer, pero has lo que te dice Cristo y su Iglesia, se muy fuerte, ora mucho, yo te acompaño en mi oración, ante todo mantén tu alma sin tacha ni pecado..... me siento muy triste por tu situación, ha de ser muy duro... por eso lo repito, estaré orando por vos.... un abrazo desde Colombia...

7/03/14 3:02 AM

Saulo Medina Ferrer

Luis, lo que pides implicaría cambiar el evangelio en cuanto a lo que el mismo Cristo dijo sobre el adulterio, y la Iglesia no es la dueña de La Sagrada Escritura; tocaría que el mismo Cristo cambiara su palabra y eso equivaldría a que la verdad cambiara.

7/03/14 3:16 AM

Kelena

Excomulgar=
tr. Apartar [a uno] de la comunión de los fieles y del uso de los sacramentos.
Aqui el cardenal te explica q la excomunion es a medias, el divorciado si puede convivir entre los fieles pero no puede acercarse a los sacramentos.
Miles de divorciados viven privados de la comunión y sin embargo millones de jovenes solteros y y miles de casados catolicos disfrutan de este privilegio de la comunión practicando la fornicación y el adulterio!
Estamos tan enfocados en los pecados sexuales q pocos practicamos el verdadero amor, caridad y misericordia q realmente es lo q nos debiera distinguir como seguidores de Cristo.

7/03/14 4:35 AM

Fernando Nicolás

Tengo 36 años, soy soltero, no mantengo relaciones sexuales. Soy feliz. Mi madre es viuda, no mantiene relaciones sexuales, es feliz. Mi tía es monja, no mantiene relaciones sexuales, es feliz. Tengo otra tía, vive y está casada con mi tío, son ya mayores, no mantienen relaciones sexuales, son felices. Sus nietos son jóvenes y tampoco mantienen relaciones sexuales y no son ni más ni menos felices que el resto de sus compañeros de colegio. Se puede vivir sin lujuria; es más, donde hay lujuria no hay amor sino egoísmo, violencia. El que sufre de lujuria no es feliz, se siente solo, sin darse cuenta que esa soledad que siente es consecuencia de ese egoísmo propio de la lujuria. La modestia es maravillosa, es bella, atrae a las personas. La práctica de la modestia hace que la castidad no suponga ningún esfuerzo.
¿Cómo puede alguien que ama a nuestro Señor decir que le echan de la Iglesia? Es imposible, no me lo creo.
No me creo que un cristiano se pueda enamorar de nadie sabiendo que no debe. Tengo 36 años, mujeres a pares, de todas las edades, ninguna me conviene, por casadas o divorciadas, o por vivir fuera de la Iglesia. Cuando digo mujeres a pares no exagero, trabajo en clubs, de seguridad, muchas noches. Las hay que me piden ir a la cama nada más verme. Da pena, la lujuria a esas chicas las tiene sufriendo la soledad. Es imposible enamorarse de alguien sin querer, tiene que haber voluntad de enamorarse y de no evitarlo. Luis, antes de enamorarte ya habías negado a la Igles

7/03/14 8:27 AM

Un católico

Kelena, el no poder tomar la Eucaristía no significa estar excomulgado. No todos los pecados mortales, y el adulterio lo es, conllevan a la pena de excomunión.

NADIE, lee bien, NADIE puede comulgar si está en pecado mortal. Eso vale para casados, solteros y viudos. De hecho, si es de dominio público que un soltero o un viudo vive amancebado, aun sin estar casado por lo civil, tampoco puede acercarse a comulgar. Y si lo hace, comete OTRO pecado mortal. El sacerdote debe prohibirle hacerlo.

Te guste más o menos, Cristo fue claro. Quien se vuelve a casar tras un divorcio es un adúltero. No hay mayor caridad y misericordia que concienciar a quienes están en esa situación de la necesidad de que abandonen su pecado. De lo contrario, ponen en peligro la salvación de su alma. ¿Te parece poco importante eso?

¿Qué seguidor de Cristo es aquel que niega sus enseñanzas y vive en pecado públicamente sin arrepentirse?

Responde a esta pregunta del Salvador:
¿Por qué me llamáis Señor, Señor, y no hacéis lo que os digo?
(Lucas 6,46)

Por supuesto, esto vale para todo tipo de pecados graves, no solo los de naturaleza sexual. Pero los de naturaleza sexual también entran en el "paquete".

7/03/14 9:36 AM

Alana

Es importante destacar este artículo es realmente que estos argumentos una y otra vez se difundan, como bien nos dice Benedicto XVI en este artículo: «No me canso de repetir aquellas palabras de Benedicto XVI que nos llevan al centro mismo del Evangelio: `No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva»´(Evangelii Gaudium, 7).
Aquí en Alemania este es un tema de diario, siempre están discutiendo que quieren obligar a la Iglesia a que se acepten a los divorciados, parejas sin casarse y otros generos a la Comunión en la Iglesia Católica, siempre están diciendo que el Papa Francisco quiere reformas, entonces ellos piensan que una de Estas seria la "solución" de la exclusion de Estas personas en la Comunión!... No y no como bien dice aqui esto no se puede reducir solo a la Comunión. Si no se respeta el principio central de la Iglesia Católica porque a fuerzas obligar a que sea posible!! ... aqui en Alemania eso no lo entienden.

7/03/14 9:55 AM

Inés

El cardenal Muller expone la doctrina sobre el sacramento del matrimonio y recuerda que la pastoral no puede contradecirla. Y tiene razón.
También dice que la Iglesia, arraigada en la verdad y en el amor, descubrirá los caminos y planteamientos correctos de formas siempre nuevas para los que han fracazado. Y no hay duda que así será.
El Papa dice que no debemos ir a buscar esos nuevos caminos en base a la casuística. O sea buscar principios generales a partir de los casos particulares como hacían los fariseos. Dime maestro, había un caso de una mujer que tuvo siete maridos por viudez... etc. Y felicita al cardenal Kasper por su teología así como declara que busca que haya confrontación de posiciones entre los cardenales para encontrar los caminos nuevos. La propuesta del cardenal Kasper nunca fue ni cambiar la doctrina, ni implementar una pastoral que la contradiga sino pensar como ayudar a las personas concretas que siendo inocentes de la ruptura matrimonial no pueden cambiar su situación con su nueva familia y piden acceder al sacramento. No invento nada nuevo, ya se hacía las mismas preguntas Basilio, el Grande. Las preguntas son inquietantes porque para poder responderlas en cada caso no hay otro camino que el fatigoso del acompañamiento espiritual que puede durar años. Y todos sabemos que es más cómodo poner reglas ya sean rigoristas o todo lo contrario. En cambio ponerse la oveja herida al hombro y caminar con ella hasta que pueda hacerlo sola exige compromiso y duele

7/03/14 3:13 PM

Néstor

Es que si la comunión es para mí tan importante que no me importa ser miembro de una religión que cambia sus doctrinas a pedido del público, y que por tanto con eso solo, que no va a ocurrir, mostraría ya que no viene de Dios...ni la comunión por tanto tampoco...

Digo, si es tan importante, entonces ¿qué sacrificios estoy dispuesto a hacer para poder comulgar? ¿Qué debo sacrificar, la nueva relación que tengo, o la integridad de la fe de la Iglesia, y por tanto, el sentido y el valor de la comunión misma?

7/03/14 3:35 PM

José

Sobre el caso de Luis. Creo que hay casos y casos.La Iglesia debería tener en cuenta esto. En el caso de él, y lo digo de corazón, no creo ni por asomo que Dios lo condene por rehacer su vida. El no tuvo culpa alguna. Fue abandonado por su mujer. Su pareja era golpeada y de alguna manera su caso es parecido al de Luis. Repito, no creo que Dios condene que ambos rehagan su vida, ni que considere pecado su convivencia. Realmente no lo creo. Sería injusto de su parte y Dios es lo contrario, es justo. Es mi opinión.

7/03/14 4:07 PM

Juan

A Luis le dijeron "Sé honesto y valiente."

Yo lo planteo de otra manera: sé inteligente, o mas bien, sé sabio.

El sabio no es el que sabe muchas cosas, sino el que sabe vivir bien. Para eso tienes que entender cual es tu mayor bien. Ante ti hay dos bienes:

Por un lado el amor re-creador de Dios, que te da la participacion de la vida divina, que es vida eterna y culmina en la vision beatifica, el bien sumo, por toda la eternidad.

Por otro lado el amor de pareja de esta buena mujer, que es un bien limitado que puede durar tal vez 50 años.

Si ambos fuesen solteros podrias tener ambos bienes, pero es un hecho de la realidad que no lo son, por lo tanto no puedes tener ambos bienes a la vez, y tienes que elegir. Esa es la clave.

Vaya una analogia. Ante un diabetico hay dos bienes:

Por un lado estar bien de salud. Por otro lado el placer de comer unas deliciosas pastas. Si no fuese diabetico podria tener ambos bienes, pero es un hecho de la realidad que es diabetico. Por lo tanto tiene que elegir.

El sabio, en ambos casos, es el que entiende cual es su mayor bien, que en ambos casos está muy claro, y lo elige sin dudar.

Pidele a Dios la sabiduria.

7/03/14 4:33 PM

Charo García

Excelente y muy oportuna aclaración. Creo que Cristo edificó su Iglesia sobre una roca firme y sólida, precisamente porque conoce nuestras debilidades.

7/03/14 4:41 PM

Tomás

A Luis:
Ciertamente es muy doloroso el caso que presenta. Sin embargo, la doctrina de Jesucristo acerca de la indisolubilidad es clarísima y la Iglesia no puede menos de acogerla y ayudar a cada fiel a vivirla. El Estado no tiene ningún poder sobre el matrimonio cristiano, que es signo de del amor de Jesucristo por su Iglesia, que lo llevó hasta la cruz (Ef 5,22-3). La Iglesia tiene que hacer todo lo posible para que los fieles que se casen comprendan en qué consiste el Sacramento del Matrimonio y también su íntima relación con la Eucaristía. El matrimonio es también un compromiso de ayuda mutua para que los esposos vayan superando sus defectos y pecados y incrementando la fe, la esperanza y el amor que son fundamento de la vida cristiana. Siempre es posible que uno de los contrayentes se deje llevar por la concupiscencia y el pecado y traicione a su pareja y al Señor. Pero eso no quiere decir que lo que Dios ha unido lo puede separar el hombre. Si uno ha sido infiel, es no deshace el vínculo que Dios ha realizado. Obviamente es doloroso.
Un católico a quien le sucede un cosa así, ha de confiar en la gracia del Señor que le dará la fuerza de rehacer su vida y no debe iniciar relaciones románticas con otras personas. No está solo, ni mucho menos la Iglesia lo expulsa, pues la Iglesia no está por la labor de expulsar a nadie, pues las penas canónicas son medicinales. Una persona que ora, practica la virtud, ora y participa en la Eucaristía diariamente sin duda recibirá la gr

7/03/14 5:39 PM

Un católico

José, ¿qué más da lo que pienses tú? ¿acaso eres Dios? ¿acaso crees que Cristo fue injusto AL PROHIBIR que los que se divorcian por voluntad propia o son víctimas de un divorcio (Lucas 16,18) se vuelvan a casar?

¿Quién te crees que eres tú para decir que lo que enseña el evangelio es injusto?

Quien justifica el pecado se cierra las puertas a la salvación.

7/03/14 5:43 PM

Inés

Sin acompañamiento espiritual la persona por si sola no puede discernir en profundidad sobre el fracaso de su matrimonio. Una mujer puede decir mi marido me dejó y un hombre decir mi esposa se fue con otro. Pero por el dolor que siente puede que no se de cuenta que fue también su culpa el que ello ocurriera. Una persona le dice a otra que se ha vuelto a casar que vive en pecado mortal pero en realidad no lo sabe sin conocer el estado de la conciencia de esa persona. Otra le pone de ejemplo a fulano que vive en castidad pero tampoco sabe si esa persona no fracasará llegado el momento de la prueba o su castidad tiene más orgullo herido que santidad. Diferente es acompañar a cada persona en un discernimiento espiritual para ver cual es su camino posible a la santidad a partir de la realidad de su situación. Como dijo ayer el Papa a los sacerdotes ni el laxismo ni el rigorismo hacen crecer la santidad. Mientras que la misericordia acompaña el camino de la santidad y lo hace a través del sufrimiento pastoral, que es una forma de misericordia. Quiere decir – explicó Francisco- sufrir por y con las personas, como un padre y una madre sufren por sus hijos. Mas cómodo es aplicarle la ley: está en pecado mortal, debe arrepentirse y confesarse. O obviarla: Dios es misericordioso, según su conciencia vaya y comulgue.

7/03/14 6:25 PM

Un católico

Inés, a ver si nos dejamos de zarandajas. No hace falta ser culpable de un divorcio para saber que no te puedes volver a casar. Basta con leer el evangelio. Basta con conocer lo que la Iglesia enseña.

No hay conciencia inculpable cuando uno se casa tras haberse divorciado sabiendo que Cristo lo prohíbe. No la hay. Apelar a la conciencia para justificar el pecado es algo que los hombres llevan haciendo desde siempre. Y no hay mayor peligro que un autonconvencido de que está en paz con Dios cuando está al borde del abismo de la condenación por su rebeldía contra la voluntad divina.

Sabemos que no es fácil renunciar a enamorarse de nuevo después de un fracaso matrimonial, sobre todo si no se ha sido culpable del mismo. Pero, ¿quién ha dicho que esto de ser fiel a Dios y ser buen cristiano sea fácil?

Evidentemente hay que acompañar a quien ya ha caído en ese pecado para ayudarle a superarlo. Pero no hay mejor acompañamiento que indicarle que está en una situación que Cristo define como adulterio. ¿Lo entiendes? Eso no es aplicarle la ley. Es aplicarle el evangelio de nuestro Salvador.

Contra el pecado mortal, y el adulterio lo es, no caben las medianías, las tibiezas ni las componendas. Tampoco actitudes que alejen a los pecadores de la gracia de Dios. No hace falta ser severo en un primer momento. No hace falta amenazar con el infierno al que se acerca a buscar el perdón. Pero antes o después, hay que enfrentar al adúltero con su realidad y pedirle que deje de serlo

7/03/14 6:49 PM

Christian

Estimado Luis:

En casos como el tuyo, solo cabe escuchar la voz de la conciencia y acogerse a la Misericordia Divina. El Matrimonio es un compromiso mútuo. Si uno abandona, se rompe, simplemente. No se puede sostener un Matrimonio solo por una de las partes.
Por otro lado, Dios también dijo: "No es bueno que el hombre esté solo" así que es lógico y legítimo buscar un compañero o compañera, cuando se ha sido abandonado. La cruz ante esto será el no poder recibir a Cristo en la Eucaristía y a ser mal juzgado por quienes no están en tu misma situación, pero finalmente Dios, que es infinitamente compasivo y misericordioso, sabrá comprender el por qué tomaste la decisión de volverte a casar.
A la par, sería bueno intentar la nulidad del matrimonio para lograr la legalidad. Qué Dios te bendiga.

7/03/14 6:53 PM

Juan

Voy a complementar mi comentario anterior, tratando de hacer mas facil entender por qué, en el caso de Luis, la vivencia del amor de Dios y la participacion en la vida divina son incompatibles con su vivencia de un nuevo amor de pareja.

Obviamente la razon inmediata es que Jesus dijo "Todo el que repudia a su mujer y se casa con otra, comete adulterio; y el que se casa con la repudiada por su marido, comete adulterio." (Lc 16,18)

Ahora bien, ¿por qué Jesus nos manda eso? Porque la alianza matrimonial es signo de su propia alianza con la Iglesia, y esta alianza es indisoluble. Jesus nunca nos repudia, nunca rompe su alianza con nosotros, y esta siempre dispuesto a perdonarnos.

Por otro lado, la participacion de la vida divina, la "gracia santificante", se recibe siendo miembros de Cristo, porque es una participacion en la plenitud de gracia de la Humanidad de Cristo, "pues de su plenitud hemos recibido todos, gracia por gracia." (Jn 1,16) Ahora bien, para estar unido a Cristo hay que creer en El con fe no solo intelectual sino vital, la fe "que actua por la caridad" (Gal 5,6), la fe de Abraham, que hace que uno se ponga en marcha en el camino que Dios le indica, la fe que es una reorientacion radical de la vida en el seguimiento de Cristo, que es justamente el Camino que Dios nos indica.

Por lo tanto, si Cristo no repudia la Alianza con nosotros por mas que lo ofendamos, tu no debes repudiar la alianza con tu esposa, que es signo de la Alianza de Cristo con la I

7/03/14 7:39 PM

nora rodriguez

Gracias Jesus por enviarnos a tu elegido el papa francisco. nos hablaras desde el acercandonos a tu amor de misericordia..si no hay caridad y palabras que acerquen a todos sin distincion.. seguira siendo entonces una plataforma extructurada y compacta..donde ni entran ni dejan entrar..ojala se quiten las lujosas vestiduras..y todo lo que ofende. ya son pocos los ultimos dinosaurios. como dice la cancion.. sal fuera.

7/03/14 7:44 PM

Alejandro Galván

Ines:

"Una persona le dice a otra que se ha vuelto a casar que vive en pecado mortal pero en realidad no lo sabe sin conocer el estado de la conciencia de esa persona."

Hay que ser valientes; lo aplicamos a los otros 9 mandamientos? Comete pecado mortal el que blasfema? Seguro? En conciencia? El que asesina? Y si además tortura? Y el corrupto? Y el ladrón? Y el mentiroso? Quien conoce sus conciencias sino Dios? Porqué juzgarlas entonces?

7/03/14 8:16 PM

Juan

Christian dice: "es lógico y legítimo buscar un compañero o compañera, cuando se ha sido abandonado."

No, no es ni logico ni legitimo.

No es lógico porque contradice el mandato de Jesús, que es el Logos mismo.

No es legítimo porque "legítimo" viene de "ley", significa lo que está de acuerdo a la ley, y las palabras de Jesus son muy claras: el divorciado que se vuelve a casar adultera, lo cual viola el sexto mandamiento de la Ley de Dios.

Una cosa es que Dios comprenda por qué uno hace algo, y otra cosa muy distinta es que lo apruebe o repruebe. Dios siempre comprende (entiende) por qué hacemos algo, ya sea que ese algo esté de acuerdo con su voluntad o no lo esté. Pero sólo los que hacen la voluntad del Padre entraran en el Reino de los Cielos (Mt 7,21).

7/03/14 9:20 PM

Inés

Alejandro Galván dice: "Hay que ser valientes; lo aplicamos a los otros 9 mandamientos? Comete pecado mortal el que blasfema? Seguro? En conciencia? El que asesina? Y si además tortura? Y el corrupto? Y el ladrón? Y el mentiroso? Quien conoce sus conciencias sino Dios? Porqué juzgarlas entonces?

Catecismo1860. "La ignorancia involuntaria puede disminuir, y aún excusar, la imputabilidad de una falta grave, pero se supone que nadie ignora los principios de la ley moral que están inscritos en la conciencia de todo hombre. Los impulsos de la sensibilidad, las pasiones pueden igualmente reducir el carácter voluntario y libre de la falta, lo mismo que las presiones exteriores o los trastornos patológicos. El pecado más grave es el que se comete por malicia, por elección deliberada del mal."

Un impulso de la sensibilidad puede ser la necesidad de afecto, compañía y seguridad y el dolor del abandono también puede obnubilar la conciencia e impulsar a una persona no solo a requerir afecto sino a darlo a alguien que lo necesite, sin meditar en las consecuencias. Conozco muchos casos. No todos se vuelven a casar por lujuria. Sólo un acompañamiento que ayude a crecer en la intimidad con el Señor puede curar esas heridas del alma y tal vez la persona pueda entonces reconciliarse. Amen de que muchos sacramentos son nulos y las personas no lo saben ni lo pueden saber sólo por medio de los tribunales.

Le recomiendo que lea a San Basilio, esos problemas no son un invento de este tiem

8/03/14 12:30 AM

Luis Fernando

Esto se está convirtiendo en un debate sobre un caso concreto, así que cierro comentarios

La doctrina de la Iglesia es clara, tal y como afirma el cardenal Müller. Quien se vuelve a casar tras haberse divorciado, tenga o no la culpa del divorcio, está en una situación objetiva de pecado -Cristo lo llama adulterio- y no puede comulgar.

A partir de ahí, el tratamiento pastoral de cada caso puede ser todo lo personalizado que se quiera, pero el principio elemental se mantiene y la doctrina no puede ser puenteada por la pastoral. Es decir, no pueden comulgar mientras convivan conyugalmente con su actual pareja. Así están las cosas en estos momentos.

Acabo citando del artículo al que el Cardenal Muller hace referencia en la entrevista:

Si se esconden estos atributos de Dios y no se toma en serio la realidad del pecado, tampoco se puede hacer plausible a los hombres su misericordia. Jesús recibió a la mujer adúltera con gran compasión, pero también le dijo: «vete y desde ahora no peques más» (Jn 8,11).
La misericordia de Dios no es una dispensa de los mandamientos de Dios y de las disposiciones de la Iglesia. Mejor dicho, ella concede la fuerza de la gracia para su cumplimiento, para levantarse después de una caída y para llevar una vida de perfección de acuerdo a la imagen del Padre celestial.

Pues eso. El que tenga ojos para leer, que lea y entienda. Fin al debate.

8/03/14 10:27 AM

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