(Agencias) El cardenal Martínez Sistach calificó de positivo el anteproyecto de ley de protección de la vida del concebido y de los derechos de la mujer embarazada aprobado por el Gobierno porque «al reducir los supuestos de hecho para los abortos puede reducir el número». No obstante, añadió que la ley «por reductiva que sea, es injusta porque hay una vida humana».
A su juicio, la Iglesia no es machista y defendió que no haya mujeres sacerdotes porque «hay una tradición en la Iglesia de que sólo hubiera apóstoles». «No sé si se puede clasificar de machista. La Iglesia valora la dignidad de la mujer y le da confianza en lo que realiza. Hay una sola cosa, que es el sacerdocio, que no realiza», afirmó Martínez Sistach.
Sobre los homosexuales, opinó que «se les tiene que respetar como a cualquier otra persona» y añadió que las críticas al colectivo se producen porque «se da un juicio sobre sus actuaciones concretas» y la moral cristina califica como buena o malas «determinadas cosas» pero no solo en los gais.
Situación en España
Señaló que durante su audiencia con el papa habló de la situación de España, si bien no ha detallado si abordó la propuesta de consulta por parte del Gobierno catalán para la independencia.
«Hay cosas que dependen de católicos y no católicos. Esta es una cuestión que la sociedad tiene que decidir», sostuvo el cardenal arzobispo de Barcelona, quien también se ha pronunciado sobre la situación de la Iglesia en España. En este sentido, estimó que la gente desearía que fueran más coherentes: «los que hablamos tenemos que ser coherentes. Los políticos hablan mucho y ¿qué aplican? nosotros también predicamos mucho y a veces nos preguntan ¿qué hacéis?», continuó.
El purpurado sostuvo que la Iglesia también ha sufrido recortes y señaló que el 0,7% de la recaudación del IRPF no les da «ni para pagar los sueldos de los sacerdotes que no llegan ni a mil euros mensuales, no les llega para vivir».