(InfoCatólica) El P. Lamet asegura a Tamayo que «percibo en ti de un tiempo a este parte una postura extrema que produce la sensación de que te has puesto una coraza tal o revestido de un curioso personaje que no quiere bajarse del potro rebelde por sistema, pase lo que pase, sobre todo si las mejoras, los cambios, las buenas noticias proceden de la jerarquía».
Y añade:
En los últimos años te has ido convirtiendo en el «teólogo oficial de PRISA», llamado a opinar sobre todo por El País y la «Cadena SER». No nos engañemos, querido Juanjo, tú y yo sabemos con que intención recaban entrevistas estos medios en lo que a Iglesia se refiere. Yo lo he comprobado varias veces: «para que pienses como ellos». Recuerdo que no hace mucho la citada cadena me llamó para preguntarme sobre las declaraciones de un prelado español. Lo hicieron antes del directo «para saber cómo opinaba» y en otras ocasiones llegaron a recortarme dentro de una frase grabada en diferido para hacerme decir lo que pensaban. Si eres crítico, te incluyen; si dices un hecho real y noticioso aun probado con documentos que no les gusta, como que «la Pasionaria murió católica», te silencian.
Analizando lo ocurrido tras la llegada del Papa Francisco, el religioso jesuita asegura que «no deja de ser sintomático que hombres como Gustavo Gutierrez, Leonardo Boff, José María Castillo y tantos teólogos críticos abriguen esperanzas por la nueva imagen y algunos pasos de su pontificado. En ese sentido Dios y la historia irán diciendo".
«Pero», continua, «lo que no es de recibo es cerrar las puertas a toda posible conversión de la Iglesia «oficial», como pareces verter en tus últimas posturas sobre la Teología de la Liberación, durante el último Congreso»
«Según tu dictado», recrimina el jesuita al teólogo arriano, «la única solución para asumir los principales postulados de la TL sería o fundar otra Iglesia o salirse de ella, como cristianos por libre, rechazando de paso todo lo que hay de bueno en tantos obispos, curas, monjas y cristianos anónimos que quizás sin conocer ni por el forro a la TL intentan seguir de cerca a Jesús de Nazaret, dentro de la limitaciones y fragilidad que todos tenemos, tú y yo incluidos».