(EFE/InfoCatólica) Yuhana X denunció que «la guerra amenaza» a los países de la región y que es «cada vez más difícil alcanzar la paz», por lo que instó a la comunidad internacional y a la Iglesia a «tomar medidas para proteger a los civiles de la zona».
El patriarca se refirió en concreto a la guerra en Siria, donde EEUU y Francia parecen dispuestos a lanzar un ataque militar en respuesta al supuesto uso por el régimen sirio de armas químicas. «Los países por sus propios intereses deberían establecer bases para una solución pacífica en Siria, contribuir a la reanudación del diálogo y condenar la violencia de todas las partes», agregó.
En su alocución, Yuhana X recordó a los dos obispos secuestrados en Siria en abril pasado, el metropolita ortodoxo de Alepo, Paul Yazigi, y el metropolita siríaco ortodoxo de esa misma ciudad, Youhanna Ibrahim. Pidió ayuda para lograr su liberación porque, pese a los esfuerzos, la situación se encuentra en «punto muerto».