(HO/InfoCatólica) Pero los proabortistas van más allá para indicar falsamente que lo que solicita es que se le perpetre el aborto y que por ello el Estado salvadoreño deberá permitir el que siguen llamando aborto terapéutico para Beatriz.
Todo ello cuando ha quedado evidenciado que la situación de Beatriz es estable, que su vida no se pone en riesgo por su embarazo y que «no hay una razón médica para suspender el embarazo». Así lo han expuesto por unanimidad los médicos del Instituto Médico Legal (IML) que han participado en el informe pericial multidisiciplinar encargado por la Sala de lo Constitucional de la Corte Superior de Justicia de la Nación, que ayer ordenaba velar por el embarazo, al tiempo que por la salud de la gestante, sin que pudiera primar el derecho a la vida de uno sobre otra, y viceversa.
En dicho informe, el IML determina que Beatriz no tiene insuficiencia renal, - diagnóstico dicho por la ministra de Salud, María Isabel Rodríguez–, por lo tanto no peligra la vida de Beatriz., y que en cambio la joven presentaba «un estado de ansiedad reactiva», es decir, una alteración que surge al verse expuesta a situaciones estresantes.
Todo ello, además, cuando desde la Ciencia se insiste en el falso debate entre «aborto sí o aborto no» a raíz de esta caso, pues como indican los expertos, «superando las 24 semanas de gestación, no tiene sentido un aborto al existir una alternativa factible, la inducción del parto si Beatriz empeora. El aborto es más peligroso para la mujer, y además supondría la muerte del hijo de una manera mucho más traumática». Los expertos coindiden así con lo expuesto por la Asociación de Bioética, que participó en el informe del IML, recomendando un parto inducido o una cesárea, y no un aborto.
Así las cosas, el pronunciamiento de la CIDH, que conoció el caso la noche del miércoles y dio a conocer hoy su fallo, lo que dice es que se «requiere al Estado de El Salvador que adopte y garantice, de manera urgente, todas las medidas que sean necesarias y efectivas para que el grupo médico tratante de la señora B (Beatriz) pueda adoptar, sin interferencia alguna, las medidas médicas que se consideren oportunas y convenientes para evitar daños que pudiesen llegar a ser irreparables en la vida, integridad personal y salud», lo que no se corresponde con el aborto, que como ha quedado claro por los expertos entrañaría, junto a la elimiación de su hijo, un mayor riesgo para la mujer.
El Salvador tendrá hasta el 7 de junio para presentar a la Corte Interamericana un primer informe sobre el cumplimiento de las medidas provisionales. El Gobierno salvadoreño no ha confirmado si ya recibió la notificación de la CIDH.