(Agencias) «Su único delito fue que su hermano criticó a los rebeldes acusándoles de actuar como bandidos,que es lo que son», explica Sor Agnes. El cuerpo del taxista fue encontrado decapitado en una carretera rodeado de perros hambrientos.
La religiosa, de 60 años de edad, ha criticado a los gobiernos occidentales por apoyar a los rebeldes sirios a pesar de que cada vez se constata más el poco respeto que tienen por los derechos humanos, lo cual les hace no ser diferentes del régimen que pretenden liberar.
«El mundo democrático y libre está apoyando a extremistas que quieren imponer la sharia y crear un estado islámico en Siria», denuncia la hermana desde el monasterio de San Jaime el Mutialdo, en el Líbano, del cual es la superiora.