(PpE/InfoCatólica) Según Profesionales por la Ética, la medida, de confirmarse tras el trámite parlamentario, significaría el adiós definitivo a las polémicas asignaturas de adoctrinamiento ético y moral por parte del Estado. Para Profesionales por la Ética (PpE), se trata de una buena noticia para la libertad de educación y un reconocimiento del valor de la resistencia que miles de padres han mantenido frente al adoctrinamiento de sus hijos en las aulas españolas.
Jaime Urcelay, presidente de Profesionales por la Ética, ha pedido que dicho reconocimiento se logre «concediéndoles la normalización académica, con carácter retroactivo, en lo relativo a los suspensos sufridos por ser los objetores».
Alternativa a la asignatura de Religión
El otro dato importante es la aparición en el Anteproyecto de la asignatura de Religión, por completo ausente en el texto de septiembre. El nuevo Anteproyecto recupera ahora el pleno valor académico de la asignatura de Religión para la que en Educación Primaria y en ESO se establezcan alternativas a la Religión (católica, evangélica, musulmana o judía), concretamente Valores culturales y sociales en Primaria y Valores Éticos en ESO. Aparecen en todos los cursos de dichas etapas y la elección de una u otra alternativa (Religión o Valores culturales y Sociales (Valores Éticos) se deja en manos de los padres o tutores. Respecto al Bachillerato, Religión aparece en ambos cursos como una de las asignaturas específicas que pueden ser cursadas; el modelo hace innecesaria la alternativa.
Para Jaime Urcelay, presidente de Profesionales por la Ética, «la recuperación del valor académico de la asignatura de Religión como opción libre para los padres representa, sin duda, una mejora importante del Anteproyecto. Queda únicamente por conocer si las asignaturas alternativas (y por tanto voluntarias) a Religión son las adecuadas o, si por el contrario, reproducen de nuevo el conflicto debido a la imposición por el Estado de valores éticos, un papel que no le corresponde».
Para Profesionales por la Ética, el Anteproyecto de la LOMCE incluye otros aspectos positivos para la libertad de educación, como la mayor posibilidad de elegir la lengua vehicular, la autonomía para los centros educativos y la extensión de los conciertos.