(Vatican Insider/InfoCatólica) El sacerdote, de 69 años era párroco en el pequeño poblado de la provincia de Módena. Entró a la Iglesia, en compañía de los bomberos, para verificar los daños que provocó el primer terremoto de esta mañana. Pero mientras se encontraban todos juntos al interior del templo se verificó un segundo temblor. Los demás lograron ponerse a salvo. Él no; esos pocos instantes, que empeñó para salvar la pequeña estatua, fueron fatales.
Por la mañana quedó herido otro párroco bajo los escombros del Duomo de Capri. En un primer momento se había temido por su vida y se había difundido la noticia de su muerte. En realidad se encuentra en buenas condiciones y solo tuvo un poco de miedo como el resto de los parroquianos.
El número de fallecidos por los terremotos de ayer asciende a 16 personas, siendo 200 las que han resultado heridas. Las autoridades están intentando solucionar la situación de los 14.000 evacuados tras los terremotos de ayer y del pasado 20 de mayo.