«Deus ibi est», por Isidro Catela

La Iglesia ni tiene ni quiere tener privilegios, pero tampoco ser discriminada. Desgastar la imagen pública de una de las instituciones que más está haciendo por la gente que peor lo está pasando en la crisis, solo puede responder a intereses que nada tienen que ver con el bien común.

Ubi caritas et amor, Deus ibi est. Aunque lo parezca, no voy a hablarles de la Iglesia y del IBI. Al menos, no por el momento. Lo haré después de traducir la cita latina, para evitar confusión en aquellos que no manejen nuestra lengua madre. La popular antífona nos recuerda que «donde hay caridad y amor, allí está Dios». En efecto, ese ibi nada tiene que ver con el Impuesto de Bienes Inmuebles. En aquel caso, significa allí. Cada persona creyente que esté leyendo ahora este artículo puede ponerle distintos nombres y rostros cálidos al frío pronombre de lugar. Mientras los evocan, yo les propongo tres por los que he transitado.

Encontré caridad y amor en la Catedral de Santiago de Compostela cada vez que crucé el Pórtico de la Gloria, con la mochila al hombro y más de 500 kilómetros acumulados en las piernas y en el corazón. Los encuentro en la Eucaristía, a la que conmigo acuden en España más de un millón de personas cada día y cerca de 10 millones cada fin de semana. Y los encuentro, también, en el despacho de Cáritas parroquial donde a diario hacen fila, cada vez más gruesa por desgracia, miles de personas a las que se asiste en las más variadas y primarias necesidades. «¿Deberían pagar el IBI la Catedral de Santiago, el templo de mi parroquia y su despacho de Cáritas?, ¿no debería pagarlo la Iglesia católica, como hace todo hijo de vecino?», repiten a coro ciertas voces en calculada orquestación que coincide con lo más crudo de los recortes y la crisis que padecemos.

El primer bulo que hay que desmentir es que «todo hijo de vecino» paga el IBI. No lo pagan, por ejemplo, los partidos políticos, los sindicatos, los locales de la Cruz Roja, las fundaciones, los consulados, las federaciones deportivas, las embajadas, los terrenos de la RENFE, los inmuebles destinados a usos religiosos de las comunidades hebreas, musulmanas o evangélicas, y otras muchas instituciones en virtud de la Ley 49/2002, denominada Ley de Mecenazgo. Con todas ellas, la Iglesia católica comparte el régimen fiscal especial que se concede a entidades sin fines lucrativos, como puede verse en el Título II de la citada Ley.

Es fácil de entender: por ley, y no como privilegio, sino como exención fiscal compartida con muchas otras instituciones, no se paga el IBI por la Catedral de Burgos, como no lo pagan tampoco por el Museo del Prado, pero se pagan tasas que nada tienen que ver con el mencionado impuesto, como, por ejemplo, las de basura o las correspondientes al vado de una cochera.

En la misma línea que busca el descrédito general de la Iglesia, se intenta hacer creer que el IBI eclesial supone un porcentaje altísimo sobre el IBI que goza de exención. Sirva como ejemplo para desmentirlo el hecho de que en Madrid, donde están exentos del pago del IBI edificios como el de la SGAE o el del Hotel Palace, podrían recaudarse 109 millones de euros si no existiera exención alguna. Sólo el 5% correspondería a la Iglesia católica. Algunos ayuntamientos están contribuyendo a esta ceremonia de la confusión. Saben bien que no está en su mano cobrar el IBI, salvo en los casos excepcionales que hemos citado. Saben que si envían el recibo de un edificio exento por ley, lo más probable es que se lo devuelvan. Y saben también que pueden seguir enviando a las parroquias a todas las personas desesperadas que ellos no atienden por falta de presupuesto, porque en este caso, no se devolverá a nadie y se acogerá a todos, sin pedir el dni ni la partida de bautismo.

Por eso, conviene recordar que a los argumentos legales expuestos, cabe sumar poderosas razones morales. Parece lógico que se incentive y que se estimule -también fiscalmente- el trabajo de aquéllos que contribuyen con su labor a la configuración de una sociedad mejor. Así se hace en muchos casos. La Iglesia ni tiene ni quiere tener privilegios, pero tampoco ser discriminada. Desgastar la imagen pública de una de las instituciones que más está haciendo por la gente que peor lo está pasando en la crisis, solo puede responder a intereses que nada tienen que ver con el bien común. Afortunadamente, esa piel social que es la opinión pública (y la opinión publicada en los medios) no siempre va de la mano con los datos reales. Cada vez más gente llama a las puertas de la Iglesia, pero también, gracias a Dios, cada vez son más los que ayudan a sostener esa puerta, a pintarla, a arreglar las cerraduras y a mantenerla abierta.

Allí, donde hay caridad y amor. La Iglesia ya estaba allí antes de la crisis, antes del IBI y mucho antes de que el IBI se llamara Contribución Territorial Urbana. Ya estaba allí y en esos mismos lugares va a seguir estando, al lado de los nuevos pobres cuando volvamos a ser nuevos ricos.

Cuantos pertenecemos y amamos a la Iglesia, y todos aquellos de buena voluntad que quieran arrimar el hombro, vamos a seguir construyendo el edificio común. Quienes nos difaman, saben -porque ellos mismos lo experimentan- que responderemos al mal con el bien. Esa que muchos creen nuestra debilidad, es justamente nuestra fortaleza.

 

Isidro Catela Marcos, Director Oficina Informacion de la Conferencia Episcopal

Publicado originalmente en El Mundo el 25 de mayo del 2012

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10 comentarios

danii
yo estoy a favor de que se les cobre el ibi, tanto a federaciones deportivas como a entidades como la SGAE. A partidos políticos y sindicatos no porque según la constitución española son instituciones fundamentales del Estado. Las instituciones religiosas si se les debe cobrar ya que ni son instituciones del Estado, ni representan al pueblo o trabajadores, ni cumplen ninguna función solidaria. Dar la Comunión no tiene objetivamente nada que ver con la solidaridad. A Cáritas como si tiene función solidaria si se le tiene que eximir del IBI.
27/05/12 1:40 PM
Joaquín
Todos sabemos muy bien que lo que les interesa a esta gentuza es acabar como sea con la Iglesia. En la Guerra Civil se intentó hacer eso matando curas en masa, hoy se intenta arruinándola y desprestigiándola. Por ese motivo me parece un gravísimo error la actitud contemporizadora de monseñor Blázquez.
27/05/12 1:54 PM
Faramir
Dí que si, Danii, el PSOE, el PNV y UGT son instituciones (no lo son, son asociaciones) solidarias, que dan comidas a los pobres y los parados, formadas por gentes honra as a carta cabal. !Como les gusta a algunos ser esclavos!
27/05/12 6:36 PM
danii
Tanto los partidos políticos como los sindicatos os guste o no son instituciones básicas del Estado. Así viene explícitamente en la Constitución. Son los representates legítimos tanto del pueblo como de los trabajadores.
27/05/12 8:46 PM
Lector
En la Constitución también viene esto:

Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones.
27/05/12 9:00 PM
Oscar
Curioso, las personas que lo están pasando mal, van a las parroquias a pedir ayuda para que no les corten la luz, para poder comer algo, para pagar los libros de los niños, para que les den algo de ropa, para que no les quiten la casa ... ¿alquien ha visto colas en las sedes de los sindicatos o partidos políticos? Una amiga mía fue a un sindicato para pedir ayuda laboral, y le dijeron que se tenía que afiliar, y no la ayudaron; ¿alquien conoce si la Iglesia Católica ha rechazado a alquien por ser de otra religión, ateo, agnóstico, ... o si pregunta su ideología a las personas que se acerdan a pedir ayuda? La Iglesia ayuda y se desvive por el necesitado, y esto a los izquierdosos les sienta a cuerno quemado, por eso quieren acabar con la Iglesia (antes mataban curas y quemaban iglesias, ahora quieren acabar con ella por la difamación y la mentira) y a los parados y necesidos que les den ... Nunca les ha importando el obrero, eso si, han vivido y viven muy bien a consta del obrero, ésta es la realidad de los partidos y los sindicatos.
27/05/12 9:06 PM
Chimo Vice
Danii, deja de hacer el ridículo con tus arrebatos nada inteligentes.

Por cierto, Cáritas no tiene función solidaria sino caritativa, y si tiene que estar exenta del IBI, en lo que estamos de acuerdo te recuerdo que las sedes de Cáritas son las mismas parroquias, los mismos edificios titularidad de la Esposa de Cristo, la Iglesia Católica.

Te pese o no, la ley ampara a la Iglesia.
27/05/12 10:40 PM
OTRO LECTOR
Contestando a Danii:
Tienes una visión marxista de la sociedad, según la cual la sociedad debe servir al estado. En realidad es al revés: El estado está para servir a la sociedad y a las instituciones en que ésta se organiza. Éste es fin de la ley de mecenazgo, ayudar a la sociedad a organizarse, no penalizándola con impuestos excesivos. Y ésta es la razón para la exención del IBI a la mayor institución social de España, federaciones deportivas, museos, etc... Dado que la cultura, deporte, religión, etc... son bienes sociales que el estado de debe proteger.
27/05/12 10:50 PM
Luis Fernando
Danii, te puedes ir a provocar a otro lado. En este portal no se te va a publicar un solo comentario más.
28/05/12 1:56 PM
InfoCatólica
La decisión viene dada por el último comentario de Danii, que no hemos publicado.
28/05/12 2:00 PM

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