(ACI Prensa) Las declaraciones del prelado se realizaron en el marco de la Asamblea Sinodal Arquidiocesana: "Iglesia de Lima, a ti te digo ¡Levántate!", realizada del 6 al 8 de enero en la capital peruana.
«Lo decía el Papa cuando decía que ‘yo me he convertido a partir de que estuve contemplando el Sagrario’. Eso lo dijo en Trujillo. Bueno, discúlpenme pero nadie se convierte con el Sagrario. Todos nos convertimos a partir del encuentro con personas que nos interpelan y que son dramas humanos en donde surge la posibilidad de encontrar al Señor», afirmó el Prelado en una ponencia el 7 de enero, según se aprecia en un video publicado en el canal de Youtube del Arzobispado de Lima.
Mons. Castillo dijo que «en el sagrario puedo después sentarme a rezar y todo, y seguramente; pero es muy raro eso de que tenga uno iluminación en una situación de pasividad y de… La contemplación es sumamente importante pero en la medida en que la fe ha sido transmitida, alguien me comunicó la fe».
«Nadie es creyente porque se le ocurrió una mañana temprano. Todos somos creyentes porque alguien nos anunció el Evangelio, desde nuestra madre que nos hacía la señal de la cruz, la abuelita, el papá, la tía, los compañeros en el colegio, la comunidad cristiana o el grupo de canto», afirmó el Arzobispo de Lima.
«Es en las relaciones humanas en donde está escondido el Señor que aparece su presencia y nosotros la acogemos», resaltó.
En su ponencia, Mons. Castillo dijo a los participantes de la asamblea sinodal que «les hemos enseñado mal a ustedes, hemos traducido mal y con pésima teología: les hemos enseñado la fe del esfuerzo para alcanzar la gracia, no el don gratuito de la gracia que nos aborda y nos desborda, y que simplemente nos ponemos en sintonía con Él».
«Esta carencia de dinamicidad viene de ahí, de no haber comprendido el don. ‘Si conocieras el don de Dios y quién te dice dame de beber, tú le pedirías a Él y Él te daría agua viva’. Conocer el don de Dios es acogerlo, profundizarlo y dinamizarse», prosiguió.
«Por eso es que en una perspectiva de sujeto creyente autorreferente, o sea de persona humana creyente pero que, digamos, se guía por ciertas normas y una interpretación del don de Dios como normas, termina siempre en una situación que no se interpela jamás por un referente», dijo.
«Nunca se interpela, siempre tiene la verdad. Entonces no escucha, no está atento a las situaciones. Es una especie de humildad, podríamos decir, un poco extraña», agregó.
Una fuente interna del Sínodo dijo a ACI Prensa que en una sesión posterior Mons. Castillo pidió disculpas por sus palabras sobre el Sagrario. ACI Prensa no ha confirmado hasta el momento con una fuente independiente las disculpas expresadas por el Arzobispo de Lima.