(348) Sínodo. El mundo es pasando, pero Cristo permanece para siempre
–Cómo pasa el tiempo… El próximo domingo, Cristo Rey. Y al otro, el Adviento. Un nuevo Año litúrgico.
–Todo cambio, todo lo nuevo, estimula al hombre, aunque sólo cambie de cepillo de dientes. Y es que sin saberlo aspira al final, cuando el Señor diga: «he aquí que hago nuevas todas las cosas» (Ap 21,5).
Para entender los profundos desacuerdos manifestados en los Sínodos 2014-2015 es necesario conocer, aunque sea a grandes rasgos, la historia de las filosofías modernas.