(425) La muerte cristiana, 10. –en Beatriz de la Encarnación, religiosa
–Las buenas religiosas son lo mejor de la Iglesia.
–No podemos saberlo; pero me parece bastante probable que así sea.
Hoy se conoce poco la vida religiosa porque hay pocos religiosos; y hay tan pocos religiosos porque se desconoce la vida religiosa. Los fieles cristianos han oído alguna vez la frase de Cristo: «Si quieres ser perfecto, anda, vende tus bienes, da el dinero a los pobres –así tendrás un tesoro en el cielo– y luego ven y sígueme» (Mt 19,21). Pero hoy la mayoría no cree en ella, porque hace ya medio siglo que vienen oyendo una enseñanza contraria a la del Maestro: los caminos de la vida laical y de la vida religiosa, objetivamente considerados, son totalmente equiparables en orden a la perfección evangélica. Tesis que es falsa, por ser contraria a la palabra de Cristo y a la experiencia y enseñanza de la Tradición y del Magisterio apostólico.