¿Es tan difícil ser católico?
Leyendo aquí o allá, cuando se escucha denunciar supuestas - o reales - deficiencias en la predicación o en la celebración de la fe, uno puede llegar a pensar: ¿Es tan difícil ser católico? ¿Supone el entrar a formar parte de la Iglesia de Cristo un esfuerzo ímprobo, una búsqueda sin término, una investigación ardua y laboriosa, al alcance sólo de unos pocos? Y si uno ha nacido en el seno de la Iglesia, ¿es verdaderamente cuasi imposible permanecer en ella? ¿Están los fieles tan desasistidos como algunos dicen estar?