Álvaro Cuesta tiene licencia para decir sandeces
Hay personas que se manifiestan como son. En ellas no hay disimulo ninguno y se les puede aplicar aquello que dice que “es mejor callar y parecer tonto, que hablar y demostrar que lo eres”.
Es bueno, de todas formas, que algunos pongan las cartas, podridas, sobre la mesa para que, luego, no se puedan sacar una carta trucada escondida en la manga.
Pues una de tales personas es Álvaro Cuesta, a la sazón (¡Nada más y nada menos!) que secretario de Libertades Públicas del PSOE. Ha tenido a bien que sacar la lengua a pasear para soltar, por entre su barba, algunas sandeces muy propias, por otra parte, de personas de su basurienta ideología.