Todos los difuntos, fieles, hoy es
Oración por las benditas almas del Purgatorio-Purificatorio
“Padre amoroso y misericordioso sobremanera,
Padre que creaste a tus hijos e infundiste en ellos
un alma. Tú quieres siempre tenerlos a tu lado
y esperas que vayan contigo para habitar
en tu definitivo Reino.
Sabes, sin embargo, que no todas están limpias,
que no todas pueden atravesar la puerta
que ofrece la Visión Beatífica,
que no todas pueden gozar de la Bienaventuranza
una vez habiendo perdido la vida material.
Te rogamos por tales almas, aquellas que esperan,
las que te aman y te alaban
porque saben que las amas.
Te rogamos por aquellas que esperan de nosotros,
Iglesia militante, una oración, un ruego,
una petición de auxilio a tu santo corazón
y bondadosa memoria.
Tú, Padre del Cielo y de la Tierra,
Creador de los infinitos campos de tu Reino
y Hacedor de los goces del mismo,
Tú que anhelas junto a Ti a las almas todas
que has creado,
auxílialas, que nuestras oraciones llenen tu corazón
de aliento para ellas, que sepamos ser fieles
a Ti y que, por eso, las mires con misericordia.
Tú, Padre de todo poder, poderosísimo Creador,
mira con bondad las peticiones de clemencia
para las almas que esperan tan cerca de tu Casa,
sé, para ellas, esperanza que nunca muere, Agua Viva
que vivifica y limpia sus manchas, luz que ilumina
si se encuentran a oscuras por sus faltas o pecados.
Padre, sé, para ellas, el destino que tanto anhelan,
la meta en el camino, en su medio camino, hacia Ti.
Amén.”
Esta oración creemos es adecuada para el día de hoy. Y es que celebramos un día tan especial como aquel en el que recordamos a las Benditas Almas del Purgatorio-Purificatorio. Esto es, el de los fieles difuntos que, no estando aún en el Cielo, esperan el momento en el que, después de limpiar sus manchas en tal estado intermedio, puedan habitar algunas de las mansiones que Jesucristo está preparando en la Casa del Padre.
Sobre este tema, y muchos otros, no puede negar el que esto escribe, que tienen gran amor por lo escrito por la Beata Ana Catalina Emmerick. Pues bien, en una de sus muchas visiones y revelaciones nos muestra, también, cómo es el Purgatorio-Purificatorio. Seguramente es muy importante lo que dice porque puede mover a conversión y a afirmación de su fe a quien lee lo que escribe. Sin embargo, es más importante todavía lo que dijo la Beata alemana acerca de la necesidad de acordarse de las benditas almas del Purgatorio.
Así, en un momento determinado dice lo siguiente (Visiones y Revelaciones completas, Ciudadela Libros, SL., 2012):
“Triste cosa es que las almas benditas sean ahora tan pocas veces socorridas. Es tan grande su desdicha que no pueden hacer nada por su propio bien. Pero cuando alguno ruega por ellas o padece o da una limosna en sufragio de ellas, en ese mismo momento cede esta obra en bien de ellas y se ponen tan contentas y se reputan tan dichosas como aquel a quien dan de beber agua fresca cuando está ya a punto de desfallecer de sed. ¡Ah! ¡Cuánto tienen que padecer las pobres almas a causa de su flojedad y tibieza, de su piedad relajada, de su falta de celo en promover la gloria de Dios y la salud del prójimo! ¿Y qué otro medio hay de socorrerlas, si no es la cantidad satisfactoria que ofrece por ellas aquellos mismos actos de virtud con relación a los cuales se descuidaron durante su vida mortal?
Los santos del Cielo nada pueden hacer en expiación y satisfacción de las culpas que están purgando las almas benditas; todo lo tienen que esperar ellas de la Iglesia militante”.
Nos habla nuestra Beata de la “Iglesia militante” que es lo mismo que decir Iglesia en el mundo, en el siglo o, así de claro lo decimos, habla de nosotros mismos, los que habitamos en la Tierra y caminamos hacia el definitivo Reino de Dios.
Se nos pide, por tanto, oración, petición al Padre Dios Todopoderoso de abundancia de bienes espirituales en favor de aquellas almas que, deseándolo más que mucho, esperan ir al Cielo, subir donde no hay padecimiento ni llanto ni nada que pueda considerarse negativo.
De todas formas, aunque se por egoísmo espiritual, nunca deberíamos olvidar que hay algo que sí pueden hacer las almas del Purgatorio-Purificatorio: pedir a Dios por sus bienhechores que en el mundo pedimos, a su vez, por ellas. Eso sí lo pueden hacer. Por eso nos conviene tanto (incluso sin pensar en tal beneficio espiritual) dirigirnos a Dios con oraciones, ofrecimientos de obras o, en fin, lo que se nos pueda ocurrir para ser escuchados por el Todopoderoso que sea en bien y beneficio de tales almas Benditas.
Seguros estamos que, ahora mismo, están mirando nuestros corazones y esperando un consuelo, un alivio de su sufrimiento, un, en fin, auxilio de nuestra parte.
Benditos aquellos que, sabiendo de la bondad de Dios, piden por las almas que se purifican. Amén.
NOVENA AL BEATO MANUEL LOZANO GARRIDO, “LOLO” www.amigosdelolo.com
Día 9º
Para todos los días de la novena
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
V/: Señor, ábreme los labios. R/: Y mi boca proclamará tu alabanza.
V/: Dios mío, ven en mi ayuda. R/: Señor, date prisa en socorrerme.
Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Oración inicial
Oh Dios, que en el corazón del Beato Manuel Lozano Garrido has infundido una gran alegría y sencillez para que en el sufrimiento irradiara el sentido salvífico del dolor; concédenos, por su intercesión y ejemplo, anunciar dignamente el Evangelio con obras y palabras. Por J.C.N.S. Amén
Reflexión propia para cada día (ver en su lugar más adelante)
Oración de los fieles
Confiando en la intercesión del Beato Manuel Lozano Garrido, supliquemos con toda confianza a Dios, nuestro Padre, que escuche nuestras plegarias.
1. - Por la Santa Iglesia que, instituida por Jesucristo y conducida por el Espíritu Santo, peregrina hacia la casa del Padre: para que, en obediencia y comunión con el Santo Padre N., sea luz para los que buscan sinceramente al Señor y anuncie incansablemente su salvación. Roguemos al Señor.
2. -Por nuestro Obispo: para que el Señor esté con él y le fortalezca y su pastoreo al frente de la Diócesis sea para gozo y alegría de esta Iglesia. Roguemos al Señor.
3. - Por los gobernantes y los que tienen en sus manos las riquezas del mundo: para que, por intercesión del Beato Manuel Lozano, sean dotados por Dios de sabiduría y prudencia al administrar el bien común, teniendo en cuenta sobre todo a los más necesitados y desfavorecidos. Roguemos al Señor.
4. - Por los enfermos y los discapacitados: para que en su tribulación experimenten la misericordia de Dios y puedan sentirse como Lolo dichosos de contribuir a la salvación de sus hermanos unidos a la Pasión de Cristo. Roguemos al Señor.
5.- Por los responsables de las comunicaciones sociales: para que Dios les infunda la voluntad de informar con honradez y verdad y conceda a los periodistas cristianos el celo ardiente que resplandeció en el Beato Manuel Lozano. Roguemos al Señor.
6.- Por los militantes cristianos y los laicos más comprometidos en la misión de la Iglesia: para que se sientan impulsados a anunciar el Evangelio con el mismo ardor con que lo hizo el Beato Lolo, tan identificado con el espíritu de la Acción Católica. Roguemos al Señor.
7.- Por los catequistas y educadores cristianos: para que asimilando con amor la verdad de Cristo, acierten a ser como Lolo luz para el ciego, pies para el cojo, oído para el sordo y habla para el mudo. Roguemos al Señor.
8.- Por todos nosotros: para que, siguiendo el ejemplo de Lolo, nos revistamos de los sentimientos de Cristo y demos con nuestras obras y palabras testimonio de su amor. Roguemos al Señor.
Encomendemos ahora la intención personal o particular de esta novena.
Oración: Oh Dios, que animaste al Beato Manuel Lozano Garrido para que alimentara con sus escritos, e iluminara con su ejemplo a tus hijos probados por la enfermedad, atiende nuestras súplicas y haz que, fructificando en buenas obras, avancemos fielmente por tus caminos. Por J. C. N. S.
Oración final (Todos):
Padre, te damos gracias por encontrarnos con tu Amor extremo a través de la vida del Beato Manuel Lozano Garrido, “Lolo”.
Te damos gracias porque por tu Espíritu imprimiste en él la imagen de tu Hijo Jesús.
Te damos gracias por su fe firme, por su amor a la Eucaristía, por su celo apostólico, por la valentía en sus escritos, por su paciencia y testimonio en la enfermedad, por su alegría permanente.
Te pedimos que, imitando sus pasos de cristiano, te hagamos presente en nuestros ambientes y que, como él, nunca dudemos que contamos siempre con la mano suave y firme de nuestra Madre la Virgen María.
(Oración aprobada por el Obispo de Jaén)
Reflexión para este día: La fuerza salvadora del Señor.
Texto bíblico: Lc. 1, 46-56.
El retrato “físico” de Lolo lo traza él mismo: Mis pies no andan, pero tengo alas de ilusión; mis manos no tocan nada, pero acarician el universo; mis ojos no ven pero estoy familiarizado emotivamente con todas las figuras (Las estrellas se ven de noche, p. 149).
En el Antiguo Testamento parece como si se despreciara a los ciegos y a los cojos (Lev. 21, 18): eran minusvalías que impedían el servicio al templo. Pero Jesús vendrá a cambiar esos esquemas (Mat. 21, 14). Hay dos milagros concretos de Jesús en Jerusalén, que cuenta con detalles preciosos el evangelista S. Juan, y que encierran todo un símbolo: Jesús cura a un paralítico en la piscina de Betesda (Jn. 5, 1ss). Y también cura a un ciego de nacimiento, mandándole que se lave en la piscina de Siloé. También uno y otro milagro los hace Jesús en sábado; por eso se enfurecen los judíos con él. Con estos milagros quienes están “excluidos”, quienes son considerados inútiles, se convierten en útiles, en ágiles y fuertes, y en luz para los demás.
Es todo un símbolo de la vida de Lolo: paralítico y ciego. Pero por la fuerza de Dios se hace misionero y evangelizador.
Mis antiguos amigos, ya misioneros… Me figuré un mapamundi y con cada nombre he ido haciendo una banderita. Luego los fui colocando en el sitio donde están: Japón, India, Filipinas. ¿Qué podía hacer yo, siempre quietecito, en aquel redondel de pies infatigables? Miré al mapa y vi que el centro estaba vacío. Y como nadie me veía, saqué tímidamente una bandera del corazón y la planté en el eje. Aquí tenéis amigos (pensé) un pozo de dolor. ¿Queréis que vaya reuniendo en él vuestros ríos de sudor para subirlos todos juntos a ver si ponemos en marcha la entraña del mundo? (Las golondrinas nunca saben la hora, p. 187).
Los inútiles salvan al mundo; porque ellos son “los gemelos de Cristo que muere inútil” (Rev. Orate, dic. 1963).
La lección completa nos la explicó Santa María:
Derriba del trono a los poderosos y ensalza a los humildes.
La vida de Lolo, cojo y ciego; el Beato Manuel Lozano, con su pesada cruz de 28 años inmóvil también explica lo mismo: Pesa la cruz. Sí; pero tiene alas. Y así se hace misionero y evangelizador.
Reflexión: ¿Piensas en la Iglesia y en las “fronteras” más difíciles de su misión: el cuidado de los enfermos terminales, de infectados de SIDA, de niños hambrientos, gentes desesperadas? Los lugares “difíciles” del apostolado: entre los marginados, los presos, los más pobres Allí está presente la Iglesia (momento de silencio).
Pedimos al Señor, por medio del Beato Manuel Lozano, que suscite en su Iglesia abundantes y preparados catequistas, misioneros, y vocaciones consagradas, rezando un Padre nuestro.
Oración de los fieles y oración final: Como todos los días.
Eleuterio Fernández Guzmán
Para entrar en la Liga de Defensa Católica.
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Panecillos de meditación
Llama el Beato Manuel Lozano Garrido, Lolo, “panecillos de meditación” (En “Las golondrinas nunca saben la hora”) a los pequeños momentos que nos pueden servir para ahondar en determinada realidad. Un, a modo, de alimento espiritual del que podemos servirnos.
Panecillo de hoy:
Todos los fieles difuntos, todos los que Dios quiso que fueran fieles y ellos quisieron serlo. De esos nos acordamos hoy.
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Para leer Fe y Obras.
Para leer Apostolado de la Cruz y la Vida Eterna.
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